Si fueras para mi

Epílogo

1 semana después

Las cosas estaban mejor en la vida de Christopher y Mónica, Christopher le había dicho a Mónica que también se estaba enamorado de ella, habían ido a comer un par de veces en la casa de los padres de Christopher, y Giselle los había ido a visitar, pero un día, Mónica se pone a pensar, Christopher aún no había conocido a su familia, solo había hablado a través de la video llamada con Fiorella, pero era porque Mónica prefería que conociera al resto de su familia en persona, entonces mientras Christopher usaba su laptop sentado en el sofá aproximadamente a las 4 de la tarde, Mónica se acerca a él y se sienta a su lado.

- Oye, ahora que recuerdo, tú no conoces a mi familia.

- Claro que sí, conozco a tu hermana, Fiorella. - Dijo Christopher sin dejar de ver la laptop.

- Pero no conoces a mis padres, o a mi hermana menor, Elizabetta. - Dijo Mónica cruzando sus brazos.

Christopher cierra un poco la laptop sin apagarla y mira a Mónica.

- ¿Qué quieres decir con esto? ¿Quieres que conozca a tu familia?

Mónica asiente varias veces y suspira.

- Es que, no puedo negar que los extraño un poco.

Christopher cierra más su laptop apagándola y la coloca sobre la mesita que estaba en frente de ellos.

- Vamos a visitarlos. - Le dijo Christopher a Mónica mientras le agarraba sus manos.

- ¿Cómo? - Le pregunta Mónica asombrada, creía no haber escuchado bien.

- Quiero que vayamos a visitar a tu familia, en Italia, además que nunca he ido a Italia así que, conoceré a Italia y a tu familia. - Dijo Christopher riendo sin soltarle sus manos. Mónica suelta sus manos, lo abraza y le susurra en su oído un “gracias”, se alegraba de volver a ver a su familia.

Unos días después

Mónica no había llamado a su familia para avisarles que irían, quería darles una sorpresa, Christopher le había insistido en ir en avión, por lo que, en unas horas, llegaron a Bari, y luego pidieron un taxi para ir a Venosa, al llegar a la casa de Mónica, ella toca el timbre cargando con una mano su maleta y Christopher la otra, a los pocos segundos, la madre de Mónica abre la puerta y al verla la abraza con fuerza.

- ¡Mónica! ¡Que sorpresa es verte! - Gritó sin dejar de abrazarla, se da cuenta que iba acompañada de Christopher y lo mira.

- ¡Oh! ¿Quién es este apuesto chico? -

- Mamá, es mi novio, Christopher Mack, Christopher, esta es mi mamá. -

Christopher estira su mano agarrando la mano de la madre de Mónica.

- Es un placer conocerla, señora. - Dijo Christopher sonriendo.

La madre de Mónica aprieta su mano, la mueve de arriba hacia abajo y luego abre un poco más la puerta.

- El placer es todo mío, pero por favor, ¡entren!

Mónica y Christopher entran y estaba Elizabetta viendo la televisión en la sala, al ver a su hermana, se acerca corriendo y la abraza.

- ¡Mónica, volviste! - Mónica corresponde al abrazo con su mano libre y luego Elizabetta ve a Christopher.

- ¿Quién eres?

- Soy Christopher, el novio de Mónica, es un placer. - Le dijo con una sonrisa.

- Yo soy Elizabetta, la hermana de Mónica, papá mira, Mónica trajo a su novio, Christopher. -  Le dijo a su padre que se levantaba y se acercaba a los recién llegados.

- Es un placer conocerlo, señor.

A los minutos, apareció Fiorella y todos se pusieron a hablar, Mónica les dijo todo lo que había pasado últimamente, eso asombró al resto de su familia menos a Fiorella que ya estaba al tanto de las situación, Christopher y Mónica se quedaron unos días en la casa de sus padres y luego volvieron a Colonia, Mónica consiguió un trabajo como traductora y Christopher volvió al trabajo, podría decirse que las cosas, habían salido muy bien tanto para Mónica, como para Christopher.

-…

-…

-…

Mientras tanto, el arcángel Gabriel miraba a través de una pantalla cómo iba la vida de Mónica, tenía una sonrisa sobre su rostro, su plan había funcionado.

Un hombre de cabello largo blanco se acercó se puso a observar la pantalla, estuvieron en silencio por unos cuantos segundos.

-Tenías razón, Mónica Valentini cumplió su misión, tienes que observarla un tiempo, si esta nueva clase de ser funciona, se pondrán crear más como ella y el mundo mejorará, necesitamos seres como Mónica para que vayan eliminando poco a poco la influencia del diablo en la Tierra.-Dijo el hombre.

-Tiene toda la razón…Señor. -

Y allí, el hombre se fue dejando al arcángel pensando, en lo que tendría que pasar Mónica y quien será la siguiente persona que se volvería un fantasma.  

FIN



#13652 en Novela romántica
#6737 en Fantasía

En el texto hay: romance, drama, romancejuvenil

Editado: 09.06.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.