No tengo idea de que atajo tomamos para llegar aquí, pero estamos de nuevo en el pequeño quiosco en el que nos conocimos, mis manos tiemblan y siento como si algo muy fuerte oprimiera mi pecho con tal fuerza que no me permitiese respirar.
Por un momento no soy capaz de decir algo, mi mente está en una guerra en la que debo decidir de qué manera explicar todo, y si él me tomo de la mano entonces me cree, me cree por sobre su primo, aunque odio ser la culpable de que aquella relación tan maravillosa que había entre ellos haya terminado por mi culpa.
-Lo siento, en verdad lamento haberte hecho pasar por esto pero quería ver que tan honesto era mi primo, vi cómo te sujeto por la fuerza, y, aunque no lo hubiese visto de cualquier manera habría creído en ti, debiste decirme- sujeto con fuerza la madera del agarre del quiosco y mantengo la mirada hacia las luces lejanas que emite la casa.
-Lo siento, yo no quería mentirte, pero tampoco quería herirte, aunque creo que he hecho ambas cosas-.
-Ey, por supuesto que no- escucho sus pasos acercarse, sin embargo no soy capaz de dar la cara. –Venus, por favor mírame, lo que sea que él te haya dicho sobre nuestra relación me importa poco, creyó que por el cariño que le tenía me alejaría de ti, pero me importa un carajo porque perdió su oportunidad, y yo no pienso perder la mía ¿entiendes? Tu eres parte de mí ahora, los eres todo Venus-.
-Tuvo razón el algo ¿sabes?-.
…
-Venus, ya basta- es lo único que puedo decir, parece estar demasiado afectada por no haberme dicho la verdad, pero eso no me importa en lo absoluto, sabía que tenían un pasado el cual para ella no era de su agrado, sin embargo jamás quise tomar el tema, quizás porque no quería escuchar la verdad, pero ahora que lo sé no me importa.
-No, él dijo que aunque creas que has encontrado a la persona correcta, esa persona terminara hiriéndote terriblemente, con mentiras, y yo ya lo he hecho- tiro de su brazo haciéndola girar hacia mí, sus manos están frías, sus ojos acuosos y rojizos.
-¿Y crees que en las relaciones no hay cosas como esta? Habrá muchas cosas que sobrellevar, yo tendré que vivir con el hecho de que hay muchos tipos que te quieren, que cuando te vean te saludarán y no estrechando las manos, sino que te abrazaran como si no hubiese un mañana, como por ejemplo Taylor, y el tipo del pasillo tres, también a Samanta quién siempre trae consigo a un chico nuevo para presentarte, porque jamás olvidé cuando querías conseguir al chico del cargamento que estaba en el orfanato para Campbell-.
Noto que una sonrisa comienza a formarse en su rostro pero no del todo.
-Tendremos que aceptar los nombres horribles que el otro quiera ponerle a nuestros hijos, y bueno, lo peor será cuando me quieras asesinar porque le cortare mal el cabello a nuestro hijo de tres años y todo porque no quise que alguien más lo hiciera porque yo aseguraba poder hacerlo, estará llorando preocupado por su imagen y la mirada asesina de su madre hacia mí, y eso no importara porque seguiré amándote, aunque espero que no pidas el divorcio porque también le quite media ceja-esta vez sí sonríe, mi corazón vuelve a latir a un ritmo normal al momento en que sus brazos me rodean y su cabeza queda sobre mi pecho, de manera en que solo me queda bajar un poco la cabeza para poder tomar ese aroma tan característico de ella, es algo suave y dulce que nadie más podría tener.
Hemos vuelto con mi madre quien al parecer tenía mucho tiempo buscándonos.
-La familia está a punto de llegar, hace unos minutos llamaron avisando que les faltaban quince minutos, quédense cerca, tu padre aún no ha vuelto de la empresa, al parecer hay algunos problemas que necesita arreglar-.
-¿Se refiere a la señora Mila?- mi madre me observa con seriedad al escuchar lo que ha dicho Venus, bueno, supongo que debí explicarle unas cuantas cosas.
-No linda, Mila no viene cuando los Moohan están aquí, en conclusión, Mila e Iris no se llevan para nada, no tenemos mucha información pero dicen que Evan estaba enamorado de Mila, pero ella de él no, y aunque Iris lo sabía se casó con él, y no es que Mila lo amara porque jamás lo quiso de esa manera, lo amaba como a un hermano, después de todo crecieron juntos…-.
-Mamá ya basta, no tienes pruebas de nada-.
-Buenas noches- al parecer los Moohan han llegado, la sonrisa falsa de la tía Iris es algo realmente incómodo, lo que es verdad es que ella odia a toda la familia Truswel incluido mi tío Evan, sin embargo su estatus social y económico fueron perfectos para ella y su familia quienes solo buscaban más conexiones. –Linda velada, algo simple como es tu costumbre Grace, simple y sin clase- mi garganta arde antes cada una de sus venenosas palabras, Venus deja de sostener mi mano y se acerca a mi madre con una sonrisa, acomoda su brazo en el suyo y fija la mirada en la tía Iris, su sonrisa y mirada no parecen de compasión.
-Se equivoca señora Moohan, la velada sobrepasa los límites de lo increíble, lo único simple y sin clase son las personas que vienen aquí simplemente a molestar y criticar a una casa ajena en la cual le abrieron las puertas aun sabiendo que ese tipo de personas son un asco en cuanto a su personalidad, no sé usted pero creo que personas como ese tipo que describo en este momento deberían de agradecer el haberles invitado, o simplemente deberían quedarse en su casa a disfrutar de la amargura y ahogarse en su propio veneno. Ahora si nos disculpa, iremos por una copa de champagne para celebrar por el propósito de esta velada-.
#2019 en Novela romántica
#703 en Chick lit
amor a primera vista, amor en la oficina, misterio romance terror y locura
Editado: 25.12.2019