3. Chica crush

Cuando Daniel volvió a la pastelería al día siguiente, poniendo más cuidado a su rebelde pie, no esperaba encontrarse con la dueña de la pastelería.

Kya Yone (hay que dejarlo en Yone)

—Hola, buenos días —saludo Daniel, un poco decepcionado de no ver a Jia tras el mostrador.

—Hola, buen...¿Daniel? —pronuncio Yone. Daniel se impresiono de que ella conociera su nombre, por un segundo paso por su mente la imagen de una hermosa Jia que le hablaba a su compañera de trabajo de lo mucho que se divirtieron juntos cuando solían ser amigos, pero al observar bien su rostro, se dio cuenta de por qué sabía su nombre y sin duda, tenía que ser ella.

—¿Yone? ¿eres tu? ¡vaya, ya ha pasado tiempo! has cambiado mucho.

Kya Yone (Yone) era la mejor amiga de Jia, en la escuela siempre pasaban el tiempo juntas, eran inseparables. Yone era quien animaba a Jia a que se acercara a su crush, siempre estaba para alentarla. Incluso el día en que Daniel hizo sentir incomoda a Jia, Yone fue en su búsqueda y los encontró charlando muy alegres.

—Lo siento, no era mi intención interrumpirlos —había dicho aquella vez.

A pesar de que Jia pasaba más tiempo con Daniel que con ella. Desde que ellos se hicieron amigos, Yone no se sentía celosa, en cambio, estaba triste por otros asuntos, y más que nada, porque se cambiaría de escuela y no sabía si volvería a ver a Jia.

—Lo mismo digo de ti —sonrió Yone—, pero ¿aun eres un lindo frambuecito? ¿lo recuerdas? ¿el apodo que te puso Jia en ese entonces? —ella soltó una carcajada.

Él recordó ese día, los tres comían frambuesas cuando Jia mencionó a un personaje animado de un comercial de galletas, llamado "frambuecito", que al sonreir se veía lindo, ella decía que se parecía mucho a él. Yone y Jia se veían muy alegres al notar el parecido.

—Lo que yo recuerdo es que te solían llamar Chica crush.

Ella recordó como las chicas la miraban mientras se sonrojaban en secreto y le mandaban una que otra carta. Su apodo era porque era considerada el crush de varias chicas. 

—No es mi culpa que las chicas se sintieran atraídas hacia mi —Yone hizo una pose coqueta —, no las culpó.

Esta vez, fue Daniel quien río.

—En parte el corte de tu cabello ayudaba, pero ahora tu cabello ya no es corto.

—Ahora lo comprendo —ambos rieron en un gesto divertido.

—Me alegra saber que tu animo no ha cambiado —dijo Daniel, mirándola con una sonrisa sincera.

—Lo mismo digo.

En ese momento, Daniel tuvo curiosidad sobre ella y su reencuentro con Jia.

—Entonces ¿venias a comprar algún postre?

—Sí, pero antes ¿puedo preguntarte como es que ahora trabajas aquí con Jia?

—¿Cómo sabes que Jia trabaja aquí? —se sorprendió Yone.

—No es la primera vez que vengó, espera ¿Jia no te mencionó nada sobre mi?

—La verdad, no —al escuchar eso, Daniel sintió como si un rayo lo hubiera partido por la mitad—¿Por qué crees que me impresione tanto al verte? De hacerlo sabido... ¿eh? ¿qué te pasa? ¿por qué de pronto te pones triste?

—Ella y yo dejamos de ser amigos desde hace tiempo, ya te contaré, dime ¿cómo fue su reencuentro?

—Esta bien, pues, después de que me gradúe de la escuela, ingrese a la carrera de derecho en la universidad, pero la abandone porque mi sueño era tener mi propia pastelería, mis padres no estuvieron de acuerdo, pero aun así seguí mis sueños y puse todo mi esfuerzo hasta que lo logre —Daniel ponía atención al relato, tratando de no envidiar el hecho de que Yone hubiese alcanzado sus sueños primero—. Mis padres después estuvieron felices de mi decisión al ver el resultado de mi esfuerzo.

—¿Eso quiere decir que no trabajas con Jia? —Daniel acaba de darse cuenta de algo.

—Como podrás percatarte, pues sí, yo soy la dueña —Yone lo dijo con un gesto apenado. Él se impresiono de ella—así que sí, si supones que Jia trabaja para mi, pues prácticamente así es —Yone cambio a una expresión más sería—. Mientras buscaba unos artefactos que me hacían falta en el negoció, de una manera, casi nada inesperada, me encontré con Jia, ella... —Yone pareció dudar—al parecer buscaba un trabajo de medio tiempo, así que le ofrecí trabajar aquí. Es algo temporal, así que creo que esta bien para ella mientras busca un trabajo diferente.

Al escuchar la palabra "temporal" a Daniel le dio algo de tristeza imaginar que uno de esos días entraría a la tienda y ya no estaría ahí su crush, tal vez como en ese momento, en que ella no estaba.

—Y... —Yone interrumpió sus deprimentes pensamientos, lo miraba con notable curiosidad—dime ¿qué fue lo que causo que ustedes dos se separaran?

—Bueno, fue una discusión, sobre...

De repente, se escucho un sonido tras de él, la puerta de la pastelería se había abierto y Jia acababa de entrar.