Mírame
Prefiero tu alegría
ante el enjambre de abismo que habita en tu ser.
Conozco que tocar la puerta
no es entrar
pero solo una vez
mírame.
Y déjame entrar a los estratos que atan a tu corazón
solo Dios sabrá
cuantas de mis huellas se filtraron en tu piel.
Existe el odio
ante la luz y el amor escondido en la oscuridad
permíteme mantener a raya
la ambigüedad
que atormenta tu mente.
Solo debo cruzar la extensión de tus océanos
para calumniar tus demonios
a cambio de mi luz.