Toulouse
En el subterráneo del castillo, sentados alrededor de una mesa cuadrada de ajedrez, todos esperaban en silencio la llegada del Maestro Principal Richard. La importancia de la reunión era tal que nunca nadie faltaba a sus invitaciones. Cuando finalmente el Maestro entró, todos, sin excepción se levantaron para darle la bienvenida.
De pie como todos, Fabrice esperaba a que su líder se sentase en la silla iluminada por el sol cuyo ojo integraba una pirámide dorada. Con una mirada atenta, detalló el caminar relajado de Richard hasta verlo adueñarse del trono. En ese momento, Fabrice supo que le tocaba iniciar la sesión: —Yo, Fabrice de Villanueva, secretario de la audiencia anual de la Orden, procederé a levantar el acta de la audiencia. Conté al llegar a todos los Hermanos presentes, es un orgullo afirmar que estamos todos presentes, por ende tenemos quórum suficiente para tomar las decisiones necesarias sobre el agenda de la sesión.
»El primer punto es la elección del Gran Maestre Adam de Ridefort por el Oráculo. Dejo la palabra al Maestro Principal.
—Gracias hermano Villanueva. Como todos sabrán el Gran Oráculo designó a un nuevo Gran Maestre. No entendemos bien la decisión del Oráculo cuyo silencio durante siglos nos ha dejado en nuestras manos el destino de la Orden. Propongo que votemos sobre la integración oficial del señor Adam De Ridefort. Los que estén a favor de su nominación levanten su mano.
Cada uno miro sorprendido el voto negativo del Maestro Principal. Sabían muy bien que ir en contra de sus sabias decisiones sería un desafío personal; los que dudaban dejaron a los más decididos votar primero; después de unos minutos la negación oficial a la inserción de Adam era evidente y los indecisos se sometieron a la voluntad general.
—Hermano Villanueva tome nota, se rechaza el puesto de Gran Maestre por unanimidad —ordenó Richard satisfecho.
—Gracias Maestros. El siguiente punto es el estatus del Nuevo Orden Mundial —anunció Fabrice.
—Un tema muy vasto, ¿quién quiere comenzar?
―Gracias a la mundialización hemos logrado debilitar el patriotismo en cada país. Hay una confrontación evidente entre las religiones y la migración en masa en los países dichos democráticos. Las futuras generaciones tendrán orígenes y padres de distintos países neutralizando el sentimiento de pertenencia a sus patrias ――dijo el encargado de la Unión Europea.
—En África las inversiones más las revoluciones democráticas provocadas por nosotros surtieron su efecto. Queremos quitar el liderazgo de cada país para que formen la Unión Africana. Es desequilibrando al mandatario de cada país que lograremos la globalización; mientras tanto tendremos guerras civiles que impedirán la consolidación de cada gobierno los cuales no tendrán más obligación que imponer un régimen dictatorial. Es un círculo vicioso alentado por nuestra Orden —concluyó el encargado de la zona de África.
—La seguridad mundial es un tema ya casi terminado —dijo orgulloso el Jefe de Seguridad—, las vacunas nos permiten ahora rastrear a cada humano en una escala mundial gracias a nuestras ramificaciones con los grupos farmacéuticos. Sin embargo, siempre tenemos a los Hospitalarios, es decir los Gaía, negando toda colaboración con nosotros.
—Y no lo harán nunca, Hermano. Y es un asunto ya anteriormente debatido. Mientras ellos no se interpongan, su negación no nos afecta. Tengo curiosidad, ¿cómo funciona? —preguntó el Maestro Principal intrigado.
—Es una vacuna de última generación, está compuesta de un micro chip que no solamente rastrea, sino que también desarrolla enfermedades según la predisposición genética de cada individuo adelantando y acelerándola. Una simple programación es suficiente para activarla.
—Habrá que vacunar a todo el mundo —se emocionó el Maestro Principal.
—Ese es el plan, cada brote al nivel mundial será seguido de campañas intensivas de vacunación en toda la población.
—Puedes utilizar mi continente —dijo el encargado de África—, la población es mucha y necesitamos controlarla, campañas de nutrición serán la base para intercambiar los tratamientos.
—Se puede arreglar cuanto antes, podemos enviar un grupo militar de Sin-Almas para expandir las supuestas enfermedades —propuso el Jefe de Seguridad.
—Sí, pienso que va a ser necesario, gracias Hermano.
—El siguiente punto es el Control de Masa —dijo el secretario, recordando al encargado de dicho tema, de tomar la palabra.
Éste repasó sus notas apuntando unas cuentas más, antes de tomar la palabra. —Vamos excelentes. El sistema capitalista ha logrado impulsar a la sociedad; cada individuo tiene un deseo incontrolable de consumo impulsivo. Con la última copa mundial de futbol hemos vendido más televisores de lo que planeábamos, y lo aprovechamos para poner mensajes subliminales en todas las publicidades. Los celulares llamados “inteligentes” acapararán las mentes constantemente. Además, con el Jefe de Seguridad hemos desarrollado en cada celular, pantalla, y cajero automático, un programa de detección digital y óptica que nos permite fichar a la mayoría de la población. En cuanto a los niños, al principio, ellos jugaran con los juegos de los celulares de sus padres así los tendremos catalogados también además de poder amoldar sus pequeñas mentes. Por otro lado, la población tendrá acceso a su cuenta bancaria, en línea, cajeros, y tarjeta; el punto es alentar el consumo. La identidad del ser humano estará más vinculada a la posesión que en sus valores. Los juegos videos y las películas violentas los acostumbraran a la violencia, banalizará la muerte y consecuentemente a la vida misma. El egoísmo quebrara las familias y la corrupción romperá por dentro cada a Estado que esté en contra nuestra.
#3133 en Paranormal
#976 en Mística
#32520 en Otros
#4510 en Aventura
peligro sobrenatural, literatura gotica, castillo batallas epicas
Editado: 09.12.2018