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Kook entendió que si Tae no estaba allí no había razón alguna para quedarse así que sus padres y él podrían regresar a Corea…
Camino despacio quería recordar ese lugar por mucho tiempo, ingresó a la residencia, vió a sus padres y los notó un poco afligidos…
—cariño estamos para ti, para lo que necesites, sabes que Tae te quiere mucho pero por ahora…
—dejalo amor! Es un Jeon saldrá adelante, se va a preparar para cuando se vuelvan a encontrar!
Kook se acercó y los abrazó —bueno que esperamos hay que irnos, no crean que no se qué ya tienen los boletos de viaje?
—hombre brillante, ya está todo listo así que es hora de partir!
Un nuevo día los recibió kook en Corea y Tae en Dublín.
En la actualidad.
Tae despertaba después de que la dosis de medicamentos pasarán el efecto, había descansado en efecto pero no era como antes, eso de medicarse para dormir sinceramente era horrible, y Seo Joon que lo conocía tan bien y sabía más o menos su tiempo de sueño ya estaba ingresando a la habitación con una charola con alimentos…
Tae miraba por la ventana le gusta ese clima frío, de cierta forma ver la nieve era algo que le gustaba, de vez en cuando hacía patinaje sobre hielo como algo extra en su amplio currículum.
—debes comer Taehyung, y después tomas una buena ducha, y haces o hacemos algo que quieras, recuerda que mañana empieza una semana cargada de trabajo, no deseo usar más dosis de las planeadas así que debes estar tranquilo, entiendes?
—Si SeoJoon… está bien haré lo que me recomiendas, deseo ir a caminar -le dedicó una mirada manipuladora-
—nos congelaremos pero está bien tal vez un poco de realidad te caiga bien!
Se sentó frente a Tae quien estaba comiendo sus alimentos en un pequeño comedor para dos en su habitación…
—Tae sabes que soy tu amigo pero también soy tu terapeuta personal y por lo tanto debo de hacer preguntas que a lo mejor no te gustan pero debo hacerlas, estamos en eso?
Tae solo asintió con la cabeza, sabía para dónde iba esa conversación…
—qué sucede con Jungkook?
—no se si pueda decírtelo ahora SeoJoon!
—pero sabes que? Debe ser ahora, llevamos dos meses aquí en Moscú, y me has dicho lo mismo una y otra vez y ahora ya no hay más después me lo dices hoy o debo de llamar a tu doctor y ponerlos al día, sabes que no deseo hacer eso, si encuentra alguna irregularidad tendremos que volver a internarte y lo digo para tu bien, mi intención principal es que estés bien y si debo de llegar a los extremos lo voy a hacer! —sabes que ya no puedo seguirles mintiendo a los Kim ellos te quieren como su familia antes que formar parte de la compañía eres su familia, lo comprendes?
—ok… ok… dejaremos la salida para otro descanso porque esto será largo Joon muy largo y si te veo cabeceando te daré un puñetazo en la cara!
HACE UNOS AÑOS ATRÁS…
Trabajar para la multifacética compañía SUNSHINE era el sueño de cualquier bailarín que se quisiera dedicar a eso, era de lo más glamoroso y lo más alto si de niveles estamos hablando, los profesionales y famosos solo querían a los bailarines que eran de gran calidad y capacidad, está compañía empezó desde abajo y cuando fue heredada sus nuevos dueños de dieron de lleno para competir con las que estaban por sobre todas y con total entrega y dedicación que fueron tres años en la lucha campal lograron entrar en las grandes ligas, donde por su máxima calidad fueron tomando más fama y más valor, pese a que sus dueños no eran bailarines pero comprendía a los que se daban en cuerpo y alma a esa bella manera de expresar el arte.
Por tres años vieron a esa pareja de esposos trabajar hombro a hombro, de madrugada, altas horas de la noche, comían si tenían el tiempo, agendas llenas y pilas de documentos, fueron tres años donde todos los de administración estuvieron a punto de colapsar, sin mencionar a los bailarines que tenían en varios niveles pero los que estaban en la categoría gold, "los élite" eran unos cuantos, era la máxima adquisición de Sunshine, los bailarines más cotizados del país y en ocasiones del mundo, todos los que ocasionalmente habían trabajado con los Kim anhelaban volver a trabajar con ellos, ya que su lema más grande era proteger al bailarín.
Después de tres años, decidieron bajar un poco el ritmo del trabajo no sin dejar la calidad de lado, porque se dieron cuenta que su personal no iba a sobrevivir a otro año de locos, habían crecido tanto que les era muy difícil de manejar la situación. Ya con más tiempo, con fines de semana libres cosa que era muy extraño, Nam y Jin habían sido amigos desde la secundaria, pero no eran amigos tan cercanos, solo habían hecho una que otra tarea juntos, ya en la universidad solían tener un punto de encuentro cuando tomaban el autobús… Después de hacer uno que otro proyecto en la universidad se hicieron más cercanos, mientras Nam tenía novia Jin hacía pasantías quería tener un poco de experiencia antes de entrar de lleno a lo laboral…
Todo cambió el día que Nam fue cortado de una, en esa relación, donde perdió la vergüenza y la dignidad pues le rogaba a esa chica que volviera con él, Jin quiso presentarle otras chicas pero se negó, cuando el testamento de los padres de Nam fue leído, estaba sorprendido, la cláusula fijamente decía, antes de tomar el cargo de la empresa y recibir las posesiones debe casarse!
Pensó en buscar a EunMin y rogarle nuevamente pero después de más de ocho meses como que no… su segunda idea fue contratar a alguien para casarse por lo menos unos tres años, pero era estúpido como iba a convivir con una extraña… tenía que buscar a alguien de confianza para hacerlo…
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Editado: 20.01.2024