Snow White and the Four Apples

Teatro.

Era mediodía y Blanca estaba bien vestida. No tenía ansias de estudiar. Tamara fue a comprar cosas personales, los 4 hermanos estaban dispersos por todas partes. Cada uno vivia en su propio rol, Blanca sin necesidad de atencion, bajó para desayunar como es costumbre, fue en la misma dirección sin aruinar nada, todo iba bien, el chef hacia de comer como es costumbre, ya todos estaban listos para continuar con el día, Blanca solo tenía que comer algo energético, pero le dio mas energía escuchar a alguien hablando solo, ¿Eso era costumbre en la familia?. Salió de la cocina para irse a un pasillo a lado del despacho de su padre, era como si alguien quisiera explotar en palabras.
-¿Ashton?- lo tocó en el hombro, estaba de espaldas leyendo unos papeles, y sin querer queriendo, provocó que tirara los papeles sobre su café. Empapandose. Pero al menos no fue ella directamente.
-¡Que!- exclama estresado, deja caer los brazos y al mismo tiempo exhalar.
Blanca retrocede unos cuantos pasos para darle espacio. Los papeles seguían ahi.
-¿Que pasa?- pregunta con timidez.
-Nada, esque... nada- le sonrie sin mirarla a los ojos. A Blanca no le gustó ese gesto.
-¿Seguro?- preguntó
-Si- se dio la vuelta para estar solo.
Blanca no vio oportunidad, asi es que decidió irse a nutrir, entró a la cocina y su desayuno ya estaba listo, dio las gracias mas de tres veces al chef y se sentó, pero algo pasó que no pudo alimentarse.
-Es algo mio que no puedo resolver- dijo de golpe Ashton al entrar a la cocina. Blanca tiró por accidente al suelo un pedazo de hotcake. Pero no fue su culpa.
El chef dio un grito agudo, pero de inmediato aclaró su garganta.
-¿eh?- se giró Blanca para verlo.
Ashton, confundido por su acción, se va de la cocina e instintivamente Blanca lo sigue. Ashton estaba muy alterado y con la respiracion a mil por hora, Blanca se acercó para ayudarlo, pero él se alejó.
-¿Que te pasa?- preguntó viendo como él no dejaba de moverse.
-nada- afirma. Pasaron unos segundos muy incomodos hasta que volvió a preguntar.
-¿Que tienes?- Ashton dejó de moverse.
-Estoy nervioso- Blanca no dijo nada.
-¿no vas a preguntar "por que"?- dijo fastidiado.
-estas nerviso, y lo entiendo, yo tambien he estado asi, no es muy comodo pero suele pasar cuando algo tan grande se presen...
-Tengo una audición- dijo interrumpiendola.
Blanca iba a gritar de alegría, pero Ashton la calló sin consideración.
-¿Eres actor?-
-Si-
-¿No quieres ir?-
-No confío en mi, esta es la primera vez que voy sin necesidad de pedirselo a mi padre, ni nadie, ahora todo lo hago solo- dijo todo eso en voz baja.
-¿Para que papel vas?-
Ashton quedó perplejo, pero ignoró eso.
-Para un conductor de autobus- dijo viendo al piso y dando vueltas repetitivas.
-¿Donde será?-
-En el teatro de la calle Peaton- se sentó en el piso nervioso.
-¿y es lejos?- Blanca no sabia como tratar este tipo de situaciones. Pero hacia todo lo posible.
-No, puedo ir volando si quiero- dijo con sarcasmo. Ashton no paraba de moverse en el suelo, sus nervios eran más poderosos que él mismo.
-Tal vez debería llamar a Tamara, ella te conoce-
De inmediato le agarra su muñeca.
-No, por favor a ella no, no tiene caso.-
Le suplica. Su cara pálida y sus piernas de gelatina hacían sentir a Blanca vulnerable.
-Pero ella sabrá que hacer-
-No, necesito salir de esta yo mismo. No puedo seguir dependiendo de nadie- comenzó a sollozar. Blanca solo repetía en su cabeza "solo es una audición, ¿qué tiene de malo?"
-Oye- se acerca a él para abrazarlo. Los brazos de Ashton rodearon la cintura de Blanca. Apoyando su cabeza en su pecho. Solo eran unas cuantas lagrimitas. Blanca se puso de pie y él igual, confundido. Lo suelta y se pone frente a él.
-¿tienes tu celular?- Ashton asiente sacándolo de su bolsillo trasero.
Blanca lo toma y desbloquea. Va hacia la aplicación de música y oprime una canción "walking on sunshine".
-Salta-
-¿Que?- pregunta Ashton secandose una lágrima.
-¡Vamos!- Blanca comienza a saltar y a bailar. Con el celular en mano, toma la mano de él y corren hasta mediación.
Sigue bailando pero Ashton no lo hacía.
-¡Tienes que bailar, hazlo!- él comenzó a dar unos cuantos pasitos, la veía a ella y bailaba más, dando volteretas. Los dos cantaban la canción. Aplaudían y seguían saltando. Pronto sus pies se sincronizaban y reían. Pero Blanca sentía náuseas. Pues como no, si casi no había comido. Ella paró la música, no fue por la comida solamente. Ella extrañaba a su amigo, el que siempre la salvaba y le daba su hombro para que llorara. Ese era su ritual. Una parte de ella quería estar en casa, donde nadie la amaba, su otra parte quería estar ahí, un lugar inadecuado. Pero Ashton seguía con una energía alta.
-¡¿Porqué la paras?!- grita pero luego baja la voz.
-Estoy mareada- se agarra la cabeza. Fingiendo cansancio.
-Eso me reconforto- Ashton tenía una sonrisa de oreja a oreja. Pero Blanca no se veía tan bien. P Ashton que iba a notar, si era más que feliz, y cuando es feliz, no nota nada. Nadita.
-Debes irte, sé que lo harás bien- le dice Blanca a él, sobandose las piernas tratando de soportar un dolor emocional. Ashton entrecierra los ojos, descansando su cuerpo en su cadera.
-¿Cómo dices?- dice con aire entrecortado.
-Si, no debes perder tiempo, es hora- Blanca tenía la vista en el suelo, no tenía ánimos de nada. Es tan débil que cualquier cosa le hace daño.
-Pensé que irías conmigo- Trata de buscar su mirada pero Blanca le da la espalda.
-ve, no puedo, lo siento- se disculpa. Ashton pasa pegándole su hombro con el suyo. Ve como corre hacia la cocina levantando los papeles. Blanca estaba dolida. En realidad ella no quería escapar. Solo deseaba ser libre. Camina hasta el otro extremo del pasillo, pero ve una puerta entreabierta, la del despacho. Colton discutía por el teléfono. No era como algo casual, porque si lo fuera, todo el mundo estaría bomba. Blanca decidió acercarse más y poner su oido en alerta. Él se le veía desesperado, su piel transpiraba.
-¡No me cuelgues!- le gritaba al teléfono. Blanca ahoga un grito.
-No, papá... solo dime que hacer- su voz bajó a un ritmo preocupante.-No... no te vayas- sin ánimos de seguir hablando, cuelga despacio y recarga su cabeza sobre su brazo, descansando en el escritorio.
-Que metiche- Tamara la asustó por detrás. Ella da un brinco y cierra la puerta. Colton se da cuenta, y se levanta furioso.
-¡¿Que haces?!- abre la puerta de golpe y ve directo a Blanca. Ella se queda con la boca abierta.
-Yo... no...- retrocede pero Tamara la empuja.
-Mantente alejada- dice entre dientes Colton.
-Calmate sicario, mejor vete a llorar, desgraciado- lo regaña Tamara con aire  demandante, Colton solo pone los ojos en blanco y cierra la puerta.
-Solo pasa por unos problemas paternales, nada que se pueda resolver-
Blanca tenía la mirada desviada. No prestaba atención. Pero Tamara se había dado cuenta de eso.
-Extrañas a alguien, mejor déjalo ir, no creo que te haga bien pensar en tu pasado, no lo vale-
-¿Por que lo dices?- dice Blanca asustada.
-Vete ya, Ashton no ha de tardar-
A Blanca casi se le salen los ojos. Tamara solo ríe.
-Me lo acaba de decir, no soy bruja... o tal vez si- Tamara se queda pensando.
Blanca le da las gracias abrazandola y va directo a su recámara, toma un abrigo y un dinero de un escondite secreto. Sale a toda prisa pero se topa con Parker. Un curioso Parker.
-No quiebres nada niña- le dice sin mirarla.
-No- dijo Blanca a toda prisa.
-¡Oye a donde vas!- le grita caminando hacia ella.
-Tengo que salir- Blanca seguia sin prestarle atención. Pero Parker logró intervenir en su huida.
-A donde vas- le dijo con tono autoritario.
-Con...-Blanca desvió la mirada- Con Ashton- dijo por fin. Un aplauso.
-¿Es tan difícil recordar su nombre? Decepcionante- se burló Parker. Blanca no entendía.
-Si me das permiso- Parker la interrumpe.
-¡Oye!, ten cuidado de no quebrar nada, chiflada- se da la vuelta pero Blanca no se queda callada.
-No soy una chiflada- dijo en apenas un susurro. Y le cae el veinte. ¿en qué se va a ir?, ella se para a pensar, o eso parecía, y le grita
-¡Parker!- él se paró en seco, pero sin voltearse.
-Sabes... ¿Sabes si alguien me puede llevar con Ashton?- él estaba quieto.
-Podrias tu... solo podrías- la interrumpe.
-Para, que no soy un chofer privado- siguió caminando y Blanca lo persigue.
-Vamos, te juro que no te volveré a molestar, solo es un pequeño favorcito- dijo en tono juguetón, pero Parker solo voltea los ojos.
-Andale, además... no haces nada- Blanca se tapa la boca sorprendida por su contestación. Parker se paró en seco y se gira para verla.
-Lo que haga o no, es mi asunto, además, no dejarás de molestarme, ¿verdad?- le pregunta con tono extra molesto. Ella baja la mirada y asiente.
Pone los ojos en blanco y responde.
-Te llevo-
-No gracias- lo rechazó.
-¿Quieres que te lleve o no, niña?- le dice en voz alta. Blanca desvía la mirada y voltea a verlo.
-¿estás rechazando una oferta mía?-
-Puede ser- dice dudosa.
-Vamos, eres muy tonta como para irte sola- dijo dándole la espalada para irse.
Blanca lo perseguía por detrás. Llegaron justo a la entrada. Tamara vio a Blanca, y en ese instante le decía que "no" con la cabeza. Blanca no entendía. Y aún así se fueron.
Parker se fue sin hablarle a Blanca, ella sale de la casa, escoltada por dos hombres. Ella no veía por ningún lado a Parker. Por lo que decidió entrar a la gran casa, pero de inmediato aparece él montado en una motocicleta con un casco a parte.
-Pontelo- le grita. Pero puso una cara de horror la pobre chica.
-No me montare en ese caballo de gasolina-
Los escoltas ahogaron una risa y Parker se dio cuenta.
-Largo- les dice a los escoltas y luego se van, de nuevo en la entrada de la casa.
-No se como es que sabes leer, te lo tienes que poner por protección, no cargare con una muerte ajena- dijo apenas escuchando su propia voz, pero Blanca sí puso atención, al fin. Ella se acerca temerosa y asqueada. Toma el casco. Y se lo acercó a la nariz para poder olerlo.
-Huele feo- arruga su nariz
-Huele a zorras- Dijo por detrás Tamara. Blanca se lo pone, parecía un juguete.
-un gusto hermana- le dijo Parker a la chica de atrás. Ellos dos se hablaban con la mirada. No había duda. Blanca se sentó detrás de Parker, apretando muy fuerte su abdomen. Él echó una risa pero a la vez estaba incómodo.
-Vamos- de nuevo Parker la interrumpe.
-Ya se donde es-dijo al momento de arrancar. Tamara no tenía una buena cara referente a lo que acababa de pasar. Pero ya era cosa suya.
Blanca parecía un perro a la hora de salir en la calle, ella estaba muy consciente de que al momento de salir puede alguien reconocerla. La ciudad no estaba en buenas condiciones. Había más pobreza que riqueza. Parker en todo el camino estuvo callado, y Blanca asombrandose. Llegaron a un lindo y grande teatro. Al momento en el que se estacionó, saltó y le aventó el casco a él. Pero se detuvo y caminó hacia la moto.
-¿No entras?- le pregunta con inocencia.
-No, que espanto- resoplo.
-Pero es tu hermano-
-Echale porras, o él llora- dijo con tono burlón. Él se va sin despedirse. Blanca se da la vuelta pensando en lo que dijo y entra a un gran vestíbulo, había personas de la limpieza en el área de recepción, entró como sin nada, la alfombra era roja con cuadrados dorados y líneas doradas. Ella pisaba cuadro por cuadro hasta llegar a la primera sala, se asombró todavía más al ver la cantidad de asientos que había, ella desde los pocos años que tenía no había vuelto a pisar el teatro, en el fondo estaba una escena montada, y justo entonces, estaba Ashton audicionando, Blanca corrió sobre la alfombra que estaba más linda que la de la entrada y llegó unos asientos antes del escenario, al pobre chico se le veía nervioso, y temblaba, Blanca se sienta en la orilla de los asientos y trata de no hacer ruido, a la derecha se encontraba un montón de gente importante observando al frente, era una escena rara para ella. Las luces atenuaban a un chico nervioso.
Pronto Blanca comenzó a echarle porras, él se da cuenta y sonríe de oreja a oreja.
Sigue con la audición y ella pudo notar cierto aburrimiento en el crítico jefe de aaudiciones. Ashton siguió con la escena y terminó en un santiamén. Salió y se dirigió hacia Blanca feliz y lleno de energía.
-¿Que tal estuvo?- preguntó sentándose delante de ella, con una sonrisa.
Para Blanca estuvo genial, nunca había visto una audición ni una obra de teatro.
-Estupendo, lo hiciste bien- le dijo contenta. Él rápidamente tomó su mano y la sacó del lugar hasta llegar a la calle.
-¿A donde vamos?- preguntó Blanca confundida. Ashton la abraza por la cintura y apoya su mejilla en el hombro de ella, Blanca sin saber que hacer, solo entrelaza sus dedos sobre la espalda de él, y se quedan así por 1 minuto.
Se separa y ella se acomoda un mechón de cabello.
-Gracias por venir, apenas te conozco y siento que ya eres parte de mi vida- lo dijo con tanto agradecimiento, que Blanca lo abrazó de nuevo. Solo le ganaba 4 centímetros a él y aún así se sentía alta.
-Quiero salir, vamos al centro de la ciudad- Ella no podía ir a ese lugar, la madrastra iba todos los días. Ashton esperó pero al ver que no había respuesta, habló.
-¿Pasa algo Blanca?- buscaba su mirada, pero ella seguía sin responder.
-Vamos a un parque, cualquier lugar será como el paraíso- soltó de golpe y Ashton sonrió. Ambos se fueron en dirección hacia el oeste, cruzando un par de calles urbanas hasta llegar a una macro plaza, había mucha gente y varias parejas. Caminaron por la acera, platicando.
-Y cuéntame, Tamara es algo extraña, pero muy linda- expresó Blanca y Ashton concordó con una sonrisa.
-No te imaginas cuanto-
-Bien, ya que estamos en pláticas, quisiera saber un poco más de tu familia, para al menos no destrozar la tuya-
Ashton se limitó a decir cualquier cosa.
-No creo que vayas hacer eso, caíste del cielo, hace años que no teníamos a alguien en la casa, no desde Tamara- dijo él, un tanto agradecido.
-¿Por qué exactamente no iba a visitarlos?- preguntó ella, pero Ashton no quería decir nada. Le provocaba dolores de estómago. Ella seguía esperando.
-Será mejor cambiar de tema, ¿Qué estudiaras ahora?- sintió la súplica de él y comenzó hablar, pero Ashton la interrumpió.
-Bien, te contaré- respiró profundo- Papá no es muy cariñoso, no se muy bien el porqué no venía a casa, el único que sabe es Parker y él no dice ni pío, mientras yo me encontraba fuera y todos mis hermanos igual, algo pasó durante ese lapso de tiempo, no se muy bien qué, pero  Tamara estaba vetada de la casa y la familia, ignoramos eso debido a que la amamos, bueno, solo Tylor y yo, Colton la aprecia, no convivió mucho con ella. Ella es como mi alma gemela, pero nunca se lo digas- le advirtió- Parker no se veía muy afectado pero él se alejó y no le gusta verla. La verdad no entiendo, si ella es como el sol- río.
Prosiguió.
-Papá no es un muy buen hombre, yo lo quiero mucho, cada vez que ve a Tam, siempre se le llenan los ojos de lagrimas y no le habla. Es como un hombre de los 70's con mente cerrada y opiniones bien definidas. Así como Jay Prittchet- ella no entendía.
-¿No sabes quién es?- preguntó, asombrado. Ella dijo que no con la cabeza
-Lástima, se fue a Colombia y no sabemos cuando regresará- siguió hablando.
-Mi familia ha pasado por mucho, desde la muerte de mamá hasta la ida de Tam. El día que Colton decepcionó a papá y la muerte de su esposa, eso fue la gota que derramó el vaso- dijo, no queriendo recordar nada.
-¿Por qué la mataron?- a Blanca apenas le salía la voz y Ashton se río por eso.
-Segun dice Colton, fue un integrante de una familia, Los Berlusconi. Pero realmente no se nada. Y él prefirió alejarse después de una ardua investigación. Él todavía está lastimado.- se sintió triste, la voz de Ashton se apagaba cada segundo. Y Blanca estaba peor.
-Papá está muy destrozado, Colton ya no nos habla como antes, mis hermanos se han distanciado con el tiempo, casi nunca estamos en casa, solo por este año estaremos más debido a las elecciones, tenemos un perfil que cuidar- él apenas sonrío de lado.
-¿Qué hay de tus hermanos?, Tamara me contó muchas cosas-
-¿Como el hecho que soy gay?, no le importa ofender, yo soy defensor de los derechos, pero en definitiva soy hetero- dijo muy seguro.
-No... la verdad no le importa ofender- se rieron y dieron vuelta a la derecha dirigiéndose a una cascada frente a un museo de cera.
-Tylor y yo siempre hemos sido uña y mugre, él conquista y yo encanto, gracias a mi es que tiene tanta labia, pero lo mío es sincero. Parker es... un capullo, siempre lo ha sido desde la partida de nuestra... ya sabes- se limitó a decir. Y Blanca asintió, comprendiendo.
-Necesita mucho amor, y solo Tamara puede dárselo, lo que es irónico ya que no se caen del todo bien- él sonrío, triste.
Blanca le preocupaba toda esa familia de problemas, ella huyó para no tener que estar en el ojo del huracán y terminó en el.
Pero su corazón palpitaba por un hermano... solo uno. Le daba rabia que su corazón palpitara por ese hombre. Probablemente sólo sea por un corto tiempo. La última letra de ese nombre era R o... N?.
-Parker está muy dolido y destrozado, ninguno de mis hermanos estuvo el día de su muerte, yo soy el más pequeño, por lo que el amor de una madre no lo tengo muy presente, pero Colton y Parker sí. Tylor la extraña de vez en cuando, mi tía Isabell, hermana de mi padre, me cuenta que ella era alegre, delicada pero enojona. Mi hermano estuvo en su partida y no me imagino lo duro que fue, a veces quisiera abrazarlo pero no me deja, no a cualquiera abraza, solo a Tam. Aún está deprimido y enojado con ella, nadie sabe porqué, quiero suponer que es una manera de sacar su frustración: culpandola por abandono. Amo a mis hermanos y de alguna manera amo a mi madre, aunque nunca la sentí.- Ashton ya estaba por llorar hasta que se detuvo a ver a Blanca
-Eres agradable, y tus ojos combinan con la luz del sol- Ashton le pasó su mano por el fleco y se lo acomodó, ella, tímida, retrocedió un poco con una sonrisa muy apenas visible eso le provocó una risa a él.
-Tenemos que ir a ese museo de cera, quiero tocar a esas personas falsas- ambos dijeron las últimas 4 palabras al mismo tiempo. Blanca quería romper el momento incómodo cuando caminaron hacia el museo.
-¿Por qué Parker y Tamara no se agradan?- Ashton le dio un vistazo rápido  y miró al frente.
-Supongo que es un disgusto entre los dos, y la verdad es que no quiero saber, amo a Tamara y me cae mejor que Parker, ella sabe comprenderme.-
En ese instante sonó el celular de Ashton, molesto, contesta. Lo puso en alta voz acercándose a ella para que escuchara.
-¡Que!- contestó enojado.
-Calmate hippie, ¿No que muy amor y paz, hipócrita?- respondió Parker. Blanca ahogó una risita.
-¿Que pasa?-
-Adivina quienes están aquí- Ashton dijo que no con la cabeza y respondió que no.
-Los peregrinos, esos que nos caen tan mal como Tamara- expresó y a lo lejos se escuchó un  "Oye, no es mi culpa que me odies". Ashton rodó los ojos.
-No pongas tus bolitas en blanco- dijo Parker y Tamara río.
-Te lo dije- dijo ella. Blanca se quedó sorprendida, en su interior, le daba miedo.
-Bien, ya vamos- guardó su celular con furia y soltó un suspiro.
-Queria esta tarde solo para nosotros- Blanca le ofreció una sonrisa comprensiva. Ambos se van a la parada del metro y pasaron todo el viaje admirando la ciudad. Se rieron y lloraron debido a las carcajadas. Llegaron hasta un centro comercial, donde un chófer los estaban esperando. Al llegar a la residencia oculta, se bajaron al mismo tiempo y en ese instante, la visita apareció.
-¡Hola primo!- saludó un chico desaliñado con mucha alegría, se acercó a Ashton, pero él no estaba muy feliz que digamos. Blanca caminó hasta la entrada para darle espacio, en ese momento varios chicos aparecieron, entre ellos Parker.
-Como odio las visitas- se queja y Blanca le da una mirada.
-A Ashton le fue muy bien- Parker la miró, confundido.
-No pregunté porque no me importa- aclaró.
-Deberías estar con él, ¿no lo crees?- Parker se alejó y volteó.
-Eres solo una visita, que no se te olvide- se fue, molesto. Ella no paraba de verlo, aquello que le dijo le dolió, pero había escuchado insultos peores, asique no le tomó mucha importancia. Uno de los chicos se acercó a Blanca.
-Asique tu eres la afortunada, de hecho, una vez me gané esa beca- Blanca le prestaba atención- pero por acostarme con la maestra de cálculo- esperaba que todo el mundo se estuviera riendo, pero no fue así. Blanca se rió con incomodidad y lo saludó.
‐Serás idiota- regañó otro de los chicos
-¡Hola Blanca!, un placer, soy Fallen y él es Davied. El dormilón de la familia-
-Mas bien holgazán- murmuró Ashton saliendo detrás de su primo.
-Gracias- dijo Davied, bostezando.
-Él es Mike, no habla mucho, así que ni lo presiones- dijo, con una sonrisa en el rostro. Mike fulminó con la mirada a Fallen. Los familiares de los hermanos se llevaron a Blanca a la sala de estar.
-Nos avisó nuestro padre que debíamos estar aquí durante los próximos meses para acompañarlos, ya saben, la candidatura y todo eso- dijo Fallen, sacando unas cosas de las maletas. Sus otros hermanos estaban cargando sus maletas hasta sus habitaciones. En eso, Tamara aparece.
-¡Ah!, bruja- ambos lo dijeron, por sus expresiones, no se agradaban del todo.
-Hola primita, te traje algo- saca una cajita de color negro con un moño gris brillante. Ella lo toma con desdén y lo abre como si no importara, hasta que ve lo que hay adentro, pero en seguida apaga esa chispa por indiferencia.
-No es lo mejor, pero gracias-
-¡De nada!- dijo él, entusiasmado.
Parker entra a la sala mensajeando. Y no presta atención a nadie, se dirige a Blanca.
-Los familiares se quedarán a lado tuyo, para que no andes quebrando cosas- de alguna forma, Parker estaba molesto.
-Claro- le ofreció una sonrisa simple. Entendiendo. Él se va sin saludar a nadie más.
-¿Que rayos fue eso?, recuerdo que hacía ese tipo de cosas cuando estaba enamorado de- antes de que terminara la oración, Tamara le aventó la cajita a la boca.
-¡¿Por qué lo hiciste?!- preguntó protegiendo su labio inferior. No se le entendía muy bien.
-Porque existes Fallen, y eso le disgusta- se enojó Mike y Blanca quedó sorprendida.
-¿Parker se enamoró?, ridículo- bufo Davied al entrar a la sala.
-Asi es, pero no fue nada serio, ya saben, el odia todo ese tipo cosas- dijo Tamara. Blanca escuchaba y analizaba todo.
-¿Y si hacemos algo hoy?, salgamos a trasnochar, somos ricos, podemos hacer lo que sea- propuso Fallen. Tamara vio a Blanca.
-Podria ser, solo que Colton no va a querer- dijo Tamara.
-¿Y quién lo está invitando?- pregunta Davied, molesto.
-Calmate cachorrito, Blanca- voltea hacia ella- ¿Vienes?-
Todos la ven, esperando respuesta.
-Si, claro- no quería ir, le daba vergüenza ser pobre. Pero sería de mala educación decir no.
-Bien, sin Colton todo es mejor- celebró Fallen y Tamara puso los ojos en blanco, tomando unas prendas de él y lanzando la ropa a la basura. Blanca se fue directo a su recámara hasta que se encontró a Tylor en el pasillo de las recámaras.
-¡Hola preciosa!- la saluda abrazandola. Ella se queda consternada.
-¿Qué?, ¿ocurre algo?- preguntó él, preocupado. Ella dice que no con la cabeza.
-A veces eres rara- se ríe.
Ella lo imita.
-Tus primos acaban de llegar, ve a saludarlos- a él no le agradó mucho la noticia.
-¿La familia Monster no puede dejar de existir?- se quejó y se fue.
Siguió hasta entrar a su recámara y recostarse. "¿Qué está pasandome?"
Pensó. Acaba de salir con un chico, no fue con Trevor, con un chico Lang,
¡Y uno muy guapo!, rodeada de muchos hombres guapos y agradables. Pero con muchos problemas.
Alguien tocaba su puerta, se levantó sin ganas para abrir.
-Te llegó esto- Parker le entregó una caja de cartón mediana. Ella lo toma, sin dejar de verlo.
-No seré tu mensajero para siempre, debes checar la correspondencia- la regaña. Ella se endereza.
-¿a donde fuiste hoy?, espero que nos puedas acompañar, vamos a salir- le sonrío. Pero él no estaba de humor.
-¿Recuerdas las reglas que te impuse?, que no te metieras en mi camino, que no me vieras, ni siquiera respirar a mi lado, y no, no iré. Que tengas una mala noche- se enojó y se fue.
¿Parker odiaba a Blanca?, ella sentía fatal. Quería llorar. Era tan llorona.
Dejó caer la caja en el piso sin ganas de abrirla. Cerró la puerta deslizándose hasta llegar al piso. Ella lo pertenecía ahí, ni para la beca que se ganó. Pero siempre había un Ángel guardián ¿no?. Tylor se aproximaba a su recámara para llevársela con él. Le agradaba. Y además era guapo, un Parker 2.0, solo que sin tatuajes.
-¿Blanca?- tocó la puerta. Ella levantó su cabeza, limpiándose las lágrimas rápidamente. Empujó la caja hacia la cama y volvió para abrir. Tylor notó que su nariz estaba roja.
-¿Lloraste?- preguntó, preocupado.
Ella decía que no, pero se echó a llorar. Él de inmediato la abrazó.
-¿te insultó Parker?, ¿Tamara te hizo sentir mal?, ¿Ashton no adicionó bien?- se detuvo a pensar- estas... ¿te visitó Andrés?- Blanca rodeó los ojos, riéndose.
Ella se separó de él para verlo.
-Te compré algo- Tylor alza la mirada para ver la caja de cartón. Toma su mano y va por la caja, poniéndola en la cama. Ella se quedaba de expectante. Él abría la caja con ambas manos hasta sacar un atuendo de invierno.
-Mira, te lo compré, analicé tu...- la vio de arriba abajo- tus medidas y creo que te quedará. Blanca sonrió. Agradecida. Tomo la prenda y fue al baño. Era un overol con encuarte, estampado de series televisivas como "The Office", "Friends", "Community", y muchos más. Los personajes eran caricaturas. A Blanca le encantó. La ropa era un suéter rosa, el overol y unas mallas negras transparentes. Como el estilo de ella. Era increíble como él le compró algo tan lindo. Sin duda un buen chico.
Salió del baño, tímida.
-¡Hermosa!, ahora salgamos-
Después de intentos por quitárselo, Tylor la obligó a salir de la recámara. Ambos se fueron de ahí riéndose a carcajadas. Todos estaban esperando. Habían pasado 3 horas. Y ya pasaban de las 8 p.m.
Tamara quedó asombrada.
-¡Te ves muy bien Putydoll!, eres una combinación de virgen y zorra, me encanta- Davied y Mike se quedaron en shock y Fallen le causó gracia.
-Concuerdo- dijo Fallen. Ashton levantó ambos pulgares.
-Te ves bien Blanca- ella asintió, agradeciendo. Tylor tenía su mano entrelazada con la de ella.
Todos estaban listos hasta que Parker apareció.
-Ya era hora- se quejó Mike. Parker vio a Blanca, Tamara le hablaba pero este no reaccionaba, hasta que Tylor le chasqueo los dedos.
-¡vámonos!, que tengo que calentar el coche, ven Blanca-
Tylor la protegió con su cuerpo.
-Hey no, ella es mía- Ashton se rió.
-Ella no es un objeto, ven Blanca- Tamara la tomó de la mano.
-¿Y por qué va Parker perro?- preguntó Tylor, enfadado.
-Porque él me debe la gasolina, lmbecil- los tres salieron de la casa y Tamara encendió su coche, Volkswagen del 67. Sin duda era viejisimo. Parker le abrió la puerta a Blanca y ella se deslizó hasta llegar a la ventana. Los demás salieron, Tylor le gritó a Blanca
-¡Te rescatare, lo prometo!- a Blanca le pareció graciosos y Tylor se rió. Sus primos lo empujaron para que subiera al coche.
-Tarado- insultó Parker. Cerró la puerta y se acomodó. Tamara veía por el retrovisor. Puso andar el coche.
-Yo creo que es lindo- dijo Blanca con voz ligera, viendo a Tylor a través de la ventana.
-Concuerdo contigo hermana- Tamara chocó los puños con ella. Parker se quejó.
-El camino será largo, iremos a un pequeño río a caminar un poco, cerca de una montaña más verde que mi cerebro, estaremos bien- Blanca aplaudió.
-Pondré algo, ¿Nothing Hill o Scary Movie?- propuso la hermana mayor
-Scary Movie- dijeron ambos al mismo tiempo. Tamara se la estaba pasando muy bien.
-Yo prefería algo estúpido, pero me agrada la idea- sacó el DVD y le dio play a la pequeña pantalla que tenía enfrente. Era la 2. Tamara se puso sus guantes para conducir y arrancó.
Parker y Blanca intercambiaron miradas.
Durante el viaje, ambos se rieron de la pelea de los inválidos, la escena del básquetbol, el loro maleducado y las parodias de matrix. Solo ellos se estaban riendo. Tamara las consideraba estupidas, o eso quería aparentar. Al llegar a lo más bajo de la montaña, se estacionaron en un estacionamiento cerca de una cabaña de hospedaje. Todos salieron haciendo ruido y riéndose. Hablando de como fue el viaje. Blanca de inmediato bajó del auto y Tylor se acercó a ella.
-¿Alguna novedad sobre el viaje?- miró rápidamente a su hermano mayor.
-ninguna- sonríe ella y Parker le echó una vista rápida. Tamara toma del brazo a Parker, él no se deja pero ella lo obliga. Ambos se van y Tylor le ofrece su brazo, Blanca acepta, Ashton se acerca.
-¡Hola!, Fallen no paró de hablar en todo el camino- se quejó, caminando al lado derecho de Blanca.
Todos se dirigieron a unos faros cerca de unas rocas gigantes. Los familiares corrieron como niños hacia las rocas e hicieron poses chistosas para las fotos. Tamara no paraba de fotografiar.
Parker y Mike estaban fastidiados.
-¿Colton está bien?- preguntó Blanca.
-Si, lo más seguro es que ya esté en casa- aseguró Tylor.
-Sigamos caminando, idiotas- murmuró Tamara. Llegaron al pequeño río, ya era de noche y la luz se reflejaba en el agua, todo era hermoso y a Blanca le gustaba.
-¡Ashton, tienes que ver esto!- Davied lo llamaba desde lejos y su primo fue corriendo.
-Te verías sensual en el lago- bromeó Tylor
-¡No, que te pasa!- ambos rieron.
-Quedarías congelada- Tylor hizo una rara imitación de los zombies de hielo de got. Blanca definitivamente no entendió, pero le dio risa.
Parker y Mike observaban desde lejos, y sintió algo, no sabía lo que era, pero algo sintió. 
-Morfeo, no debes soñar despierto- Blanca imitó a la novia del personaje de matrix.
-Ni idea de que es eso, pero es lo más sensual que me han dicho- y siguieron las carcajadas.
-Dejame aplaudir con dos manos- seguramente estaba imitando a Dwight de Scary Movie. Parker se rió desde lejos y Tylor no entendía.
-Sin duda no estoy entendiendo nada, pero yo aplaudire con cuatro manos- se acostó en el césped y al mismo tiempo aplaudió ambas manos y pies. Blanca sin duda estaba risueña, porque eso que hizo, de verdad estaba a carcajadas.
-Eres todo un perrito, hermano- bromeó Ashton.
-Si, pero no tu perro- se defendió al levantarse y sacudirse.
-¿Entonces el perro de quién?- Ashton quedó fascinado con la pregunta y chocó los cinco con Blanca. Tylor en verdad estaba ofendido.
-¡Serás perro de todo el mundo!- gritó Parker a lo lejos y a Mike le hizo gracia. El más serio del grupo estaba sonriendo.
-Bueno, ya- Blanca pasó su mano por la espalda de Tylor para calmarlo y él se limitó a hablar. Ashton y Parker no pusieron buenas caras. Blanca volteó a ver al hermano menor.
-A Ashton le fue muy bien- dijo ella.
-No me quiero ilusionar- expresó.
-No deberías, lo conseguirás- dijo con mucha seguridad Blanca. Pero parece que esas palabras no funcionaban.
-Si va a ser actor, que me enseñe como llorar para así conseguir más citas, un hombre dolido atrae a mujeres- lo dijo con mucho orgullo que hasta a Mike le dio vergüenza.
-Estas muy dañado, hermanito mio- confesó Ashton.
Seguían caminando hasta llegar a unas bancas de piedra, el lugar para pasar el rato y hacer convivencias. Los primero corrieron junto con Ashton para meterse al lago.
-Eres un buen perro- dice Blanca, apoyando su cabeza en el brazo de él.
-Lo se- responde. Él la ve sobre su brazo y suspira. No quería moverse para no arruinar el momento.
Todos los que corrieron se metieron al agua, Tamara se llevó a Blanca para sentarse en una de las bancas.
-Te gusta estar aquí, ¿no?- pregunta la hermana mayor.
-Si, todos son buenos conmigo- dice.
-No por mucho- responde Tamara y apoya su cabeza en el hombro de ella.
-¡Blanca, ven!- Davied la estaba invitando. Pero ella lo rechazaba. Pronto Tylor se unió al reparto de niños infantiles.
-¡Tienes que meterte Blanca!- la animaba
-Ella no es valiente, no la averguences- dijo Parker. De pronto Blanca sintió furor en todo su cuerpo, pero antes de hacer algo, una mano la atrajo hasta la orilla del río y la tumbó. Todos estallaron en risas y carcajadas. Blanca luchaba por su vida, no sabía nadar.
-¡Vamos Blanca!, ¡No te hagas el muerto!- se reía Davied. Blanca nadaba hacía arriba, pero no podía, estaba llegando hasta lo profundo. El agua helada le impedía nadar. Nadie se daba cuenta de lo que pasaba.
-Me dices que ves abajo- bromeó Fallen.
Ella descendía. Pronto Tamara elevó la vista, estaba inquietante.
-¿Que pasa?- pregunta Mike ante la reacción de su prima.
-Se está ahogando... ¡Se está ahogando!- gritó ella.
-¡Se ahoga!- gritó Parker y corrió hasta el río, metió su cuerpo entero. Los demás reaccionaron y nadaron hacia delante, donde estaban era aprox a 3 metros.
Parker hizo aun lado a Tylor y nadó abajo. Tardó en encontrarla y la vio desmayada, sus brazos hacia arriba, ella estaba dormida. Parker alcanzó su mano izquierda y la atrajo hacia ella. Rodeó el brazo de ella en su cuello. Ashton ayudó a su hermano a salir y cuando Parker tocó tierra, la cargó. Salieron a duras penas y todos rodearon el cuerpo tendido de ella.
Parker sin duda hizo RCP, en su mente solo estaba una frase:
"No otra muerte más, por favor"
Todos estaban preocupados. Parker abrió la boca de ella y pegó sus labios para que entrara aire. Pasaron 15 minutos.
Seguía sin responder.
Su respiración era cada vez más lenta.
¿Que pasó realmente?.
Despertó tociendo agua.
Apoyó sus codos para levantarse.
-¿Como te sientes?- Parker apoyó ambas manos en los cachetes de ella.
-¿Quien eres?- preguntó. Tamara se acercó.
Pronto Blanca comenzó a reírse. Y Parker también. Los demás se enojaron.
-¡No hagas eso Putydoll!- exclamó Tamara.
-¿Quién la empujó?- preguntó la hermana menor. Todos se miraron entre sí.
-Estaba oscuro, yo no vi quien fue- dijo Mike.
-¿Te sientes mejor?- Parker estaba concentrado en ella.
-Si, solo que no puedo respirar bien- comenzó a temblar todo su cuerpo.
-Tenemos que ir a un hospital- dijo Tamara.
-El hospital más cerca está a 10 km, muestra casa está a 4 km, es mejor si llamamos a una ambulancia y que se dirija allá, o a nuestro doctor de cabecera- dijo Tylor, sentándose detrás de Blanca para abrazarla.
-O vamos al hospital, idiota- Tamara se enfadó.
-No, es mejor a la casa- Blanca no quería que la encontrara la madre selva. Ni por un accidente grave.
-Tenemos que irnos ya- ordenó Parker, cargando a Blanca. Ashton y Tylor se miraron entre sí.
-¡Espera!- Fallen tomo sus cosas y se acercó. Le colocó encima su chaqueta de cuero. Davied le puso en la cabeza su suéter gris. Los primos se aproximaron al coche para abrir la puerta. Ya eran las 3 a.m. Muy noche.
-Olvidenlo, ira con nosotros- dijo Parker, yendo al auto de su hermana.
-Voy yo- se apuntó Tylor.
-Ni lo sueñes- Blanca se acurrucaba en los fuertes brazos de Parker. El ladeo una sonrisa.
-Necesita calor Parker, está helada y temblando- recalcó.
Parker a regañadientes, aceptó.
-Estarás bien Blanca- Ashton le dio un beso en la frente. Los primos y Ashton se subieron al coche, Ash llamó a una ambulancia. Tamara se subió y puso andar el auto. Tylor ayudó a Parker a subir a Blanca, no paraba de temblar. Tylor se sentó y acercó su cuerpo a la espalda de ella. Parker entró y se sentó, abrazando a Blanca.
Pronto Tamara condujo y puso una canción "Heaven" de Julia Michaels.
-¿Acaso vas a poner esa mierda ahora mismo?- se quejó Parker.
Tamara lo vio por el retrovisor.
-Cállate, no es cualquier mierda- siguió viendo al frente. Sonriendo, disfrutando la queja de su hermano. Ella era oscura.
Ambos le daban calor, pero Tylor y Parker de vez en cuando se echaban miraditas. Pero no de las buenas.
-¿Estas mejor?- le pregunta.
-Creo que sí, Cindy- su voz era temblorosa. Parker entendió el chiste y se rió internamente.
-¿Cindy?, ese será tu apodo a partir de ahora- se burló Tylor, su hermano solo rodó los ojos. Blanca se reía en silencio.
Todo el trayecto estuvo en silencio. Blanca no paraba de temblar, entre más se acercaba Tylor, Parker enfurecia.
La ambulancia ya se encontraba en la entrada y los familiares de los Lang bajaron para atenderlos. Una de las sirvientas estaba en la entrada, esperando con ellos.
Los paramédicos ayudaron a bajar a Blanca, Parker no la soltó hasta que Tamara le ordenó de la dejara.
Una paramédica aceco una camilla, Tylor rápidamente se acercó a Blanca para tomar su mano. El paramédico le dio oxigenación y la otra persona checaba su respiración.
-¿Te duele la espalda?- preguntó él debido a que Blanca se arqueo al momento que presionaron en medio de la columna.
-No mucho, pero al respirar, me duele ahí- dijo a duras penas. Tocio Blanca.
-Dejaste de tocer agua, eso es bueno- le dio una sonrisa y ella correspondió.
Checo sus pupilas y garganta.
Hicieron que se recostara y presionaron en su abdomen, todo el procedimiento.
De pronto, la paramédica escribió en una receta.
-No te pasó nada grave, pero tienes que checarte la espalda, no me gustó lo que vi- dijo con tono preocupante la mujer.
Tylor trató de ver la espalda, pero Blanca no se lo permitió.
-De cualquier manera, tienes que ir al hospital, tomar muchos líquidos y no bañarse con agua fría- dijo el paramédico.
Parker se acercó a la mujer que atendió a Blanca y le dio su numero, hubo una clase de coqueteo.
Tylor agradeció a los paramédicos y se fueron. Todos ya estaban adentro, excepto Tamara y Tylor.
-¿Te sientes mejor?, iré en la mañana por estas medicinas, pero duerme con la puerta abierta para cualquier emergencia.-
-Claro- respondió Blanca.
-Debes quitarte eso, Tylor, traele una toalla- en seguida una sirvienta le trajo una toalla y el hermano se la puso. Las chaquetas se las llevó una sirvienta.
Al dirigirse a la recámara, Tamara se adelantó y Tylor se atrasó. Blanca vio a Colton desanimado entrando a su recámara.
-¿Por qué no fuiste hoy?- preguntó ella, él se asustó por la repentina presencia de Blanca. Él se espantó al ver el estado en que se encontraba.
-¿Te pasó algo?- preguntó acercándose.
-Si.. no, nada, solo me caí en el lago- dijo ella, ocultando su dolor en una sonrisa.
-Te ves terrible, ¿Ya te atendieron?-
-¿Todo bien contigo?- evadió la pregunta.
-Bien... me voy, que te mejores- se detuvo antes de entrar- avísame si vas al médico- ella dijo que si y se fue. Colton estaba en mal estado también.
Blanca se bañó con agua tibia y se cambió de ropa pero se encimo una toalla. Ambos hermanos se fueron, Tylor le dijo que la esperaba abajo para comer algo.
Blanca salió de su cuarto dirigiéndose a la cocina.
Encontró una linda cena con calefacción.
-Esta es mi disculpa, te obligue a ir al lago con lo que te compré, no fue ético de mi parte- se disculpaba. Sonaba sincero. Ella quería llorar, pero acababa de salir de una situación de vida o muerte, ella quería felicidad.
-Tylor, yo... no tengo palabras- se acercó y Tylor le ofreció una silla. La comida era más que saludable: ravioles, arroz blanco con acelgas, milanesa y té de vainilla.
A la vista se veía rico. Tylor se sentó frente a ella y le sirvió té.
-Es lo que debes comer, en la mañana tienes que ir al médico, pasaremos por el hospital e iremos a trauma, es todo un caos ahí, tu quieres ser doctora, eso es sensual- jugaba con ella. Algo pasaba en él. Ella tenía hambre, Tylor no paraba de atenderla.
-Oye... yo enserio no vi quien fue el que te empujó, yo solo bromeaba- la veía a los ojos, como un cachorrito.
-No hay problema, estoy con vida- mastico un ravioli.
-Como sea, nos diste un susto, y luego con los chistes, me sorprendes cada vez más, doctora- ambos se rieron.
-Hablando médicamente, si hubiera pasado más tiempo en el agua, probablemente estuviera dormida, pero no fue así, entonces estoy bien, no- se detuvo- estoy más que bien, estoy super- imitó a súper chica.
-Blanca, estuviste en el agua como por 15 minutos. ¿Que no lo recuerdas?, estas solando ahora- esas palabras fueron un golpe en la cabeza para Blanca.
-¿Que... dices?- preguntó ella, asustada. Pronto su mirada bajó a sus manos, y luego al techo.
Tylor comenzó a reírse.
-¡Debiste ver tu cara!- se reia. Blanca igual y golpearon la mesa con ambas manos.
-¡Caes tan fácil!- dijo él, limpiándose las lágrimas. Ella se lo había creído todo.
-Por haber jugado feo cuando te despertaste, era imposible que tuvieras una contusión- Blanca se quedó soprendida- Así es mi amor, también sé de medicina, veo Dr. House- dijo él, muy orgulloso.
Terminaron de comer y él la acompañó hasta su dormitorio.
-Por favor no te recuestes, solo siéntate y cierra los ojos, ¿sí?- Blanca se sentó, él  se acercó y le dio un beso en la frente, ese beso duró mucho.
-descansa- la vio a los ojos y le guiño.
Cuando se fue, estaba a punto de recostarse hasta que alguien se acercó. La puerta estaba abierta, era Ashton.
-Oye Blanca...- se detuvo al ver que se iba a acostar-¿Que haces?, no deberías acostarte- se acercó para colocarle en su espalda un montón de almohadas. Ella a regañadientes aceptó.
-Sentada, no acostada para que te puedas morir- dijo con una pizca de enojo, la miró a los ojos.
-Gracias por... acompañarme, fuiste muy amable al ir y aplaudirme, eres una chica grandiosa- le ofreció una sonrisa.
-No hay por qué, tienes un hermoso talento y un chico como tú no debería desperdiciarlo- pico su abdomen a juego.
-Cuando cantamos, fue sensacional, me hiciste ser más valiente- estaba agradecido. En verdad que lo estaba.
-Eres increíble, ¿ya te lo habían dicho?- Blanca soltó una risa.
-Necesitabas un poco de apoyo y yo solo fui a darte un empujón, ¿pero sabes?, a mi también me gustó, fue explosivo-
-¡Si!, fue todo un concierto- dijo él, muy alegre.
-Gracias por cuidarme- agradeció.
-Me asusté- de pronto deprimio.
-Pero estoy bien- tocó su mejilla y él sostenía su mano. Estuvieron así por varios segundos hasta que él se puso de pie.
-Bien, te veo en la mañana, pero SEN TA DA- ordenó y ella dijo que si a duras penas. Se fue y alguien más llegó. Parecía visita de hospital.
-¿Blanca?- dijo Parker. Ella de inmediato se enderezó, no quería otro regaño.
-¿Si?, pasa, siéntate- se levantó para acercarle una silla pero él la detuvo.
-No, siéntate en la cama- dijo él, acercando la silla para sentarse.
-¿Que pasa?- preguntó al mismo tiempo que se sentaba debajo de las sábanas.
-Fuiste una niña testaruda, casi te vas de este mundo, ¿Por qué diablos no sabes nadar?, todo el mundo lo hace- la regañó. Estaba enojado desde que llegó.
-No sé, ¿bien?, no todos tienen el tiempo para hacerlo- dijo ella, fastidiada..
-¿Tu madre no lo tenía?- hubo silencio total. Parker se quería disculpar.
-Lo siento, yo no sabía nada- se acercó más a ella.
-No te agradecí por salvarme, la verdad es que tu actuaste más rápido que cualquiera-
-Era una vida- dijo él.
-Deberías estudiar eso, ya sabes... medicina- él rodó los ojos.
-No es lo mío, sinceramente- recalcó.
-Hoy fue un día de locos, mi parte favorita es la audición de tu hermano, él estuvo fenomenal- dijo, muy orgullosa.
-Si, lo sé, estuve ahi- dijo con mucha ligereza, ella abrió los ojos como platos. Sorprendida.
-¿Estuviste ahí?- él asintió- ¿Y por qué no te acercaste?-
-Eras buena animadora, contigo era mas que suficiente-
-Eres un buen hermano-
-No lo creo, pero gracias- recargó sus brazos en el respaldo de la silla.
-Muchas gracias por salvarme- agradecia.
-No lo dudé ni un segundo- dijo él. Muy seguro.
Se quedaron en una sola mirada. Un silencio absoluto. Y disfrutaban de ello.
-Que te mejores- se acercó para darle un beso en la mejilla. Y sus ojos se encontraron. Esos ojos, los ojos de él. Sus brazos tatuados.
-Descansa Blanca- se despidió y se fue. Sin más.
 




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