Simplemente mía // [en proceso]

Capítulo 2

Dove

Dove

Alice siempre va a estar de acuerdo conmigo en cuanto a gustos en los hombres

- ¿Por qué no le tomaste foto?

-Será porque no lo pensé en ese momento, además si la saltamontes me pillaba, le diría a su padre

-Quien diría que podrías ser su madrastra

-Déjate de cosas Alice, ¿Qué hay de la mamá?

-A lo mejor es divorciado amiga, no lo sé, pero no me importaría ser madrastra con tremendo bombón como tú lo llamaste.

-No estoy para eso la verdad, ahorita lo que quiero es soluciones para salir de esta puta prisión

-Ya te lo he dicho

- ¿Crees que funcione?

- No tengo pruebas, pero tampoco dudas

- Bien, prepárate, porque lo haremos hoy mismo

Había quedado con Alice de irme en la madrugada de mi casa, esperar en el parque hasta que ella y su hermano fueran por mí, para irme de florida, hacia un destino desconocido, porque no tenía a donde ir, aunque tal vez decida irme a México o España, nada era seguro, porque dependía de los hermanos distraer a los gorilas y salir de ahí

Si no logran salir ellos, me las tendré que arreglar yo sola

-Bien, creo que no llevaré mucho equipaje, solo llevaré ropa para un par de días y lo que nunca se me pude olvidar.. Mis libros

-Vale, le marcare a mi hermano, para avisarle que será hoy, nos vemos

-Bye, te quiero mucho Alice

- Y yo a ti Dove, confiemos en que la suerte estará con nosotras para que todo salga bien

-Ah ya estas dudando

- Jamás, pero no está de más una ayudita

-Haré como que te creo – Me aventó un beso y colgó

Suspiré, era hora de hacer lo que yo quisiera y no lo que me ordenaran

Hice la mini maleta y la escondí

Me quedé escuchando música de todo tipo, hasta que me quede dormida

TOC, TOC, TOC, TOC

-Señorita la cena esta lista- Me costaba hablar y abrir los ojos

- ¿Señorita?

-Ya escuché, en un momento bajaré

Me levanté para dirigirme al comedor, para ingerir alimentos lo más que pudiera, porque no se en que momento volveré a comer

-Hola

Ignoré por completo a Arturo

-Jugaras con eso de la ley del hielo, ¿En serio, a tu edad?

-Quiero cenar en paz, así que deja de joder

-Soy tu padre así que me respetas

-Si Arturo, si, lo que tu digas

-Ya te resignaste sobre lo que va a pasar contigo, porque mañana vendrán por ti

No dije nada, rogué que el plan de Alice funcionará

Terminé de cenar, me fui directamente a mi habitación e hice la pequeña maleta

Alice quería que saliera a las 3:00 a.m. de mi casa, pero me daba miedo, ya saben que dicen que esa es la hora del diablo y muy valiente y con tantas ganas de arriesgar a que algo apreciará no andaba, así que le dije que saldría a las 4:00 a.m

Bajé cautelosamente y en seguida vi a Alice y a su hermano, me hicieron señas de que corriera hacia el parque, ya todo estaba planeado.

Me quedé en el parque bastante tiempo, esperando a que llegarán por mí, pero nunca lo hicieron, lo único que recibí fue una llamada de Alice a las 7:00 a.m.

"Las cosas no salieron tan bien, trata de perderte en el parque o sal directamente al aeropuerto sin llamar la atención"

"Pero ¿cómo que las cosas no salieron bien?"

"Los hombres de tú padre nos empezaron a seguir y si íbamos por ti, te hubieran visto y todo hubiera salido mucho peor"

"Bien, me iré yo, cuando esté tranquila y en un lugar seguro te llamaré, a lo mejor lo hago desde otro móvil, por si a mi disque padre se le ocurre rastrearme "

"Vale, cuídate mucho, te quiero"

Caminé de una forma tranquila, iba pensativa, definitivamente me iría a México, España me encanta como se ve y también me hubiera gustado conocer como es, pero por el momento mi mejor opción es México.

Iré para decirle a alguien, wey, no mames, no manches, chinga tu madre, ¿qué pedo?, ¿Quieres unos putazos?, ¿a qué hora la peda?, Saca la fusca y pasarme de fiesta en fiesta como solo ellos lo saben hacer.

Choque con alguien, por ir centrada en mi repertorio de expresiones mexicanas.

-Lo siento

-No hay problema, yo también lo siento, venía distraí... ¿Dove? -Levante la cabeza

- ¿Derek?

- ¿Qué haces aquí?

-Pasando el rato pensando, pero ya me tengo que ir al aeropuerto, con permiso

-Espera, no quieres ir a tomar algo y después con todo gusto te llevo yo al aeropuerto

-Em....

- ¿A qué hora sale tu vuelo?

-Pues... Sinceramente no lo sé, pero me tengo que ir de emergencia

-Pues si quieres te llevo a tomar o comer algo, a un restaurante o en mi casa y después te llevo al aeropuerto, te aseguro que mi casa es un lugar seguro y no te pasará nada, además estará Maya en casa y no deja de preguntar por ti

-Vaya, así que volveré a ver a la saltamontes

- ¿A la qué? – Derek elevó una ceja

-A la niña hermosa que tienes como hija – Sonreí – y la saltamontes que también tienes como hija – susurré para mí misma

-No es por nada, pero te oído decirle dos veces a mi hija saltamontes – Mi cara ahora era color tomate

-Lo siento

-Por mí no hay problema, pero si ella te llegará a escuchar, no se que pasaría contigo, estarías en graves problemas – Ahora él me sonrió a mí – Entonces, ¿aceptas ir conmigo?

-No – Vacile – Venga va, vamos



#15407 en Novela romántica

En el texto hay: mafia, amor, venganza

Editado: 16.04.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.