Mamá, Rick, Danniel y Sam llegaron muy tarde anoche.
En la casa hay cámaras y de vez en cuando las reviso y me encontré con que todos llegaron a las 5:00 a.m. ¿quién llega a esas horas de la noche sabiendo que hay un ser solo e indefenso en su casa? Respuesta: mi familia. Me levanto tarde ya que es domingo y nunca me levanto temprano los domingos, si tuviera que ir a misa tal vez, pero todas las misas de GOODMAN son en la mañana o tarde, así que es obvio que este divino ser no puede asistir.
Escucho un "Toc, toc, toc" en la puerta y lo único que sale de mi garganta es un gruñido. Con pesar, me levanto de mi cama y me dirijo a la puerta y cuando la abro veo a un sonriente Danniel parado frente a mí.
—Buenos días, Cara —dice Danniel muy alegre.
—¿Por qué osas despertarme, mortal? —pregunto yo aún medio dormida, me pasó los puños por los ojos para tratar de despertarme un poco más, pero no hace mucho efecto.
—Solo quería hablar contigo sobre algo muy... Importante.
Eso hace que me despierte por completo, la palabra "importante" entre Danniel y yo es un código de "Tengo un enorme problema que si no es atendido ahora me muero". Lo hago pasar a mí habitación y el toma asiento en mi silla que está junto al escritorio y yo me siento en la cama, espero a que Danniel hable, le daré todo el tiempo que él necesite, cuando hay un asunto importante no podemos presionar mucho.
—Creo que metí la pata con Sam —dice al fin, ¿Qué pudo pasar con Sam?
—¿Qué sucedió, Danniel?
—Anocha ella y yo salimos para distraernos de el hecho de que saliste con el baboso del bar...
—No es un baboso —murmuro.
—...Y volvimos a ir al club Skye —continua Danniel ignorando por completo lo que dije—. Tomamos como locos y nuevamente terminé ebrio hasta más no poder. Volvimos a casa junto con tu madre y mi papá, solo que ellos siguieron bebiendo en el patio, Sam y yo nos quedamos solos y... terminé besándola.
¿¡Qué!?
No digo nada, el silencio reinando en la habitación.
—¿Besaste a Samantha? —digo y no sé por qué pero mi voz suena ligeramente furiosa.
—Sí, pero te juro que...
—¡Besaste a mi prima, Danniel, por Dios! —grito dejando salir la furia y frustración que siento justo ahora. Mi mejor amigo y mi prima se han besado—. ¿¡En qué mierda estabas pensando!?
—No pensé, simplemente yo...
—Simpleme no pensaste, dijiste "Oh, bueno Cara no está y su prima sí, así que ¿por qué no?"
—Cara, cálmate. No sé qué me pasó, estaba ebrio y un poco caliente y...
—¿¡Te follaste a Sam!?
—¿¡Qué!? ¡No! —se escandaliza—. Mira te estoy diciendo esto porque eres mi amiga y quiero que me ayudes, nunca había besado a alguien sin estar juntos y... ¡Argh! ¿¡Por qué tenías que salir con ese imbécil!? Si no lo hubieras hecho no me hubiera embriagado.
—Harry no te obligó a tomarte todos esos tragos y mucho menos a besar a Sam.
Veo como la ira deja los ojos de Danniel para tomar otra emoción: la tristeza. Verlo así me hace reaccionar, ¿por qué le estoy gritando? Él es mi mejor amigo, no sería justo arruinar una amistad de años por una idiotez mía.
—Danniel, lo lamento yo... —comienzo pero él me interrumpe.
—No, déjalo así. Igualmente sabía que esto era un error —dice pasándose una mano por el cabello. ¿Desde cuándo echarse para atrás el cabello es tan sexy?
—Hey, no, soy yo. Soy una idiota por molestarme contigo por algo que no significó nada para nuestra amistad, somos más fuertes que...
—Ese es el problema, Cara.
—¿De qué estás hablando?
—Para ti no significa nada porque somos "amigos" —dice haciendo comillas con los dedos en amigos—. Tú me quieres como un amigo, un compañero o un hermano, en cambio yo... yo te quiero como algo mucho más allá de mejores amigos o hermanos. Cara Roth, estoy enamorado de ti.
¡A la mierda todo!
Me paralizo. ¿Danniel, mi mejor amigo, está enamorado mí? No puede ser verdad. No puedo gustarle a mí mejor amigo de toda la vida... Pero si no puede ser ¿Por qué mi corazón late como loco de emoción? Esto no tiene ni una gota de lógica, no es normal.
Señor, sé que nunca voy a misa pero por favor iluminame.
—Danniel yo... eh... —no sé qué decir.
—No digas nada —se apresura a decir con una sonrisa nerviosa—. Solo estaba bromeando
Suelto un suspiro, aliviada por saber que solo fue una broma suya, no estoy lista para lidiar con algo así. El ambiente queda un poco incómodo, así que pienso rápidamente en como cambiar el tema.
—Danniel, sabes muy bien que estoy comprometida —le digo con total inocencia—. ¿Que diría Cuatro si sabe que el padrino de nuestra boda me está coqueteando?
Ese comentario lo hace reír, y está vez una sincera. Eso me tranquiliza un poco, esa táctica siempre funciona para cambiar el tema: hablar de libros.
—Tienes razón —dice divertido—, Annabeth tampoco estaría muy contenta al ver a su esposo coquetear con su mejor amiga.
—¡Ja! —digo haciéndome la ofendida—. ¡Osea que prefieres a esa rubia antes que a tu común amiga castaña! Me siento usada.
Nos empezamos a reír nuevamente, pero su confesión sigue rondando en mi cabeza, ¿de verdad fue solo una broma? <Vamos, Cara, sabes que quieres besar a tu mejor amigo, no te hagas la que no quiere>. Eso suena muy perturbador, mini Cara <La verdad puede perturbar aveces, Cara>. No, tú perturbas a la humanidad... O mejor dicho, a mí.
Veo la hora en mi reloj de mi mesita y veo que ya son las 8:00 a.m. y mi estómago ruge. ¿Desde cuándo tengo tanta hambre? Danniel lo nota porque comienza a reír.
—¡Hey! No te burles —me quejo cruzando mis brazos sobre mi pecho—. Tengo mucha hambre, y nadie está despierto para cocinarme.
Editado: 11.12.2023