♡ ALCINA♡
después de haberme quedado por un gran rato, diría mejor casi mayor parte del día en aquel parque sentada ignorando a todas las personas que pasaban por el alrededor. solo estaba sumergida entre el mar de recuerdos y pesares que he vivido todo este tiempo. en estos quince años alado de cristaldo; muertes, dolor, amenazas, la tortura de solo sentir su presencia tan cercas de mi. el aura tan frívolo y repugnante que es para mi. el esplendor del oro que decora mi cuello, mis muñecas, mis dedos, o mis oídos. cada joya que tengo para mi es como el reflejo de las cadenas de oro que cristaldo cannizzaro ha puesto sobre mi. deje que por quince años me mantuviera encadena bajo su dominio y amenazas, pero ya no mas. con este divorcio me desharé de esas cadenas y volveré a comenzar mi vida. alado de mi hijo y totalmente lejos de la maldita amenaza que representa cristaldo cannizzaro para nuestras vidas.
finalmente me decidí en regresar a la mansión, al bajar del auto enciendo mi móvil recibiendo un mensaje de tesauro informándome que estaría en un bar con sus amigos además de enviarme una fotografía, solo sonreí. realmente que entre esta tormenta que he tenido que vivir, en la maldita jaula de oro en la que me siento encerrada mi única esperanza de poder liberarme de cristaldo. de volver a ser feliz y libre es mi hijo. al entrar a la mansión un camino de velas se marca en el suelo como un camino de pétalos de rosas amarillas. me acerco escuchándose mis tacones por la casa hasta una mesa donde estaba una nota junto a unos tacones negros, un vestido de color negro con rosas amarillas decorándolo, un pequeño reboso con rosas amarillas igual adornándolo y un juego de joyería de diamantes simulando rosas amarillas. tome la nota para leerla
/mi rosa amarilla, ve al jardín usando estos regalos que te dejo. la sorpresa que encontraras esta noche estoy seguro que te dejara sin aliento. te amo/
deje escapar un su suspiro bajo para tomar las cosas e ir a una habitación donde cambiarme. el vestido quedo a mi talla, igual que los tacones, el juego de joyería; un collar, unos pendientes, una pulsera y un anillo adornaban mi piel. solo me puse el reboso para poder seguir mi camino al jardín donde seguramente cristaldo me esperaría
al salir al jardín estaba decorado por ramos frondosos de rosas amarillas en pilares pequeños. candelabros encendidos que habían ver un ambiente romántico, en el centro una mesa con candelabros y el juego de vajilla de plata, baje los escalones para acercarme a cristaldo quien me miraba sonriendo como es típicamente de él queriendo mostrar una mirada angelical detrás de esa sonrisa cuando realmente es un maldito demonio
-mi rosa amarilla_ tomo mi mano hincándose frente a mi besándola con ternura quien pensaría que el hombre mas poderoso de calabria estaría hincado frente a mi. muchas mujeres amarían este detalle de cristaldo, yo sinceramente lo detesto. se levanto acariciando mi mejilla_ feliz cumpleaños mi amor espero que esta sorpresa te guste, he preparado una cena especialmente para ti
-creí que no te gustaba cocinar, para eso tienes sirviente_ alejo mi rostro de su mano
-mi amor, por ti haría eso y mas
-incluso matar_ murmuro fastidiada
-me alegro que me conozcas bien amor_ se acerca tomando mi mano guiándome a una de las sillas de la mesa donde me siento_ después de la cena amor, te daré tu tan esperada sorpresa que estoy seguro te fascinara
-dudo que lo que venga de ti cristaldo me fascine, diría mas bien que me traumara aun mas_ menciono haciendo reír a cristaldo
-no te preocupes amor, esta sorpresa estoy seguro que cambiara nuestras vidas_ alza la mano para que dos de los hombres de seguridad se acercaran y comenzar a servirnos la cena_ provecho amor mío_ solo tome el cubierto para comenzar a comer aquella comida que aunque mi paladar no encontraba sabor alguno a la carne sazonada y cocinada cuidadosamente. mi garganta luchaba por dejar pasar los bocados y no devolverlos. como podría celebrar otro cumpleaños. otro maldito año siendo la presa de este maldito psicópata, un año mas siento la esposa de cristaldo cannizzaro
entre el cómodo y tranquilo silencio entre nosotros degustábamos de la cena, acompañados por el sonido de algunos búhos, los grillos o los cubiertos golpeando en los platos. aun puedo recordar aquellas cenas en familia donde realmente mi sonrisa y mi felicidad eran reales. donde podía ser realmente feliz alado de las personas que realmente amaba y apreciaba mas que mi vida; mis padres, tizio, Palmira... Luigi, ahora son solo vagos recuerdos que con el pasar del tiempo se pierden en el mar del olvido bajo el tormento de la cristaldo. tizio había muerto en un accidente de autos por una explosión cuando tesauro había nacido, no soporte el dolor. dos meses después me entere que mis padres habían muerto. mi familia había muerto. había perdido a todas las personas importantes para mi, ahora solo me queda mi hijo. el es el único familiar que me queda en esta vida
al terminar la cena las mujeres se llevaron los platos dejando las copas de vino, solo bebí un poco de aquel vino sintiendo la gran sonrisa de cristaldo sobre mi
-te gusto la cena amor
-estuvo bien, felicidades_ cristaldo sonríe con gran orgullo
-sabia que te encantaría amor, no es por nada. pero la cocina también ha sido un toque mío_ se ríe que ni pizca de gracia causa en mi, uno de los hombres de cristaldo trae otro plato ante mi cubierto por una tapa de aluminio haciéndome dudar
-¿que es esto?
-tu postre amor, para cerrar esta magnifica noche_ dudo, al remover la tapa de aluminio no evito fruncir el ceño en ver mas bien en ver un sobre sobre el plato, son resultados médicos
no tome importancia a que cristaldo se levantase de su lugar, tome aquellos resultados para leerlos cuidadosamente sintiendo como el mundo se paralizaba en esos segundos, mi corazón parecía detenerse y mi cuerpo congelarse. mis ojos se abrieron lo mas posible ante lo que leyeron y mis manos tuvieron un pequeño temblor aun mas por las palabras susurradas de cristaldo en mi odio llenas de malicia y diversión
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Editado: 24.03.2024