Capítulo # 4 (enemigos ocultos)

Tiempo después me encontraba en la calle Marrows, frente a dos grandes puertas enrejadas las cuales se encontraban a la entrada del lugar. Mire hacía las grandes letras grabadas en la reja que decían (orfanato Glindón todo por la Niñez) Entre por el umbral de la puerta sin dudarlo dos veces como solía hacerlo antes. Algo en mi no-se podía explicar por qué, en ese momento que entré pude volver a sentir una presencia o sensación extraña de maldad y oscuridad que chocaba contra mí.
Vaya, Vaya si no me equivoco ¿usted debe ser Kensel? Inquirió la mujer con un tono de voz suave, mirándome fijamente a los ojos, su lenguaje era refinado y su aspecto estéticamente deslumbrante.

Su cabello largo liso azabache, de contextura delgada y vestía ejecutivamente elegante.
-Sí, así, me llamo, disculpe ¿quién es usted?
-Mi nombre es Lilith y soy la nueva superiora encargada del orfanato.
-! ¿Qué? ¡Y ¿dónde está la superiora Zila?
-Ella fue trasladada.

Pero antes de que se marchara me hablo de usted y dejo esta fotografía y este pequeño sobre, con la recomendación de que se lo entregarán a usted apenas viniera al orfanato, creo que es una carta. Kensel; Dígame algo ¿es usted músico?
-¿Porque me lo pregunta superiora Lilith?
-Se lo pregunto por el estuche de guitarra que lleva con usted. Discúlpeme si mi curiosidad es indiscreta.
Mire la foto en ella aparecían con sus rostros sonrientes Zila, Any y yo. Era curioso porque yo ni siquiera me acordaba de ese momento plasmado ahí.
-Debo. Imaginar que vino a ver a Any verdad.

-Sí, superiora Lilith puede decirme ¿dónde está ahora Any?.

- Vaya por ese pasillo lo más seguro es que esté en el jardín del patio jugando; ¿Lo acompañó?...

-No gracias, no se moleste yo conozco el camino. ¿No cree que las paredes de este lugar están muy pálidas como faltas de color y esas luces muy tenues superiora Lilith?.

- ¿Le parece a usted Kensel?.

- Sí, la última vez que vine a este lugar no tenía este aspecto lúgubre.

-Con el pasar del tiempo todo tiende a cambiar Kensel, además nos han reducido el presupuesto. Ah; se me olvidaba después de que haya hablado con Any me puedes hacer un favor y pasar por mi oficina me gustaría hablar con usted.

Di la vuelta con dirección al pasillo que daba al jardín del patio, empecé a caminar dejando atrás a la superiora Lilith; podía sentir como su penetrante mirada seguía mis pasos. --¡mm! Kensel puedo sentir la energía de tu aura es exquisita. Piensa Lilith mientras saborea con su lengua sus enrojecidos labios del lápiz labial.

El pasillo era extenso, ventanas a lado y lado de las paredes, unas daban a la calle y otras a salones llenos de cúmulos de sillas viejas. Algunas luces de las lámparas del pasillo, estaban averiadas, ya que se tornaban intermitentes. Ahora yo, ya sabía de dónde provenía esa extraña y desagradable sensación maligna. 

El origen era por alguna extraña razón la superiora Lilith. Trataba de entender o explicarme porque yo, ahora podía sentir o tener este tipo de percepción extrasensorial. Que me indicaba un grado o nivel de hostilidad. Mi mente trato de razonar lo más lógicamente posible, quizás sólo fue una equivocada impresión o me estaba volviendo loco. ¡Ah! Pero en qué tonterías estoy pensando yo ni siquiera creo en estas cosas. Últimamente mi mente ha estado imaginando o haciéndome oír cosas que no pueden ser posibles.