--"ahh rayos"-- me siento muy extraño, Gaia. ¿Cómo es que llegue aqui?.
-- Hola kensel que bueno que ya hayas despertado. Imagino ¿qué ya conoces a Lirian? Ella fue quien te trajo hasta aqui.
--Gaia me han pasado muchas cosas, extrañas enemigos espeluznantes y abominables aparecen y desaparecen de la nada, seres demoniacos salidos de realidades oscuras que quieren matarme, me acechan repentinamente. La verdad aun no puedo entender porque me están sucediendo estas cosas. Any se encuentra desaparecida; debo hallar la forma de encontrarla. Esos seres se la han llevado a la ciudad Numbra, dime la forma de llegar a esa ciudad.
--Kensel La ciudad numbra está en uno de los reinos ocultos. Necesitarás encontrar a otra persona que también guarde sentimientos por la niña, y después en una noche de luna llena frente a una superficie reflectante; puede ser un lago estando ahi, tú y esa persona se toman de la mano y utilizas el pase que yo te di, asi, podrás abrir una grieta umbral hacia esa ciudad. Debes saber que:
--De tener otro encuentro con un demonio o un ser de esa naturaleza, si combates y llevas tu cuerpo a límites que no estás acostumbrado, esta vez Podrias morir.
--Quizás; Gaia pero no pienso abandonar a Any hare todo lo que, esté en mis manos para ayudarla, aunque eso implique perder mi propia vida.
--Debo ir a un lugar creo que ahi voy a encontrar a la persona que me puede ayudar.
--Veo que estás decidido, a dar tu vida, si es necesario para rescatar a esa niña, sabes que aun no estás preparado para dominar tus poderes, pero nada de lo que yo te diga ahora, te hará desistir de esa idea. Lo uníco que te dire es que si logras regresar con vida; ven a buscarme ya es hora de que conozcas tu otra parte. Tú, otro ser; sólo así; sabras si estás listo para afrontar tu destino.
--Para lo que piensas hacer vas a necesitar ayuda; Lirian podria ser una valiosa aliada.
--Si quiere venir que lo haga, pero no mé responsabilizo por su vida.
--Gaia mira a Lirian y está asiente con la cabeza en señal de acuerdo. Kensel toma su espada y la introduce en la funda y piensa en silencio. No me importa que clase de enemigos tenga que enfrentar, yo no me daré por vencido hasta no derrotarlos...
--Pasaron las horas y al dia siguiente, del ocaso de un atardecer color rojizo nebulizado; Lirian y yo, ibamos en un tren rumbo a la ciudad Eternity, ciudad donde se encontraba la persona que yo buscaba.--Mientras el tren avanzaba rumbo a esa ciudad, yo miraba por la ventana a través del cristal hacia el horizonte, con la mirada perdida completamente absorto de mi entorno.--Kensel que estara pasando por tu mente, te miro y no puedo creer que, seas ese mismo ser poderoso que combatió con esos demonios; ahora solo pareces, un hombre que trata de huir de su pasado. --Vaya si que eres un hombre muy atractivo.--Piensa y reflexiona Lirian en silencio, mientras que desde un asiento del frente observa a Kensel, perdido en sus pensamientos.
--Tal parece que algo me empuja hacia los caminos de las sendas del guerrero, en mi pasado había jurado no volver a blandir una espada nunca más; pero aqui estoy, de nuevo, con enemigos de naturaleza desconocida y muy hostiles que solo quieren mi cabeza; y la vida de una niña que, ahora solo depende de que yo no la abandone. Toda esta situación es nueva y extraña para mí; hasta hace unos dias atras mi realidad era otra y jamás habia creido que todo esto que me está pasando fuera posible, demonios, Angeles, criaturas monstruos, seres de naturalezas extrañas, realidades que nunca pensé que existieran o que fueran posible; todo esto me parece una locura.
--El tren avanzaba, veía pasar una tras otra las montañas, enormes árboles, praderas, campos floridos, la puesta del sol esun espectáculo hermoso y natural. Nose porque pero todo aquello me llenaba de paz y tranquilidad. Repentinamente e intempestivamente comencé a observar un enjambre de cuervos negros revoloteando alrededor del tren, y una voz trémula me comenzó a llamar, pero solo yo podia escuchar aquella molesta voz, esta se metia intensamente en mi cabeza.-¡Ven, ven sígueme! Vamos, sé que puedes escucharme.-¿Quién rayos eres?¿Qué es lo que quieres de mí?.-Ven si te atreves té, espero arriba en el techo del último vagón ahi te pienso mostrar quien soy.
--Sin decir nada más la voz tenebrosa salio de mi cabeza, seguí mirando, por un momento en la ventana, aun podia ver y oir él, revolotear escabroso de las alas de los cuervos siguiendo el tren. Mire a Lirian y en su expresion note que ella también me observaba injuriosamente.-¿Qué sucede Kensel? ¿Te pasa algo? Puedo ver que algo te está inquietando.--¿Acaso esos cuervos que siguen el tren, tienen que ver?--Lirian es una mujer muy intuitiva y perspicaz, parece que no se le pasa nada.--No, no pasa nada solo estoy un poco mareado por el viaje; caminaré un poco.--Me levante tome la espada tratando de disimular, pero lirian me seguia con su mirada inquisidora. Los demás pasajeros permanecían sentados, tranquilos ajenos a aquella realidad que está más allá de sus ojos.
--Empeze a caminar vagon por vagon dejando atras a Lirian y a los múltiples pasajeros que se transportaban en el tren.--Finalmente; llegue hasta el último vagón, subí por unas pequeñas escaleras que me conducían al techo.--En ese momento, a unos pasos de mí; gran parte de los cuervos se comenzaron a juntarse hasta ir formando la figura de un ser oscuro, de presencia tenebrosa e imponente, su cuerpo fue cubierto por una capucha negra, que le ocultaba todo el rostro, el resto de los cuervos revoloteaban a su alrededor; mientras él sostenía en su mano derecha un arma en forma de una gran guadaña.--Ante su presencia, caí de rodillas, sujetado por una gran fuerza extraña, ajena a mí.
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Editado: 28.06.2022