★ CAPÍTULO 13 ★

OLIVIA

No había dormido mucho por aquella pesadilla, estaba muy cansada así que hice caso a Patrick y me quedé en la enfermería mientras él había ido a comprar algo para comer. Abro los ojos y lo primero que veo es a él, también me estaba mirando hasta que se acerca a mí, me levanto un poco para quedar sentada, él me acerca una infusión y la pastilla que la enfermera me receto. Trato de pasar la pastilla, ya que no me gustan mucho las pastillas.

—¿Cuánto tiempo me he quedado dormida? —le pregunté.

—Dos horas.

—¡Dos horas! —no podía creerlo— ¿Y por qué no me despertaste?

—Es que se notaba que estabas muy cansada, hasta babeaste en la almohada. —señala la almohada, y se la tiro en la cara.

—Idiota, ¡Te dije que las clases son importantes porque la próxima semana empiezan los exámenes! —me levante de la camilla, agarre mis cosas y las medicinas.

Trato de salir lo más rápido de la habitación, el vendaje que llevaba en la rodilla me hacía fricción y se me dificultaba caminar. Casi tropiezo al salir, pero Patrick me sujeta del brazo para evitar que caiga.

—Si quieres puedo ayudarte a estudiar, pero en verdad necesitabas dormir.

—Suéltame, puedo caminar sola. —parecía que no me escuchaba porque no hacía caso a lo que le decía.

—No, no puedes. Deja de ser orgullosa y déjame ayudarte.

Algo que no podía permitir, era que me ayudasen, siempre tenía ese miedo, de que las personas utilizarían eso para reprocharte las cosas. Por eso no quería la ayuda de Patrick, tenía miedo de que el me reprochase luego de eso.

Él me ayudo a caminar hacia mi otra clase, se paró en frente de la puerta y me paré firme porque al parecer quería llevarme hasta mi asiento, pero no iba a permitir que me avergonzara frente a mis compañeros.

—Bueno hasta aquí llego tu recorrido, Romeo. —no sé porque dije eso.

—Oh no, Julieta, mi recorrido no termina aquí. —sentí sus brazos bajo mis piernas y su brazo en mi espalda. Me había cargado y estaba entrando a mi aula, me preguntó dónde era mi asiento, con una mano me cubría la cara de vergüenza y le señalo donde era mi asiento. Él me lleva hasta ahí, empiezo a escuchar los murmullos de la gente y definitivamente estaba roja, como un tomate.

—Te odio. —se lo dije al oído, antes de dejarme bajar de sus brazos.

—Yo más. —dice, y hace que mi cuerpo reaccione de una forma diferente y rara.

Veo como se despide de mí y sale del aula, todo el salón no dejaba de mirarme, eso me hacía sentir incomoda. Pero a veces recordaba los consejos de Emma, cuando decía que no le tomara importancia a que dirá el resto de lo que yo haga, y deje de sentir miedo, un poco.
 

PATRICK

Si que esta chica me hacía hacer locuras, ¿en qué estaba pensando?, lo peor de todo esto, es que no podía borrar la sonrisa de mi cara, y tampoco podía borrar su mirada de mi cabeza.

Llegue a clase y Jake me esperaba desesperado, tal vez pensaba que no iba a venir.

—Oye, pensé que no vendrías, es demasiado tarde. —mira su reloj de mano.

—Es que ayude a Olivia, estaba con ella en la enfermería.

—¿¡Que le sucedió!? —hablo muy fuerte—. Lo siento, ¿pero que le sucedió? —susurró.

—No lo sé, cuando iba de camino aquí, la vi subiendo las escaleras y parecía que tenía la rodilla lastimada y cuando vi mejor, me di cuenta que estaba sangrando. Por eso la lleve a la enfermería, pero no podía dejarla sola, ya que la enfermera le dijo que descansara un rato, pero como ella es medio terca casi de escapa.

—Guao, sí que eres todo un Romeo, me pregunto que si también la dejaste en su aula y la cargaste ¿cierto?

—¿Cómo lo sabes? Que yo sepa, tu inteligencia no sobrepasa la mía. —me reí

—Idiota, hay un video de eso.

Qué

—¿Un video? —no podía creerlo

—Sí, al parecer se reenvió a toda la universidad. 

Trato de sacar mi móvil y veo que a mí también me llego el video. Se ve como la cargo en mis brazos a ella hasta dejarla en su asiento. Definitivamente esto no le va a gustar a Olivia. Escucho como en el salón se escuchan los murmullos de la gente, pero desaparecen cuando entra el maestro.

Luego de esa clase, se escucha el timbre sonar, y salgo en busca de Olivia; espero que siga ahí.
 

OLIVIA

Vi en mi móvil el video que me han enviado, parece que toda la universidad lo había recibido también. Salgo del aula, con mi mochila en el hombro y los libros en la mano, estaba cojeando ya que me dolía al caminar. Alguien pasa por mi costado empujándome, haciendo que caiga al suelo, mis libros cayeron y la gente pasaba pisándolo todo. Mientras secaba mis lagrimas recojo mis cosas y trato de levantarme aguantando el dolor de mi rodilla. Me voy lo más rápido, salgo de la universidad y escucho que gritan mi nombre a lo lejos, pero hago oídos sordos. Hasta que alguien me toma del brazo, era Patrick

—¡Tú ocasionaste esto! —grité y me liberé se su agarre.

—No, no, Yo no he hecho nada, yo tampoco sabía lo del video, escúchame por favor...

—Déjame en paz. —me di la vuelta y seguí mi camino. 

Estaba harta de que siempre me hagan sentir ridícula, estaba cansada de muchas cosas, hasta de mí misma.

Cuando llegué a casa por la tarde, dejé de lado mis cosas, no había nadie en casa y fue lo mejor. Fui hacia mi habitación, y me dirigí hacia el baño a tomar una ducha. Ya en la ducha, traté de sacar el vendaje de mi rodilla y vi que había empeorado, por la caída que tuve. Abrí la llave y dejé el agua correr por mi cuerpo, solamente estaba parada ahí, sin hacer nada, el agua caliente quemaba mi piel, pero no le preste atención. Traté de llorar lo que más podía, pero no, no salía nada de mí, como si estuviera vacía, como si fuera una lata.

Salí del baño luego de un buen rato, ya con la bata puesta, busque un nuevo vendaje para mi rodilla y tome las medicinas que me dijo la enfermera. Me recosté en mi cama, encendí la lampara y vi las estrellas en el techo, fije mi mirada en eso hasta que empecé a quedarme dormida. No dejaba de pensar en ese video, ¿Patrick tenía que ver con esto? ¿Quién lo hizo? ¿Por qué él?