Extraño.
Extraño ser tu primera opción,
aquella a la que corrías a contarle tu día,
a quien presumías y a quien le sonreías.
Extraño ser ese lugar donde te sentías seguro y en calma.
Extraño los días de tormenta,
cuando nuestros cuerpos danzaban al compás de las gotas que caían lentamente afuera.
Extraño que el brillo de tus ojos me pertenezca,
y que vengas con tus abrazos a sorprenderme.
Extraño que seas solo mío,
y que me tomes para ser solo tuya.
Extraño ser la única en tu vida,
y que no te vayas siempre con ella.