CAPITULO V

SEÑORIO TAIPICALA

Inicio del Señorío

Los rayos del sol despertaron a Apu Tambo, a su lado Mama Cora aun dormía plácidamente. Hacía solo cuatro meses que llegaron a la Isla y los trabajos estaban adelantados; pero su matrimonio con una joven Hanan Ayllus, lo tenían preocupado.

- En que piensas -la pregunta hecha por Mama Cora sorprendió a Apu Tambo, quien no se había percatado que ella despertó y hacía rato que lo estaba observando.

- Me preocupa tener que elegir una nueva esposa – dijo pensativo Apu Tambo-. Creo que deberías ser tu quien la elija, ya que compartirás con ella todos los derechos que, como mi Coya, hoy tienes.

- Eso ya lo sé, desde el momento en que acepte la boda, en aras de la continuidad y unidad de nuestra raza. – dijo Mama Cora-. Pero me parece que deberías pedirle a los Caciques Hanan Ayllus, que sean ellos los que elijan a quien deberá ser tu segunda Colla, ya que será ella la representante de los Hanan Ayllus en la Familia Real. Aunque creo debería ser una joven de la Familia Huari del Ayllu Chavín, al que pertenecieron todos los emperadores de nuestro Imperio.

- Es cierto, eres inigualable mi querida Colla - Contesto Apu Tambo y haciendo una reverencia a su bella esposa, salió de la habitación y se dirigió al salón en el cual realizaba todas sus actividades.

Lo primero que hizo fue ordenar a uno de sus asesores, informar a los Curacas Hanan, Hurin y al Jefe de Sacerdotes Cachi Huallpa, que los necesitaba con urgencia.

Minutos después llegaron Cachi Huallpa y los diez Curacas, de inmediato fueron recibidos por Apu Tambo, quien luego de un breve saludo les dijo:

- Quiero informarles que estoy muy satisfecho por la labor realizada por todos los que ahora conformamos este pequeño Señorío Taipicala, pues estamos cumpliendo con todas las tareas que nos hemos propuesto, los andenes en todos los cerros de la isla ya están terminados y la  construcción de waru warus en las llanuras (Plataformas de 1.5 metros de alto por 12 a 15 metros de ancho y 200 metros de largo formada por tres capas la inferior de piedras, luego una de arcilla y pequeñas piedras y la superior de graba o tierra de cultivo, entre ellos surcos para que corra el agua derivados de los ríos o acequias). Antes de dos semanas justo en la fiesta del Oma Raymi iniciaremos la siembra en todos los campos de nuestra isla.

- Asimismo, quiero tratar con ustedes – La elección de mi segunda Colla y que de acuerdo con mi Colla Mama Cora consideramos que debería ser una joven de la familia Huari, ya que hasta ahora ha sido la familia a la cual han pertenecido todos nuestros emperadores, pero son los Hanan Ayllus quienes, en última instancia deberán decidirlo.

Los cinco Curacas Hanan se miraron entre sorprendidos y alegres, pasados unos segundo Tisoc Huari el Curaca de los Chavín Ayllu propuso:

- Apu Tambo, seguros estábamos de que cumplirías tu promesa de tomar como segunda Colla, a una joven Hanan Ayllus y es muy grato que seas tú, quien nos pide que elijamos a quien será tu esposa.  Solo te pedimos nos otorgues un tiempo razonable para ponernos de acuerdo y elegir a la mejor de nuestras jóvenes, no solo para que tenga el honor de ser tu esposa, sino también que sea la representante de los Hanan Ayllus en la Qhapaq Ayllu puquina y que garantice que, en un futuro cercano, existan descendientes divinos que serán Hanan Ayllus.

- Agradezco tus palabras Tisoc Huari -cortó Apu Tambo-. Será un honor para mí tener como esposa a una joven Hanan Ayllus y espero esto nos haga ser más unidos y olvidar que nuestro pecado y la causa de la caída de nuestro imperio se debió a los enfrentamientos entre Hanan y Hurin Ayllus.

También quiero poner en su conocimiento que el matrimonio real solo puede ser realizado por el Willac Uma y como yo ya dejé de serlo, al ser nominado por los 10 Curacas aquí presentes como Sapa Qhapaq de los Hanan y Hurin Ayllus, he decidido elegir como nuevo Willac Uma a Cachi Huallpa, quien actualmente es el sacerdote de mayor jerarquía; pero ese nombramiento, requiere ser ratificado por el Consejo de los Ayllus fundadores.

El más sorprendido con la nominación fue Cachi Huallpa, pero su sorpresa fue mayor al ver que los 10 curacas Hanan Ayllus y Hurin Ayllus ahí presentes, aprobaron de inmediato su nominación.

Unas lágrimas rodaron por las mejillas del viejo tío del ahora Sapa Qhapaq de los Hanan y Hurin Ayllus.

Y finalmente, propongo ante al Consejo, la elección como Jefe del Consejo de Asesores del Señorío Puquina a Tisoc Huari. Curaca de los Hanan Ayllus.

La moción, sin discusión alguna fue de aceptada por los 10 Curacas, que de inmediato celebraron felicitaron a Tisoc, quien rodilla en tierra agradeció su elección, diciendo:

- Agradezco al Consejo y en especial a nuestro Sapa Qhapaq Apu Tambo por haber propuesto mi nominación como Jefe del Consejo de Asesores y prometo poner todo mi esfuerzo para lograr la grandeza de nuestro Señorío. 

Apu Tambo miro muy satisfecho a todos los presentes, todo se iba realizando según lo planificado y las relaciones entre los Hanan y Hurin Ayllus eran excelentes.

En ese momento la Mama Cora ingreso al Salón del Consejo y rompiendo todo protocolo se acercó a su esposo y tomada de su brazo invito a todos los Curacas a pasar a al ambiente adjunto del palacete en el cual se había preparado una cena de celebración todos los logros obtenidos desde el inicio de su llegada a la Isla del sol hasta las recientes nominaciones de Cachi Huallpa y Tisoc Huari. Como era su costumbre Mama Cora había invitado también a las esposas de los 10 Curacas y a la esposa de Cachi Huallpa.

La reunión fue todo un éxito, los jóvenes Curacas Hanan y Hurin Ayllus (Ninguno pasaba de 25 años) habían dejado atrás todas las diferencias que tuvieron en el pasado sus padres y en forma muy fraterna se integraron e intercambiaron de parejas al realizar las danzas propias de los puquinas, los deliciosos platos de comida y la chicha de maíz y de quinua que corrieron a raudales propicio que la celebración se prolongara hasta altas horas de la madrugada.