Ava
La neblina cubría las calles de Ethins. Todos decían que era el pueblo más pacifico y ideal para vivir.. Hasta que ellos aparecieron. Fue entonces cuando todos cambiamos, cuando todos hicimos cosas que nunca imagine haríamos. Estábamos manchados, vetados de por vida a vivir bajo la oscuridad.
Los murmullos de las personas aumentaron con cada paso que daba. Impactados de ver a la inocente Ava, en este estado. El frio ya era parte de mi, deje de sentirlo cuando lo vi a el parado al final de la calle con su habitual abrigo negro hasta las rodillas y un una capucha tapa la mitad de su cara con la sonrisa llameante de maldad.
Corrí como pude. Deje de lado que estaba sangrando, que acaba de ver cavar la tumba de mis amigos, solo veía un punto... EL
No podía irse, no así. La adrenalina aumentó con cada paso, la neblina se hizo más pesada, el ambiente más oscuro y siniestro. Corrí más rápido, y aún así él se veía más lejano como si él la Tierra lo alejara de mi.
—¡¡No!! — El corazón me dejo de latir y la garganta se me cerró. — ¿¡Por qué!? ¡SIRO, detente! —Corrí más rápido, sentía mis piernas flotar por la velocidad. —¡Lo siento, lo siento no debí hacerlo! ¡Solo tienes que mirarme, detente! — desesperación como nunca la sentí, porque no podía llegar a tiempo a salvar lo único que me queda — ¡POR FAVOR! ¡ES TU HIJO, NO PUEDES HACERLO! ¡¡¡DETENTE!!!
Los faros se apagaron y quedé sumida en la oscuridad.
— ¡¡¡¡NOOOOO VUELVE!!! ¡¡NO!!
La vida me dio muchos golpes, y yo le di unas cuantas puñaladas. Resistí y caminé sobre cadáveres... sumida en la oscuridad, mi metamorfosis llegó con él..