Evan
Volteé hacía atrás, Ace notó el atuendo de Sorin corrió detrás de ellos. Los chicos llevaban a Cleo con las chicas, detuve a los chicos.
Evan- Ace va detrás de Cuervo y Sor… - Isa y Zehra se acercaron con nosotros, notaron que las cosas empeoraron.
Lev- Nosotros iremos a detener a Ace, es muy peligroso que las chicas enfrenten a Ace. – Volteó ver hacía las chicas. – Ustedes se encargarán de Cleo. – Las chicas asintieron, nos apresuramos para encontrar a los chicos. Al acercarnos hacía las escaleras, miramos personas bajando, todos estaban asustado. Se escuchaba disparo en el segundo piso. Nos apresuramos, al llegar al segundo piso nos encontramos a Ace golpeando a un tipo vestido de negro y del otro lado Ozias estaba disparando.
Evan- Sorin está con Ozias, debemos alejarlo. – Dije, Kae se acercó conmigo.
Kae- Nos llevaremos a Sorin al último piso mientras ellos distraen a Ace. – Todos asentimos, Kae y yo corrimos directo hacía Ozias y Sorin. – Sorin, irás con nosotros. Ace está aquí.
Ozias- Si encuentran a Davis no dejen a Sorin solo. – Dijo mientras disparaba. Ambos asentimos, nos llevamos a Sorin al siguiente piso. Al llegar al tercer piso, notamos que era un club de piscina, había chicas en traje de baño.
Evan- Mierda! ¡¿Por qué ahora?! – Bufé.
Sorin- Hacía dónde vamos? – Preguntó.
Kae- Un lugar seguro y es la azotea. No queda de otra. – Dijo, sentí como Sorin me tomó de la mano.
Evan- Mierda!
Isa
Los chicos nos han dejado a Cleo y el dinero. Me puse la mochila mientras esperábamos a recibir una orden de Lev o Kae. Luce se fue a revisar la entrada en caso que llegara más de los HRTS y Zehra se fue a revisar el área.
Cleo- Creen que podrán solamente ustedes 8 contra nosotros? – Preguntó, no le respondí. – Akira, todos saben el juego… si el comodín cae tu serás la siguiente que se convertirá en líder. Será un placer pelear contra ti. – Dijo.
Isa- Aun no pelearas conmigo si no has revelado quien está detrás de todo esto. – Aclaré.
Cleo- Claro, el comodín hizo una tonta decisión en haberte puesto en la siguiente líder. – Bufó, seguí ignorando. – Al menos los Phantoms son más estúpidos que los Dioses de la Muerte. – Empecé a limpiar mi navaja, fingía que la estaba ignorando, aunque escuchaba cada palabra que salía de su boca. – Los Dioses de la Muerte hicieron un trato con uno de los miembros de su grupo. En realidad, asesinaron a un inocente que no era el Jefe. Encerraron al único que el Comodín confío. Asesinaron a uno de los más fuerte y tienen al líder de los HRTS. – Siguió hablando. – Enserio, no me van hacer nada después que no les dije quién es el traidor? – Preguntó.
Isa- Ellos no, pero yo sí. – Dije.
Cleo- Al menos no me torturaran demasiado ya que cooperé con decirles dónde se encontraba el dinero. – Murmuró. – Akira, me puedes dar un poco de bebida alcohólica antes que muera? – Preguntó, suspiré y guardé mi navaja. – Anda! No seas mala, sabemos que los Phantoms son los héroes de sombras. Por favor, solo un poco. – Me levanté de la mesa y me acerqué hacía al bar, pedí una bebida. Cleo me tenía harta, así que decidí callarla. El barténder me entregó la bebida, al regresar encontré la silla vacía dónde se encontraba Cleo.
Isa- ¡Maldita! – Deje la bebida en la mesa. Sentí como alguien colocó su brazo en mi cuello, con la otra mano colocó su arma a un lado de mi cabeza. – Buena jugada estúpida.
Cleo- Te había dicho que algún día podremos pelear. – Dijo en tono frío.
Isa- Estás jodida Cleo… no tienes a dónde huir. – Dije. Cleo empezó a usar un poco de más de su fuerza.
Cleo- No tienes a nadie quien te salve en este momento, ni tu novio pequeña rata. – Hice un movimiento rápido, le arrebaté su arma y apunté directo hacía a ella. – Dispárame. – Dijo con una sonrisa. Luce miró la escena y Zehra se estaba acercando lentamente hacía a nosotras. – Sé que no eres capaz, tu pequeña ansiedad no te permite en dispararme.
Isa- Es muy obvio, pero tengo la capacidad de hacer esto. – Usé el arma de Cleo para darle un golpe en su rostro, Zehra se sorprendió. Me subí encima de Cleo y la sujeté del cabello. – No significa que tenga ansiedad me va impedir hacer mi trabajo. – Dije en un tono amenazadora, miré varios tipos entrar por la entrada. Volteó vernos hacía nuestra dirección, señalaron hacía a nosotras. Sacaron sus armas y empezaron a disparar. Zehra y Luce empezaron a disparar mientras yo me encargaba de Cleo. Sentí como me empujó hacía atrás, por suerte la mochila me ayudó un poco.
Cleo- Demuéstrame Akira que tan fuerte eres! – Limpió su labio. Me levanté y observé a Cleo. Corrió hacía mi dirección, empezó a golpearme. Sentí poco a poco la adrenalina despertar dentro de mi cuerpo, el ambiente estaba tenso, la gente huía y otros se escondían. Mi respiración era más rápida, necesitaba respirar profundo para no cansarme tan rápido. Sentí como los golpes de Cleo tocaba cada parte de mi cuerpo, son fuertes. Noté que estábamos en la pista de baile, la música aun seguía. - ¿Qué sucede reina de corazones? ¿Acaso era lo único que podías hacer? – Alzó la voz. Observé a Cleo en silencio, limpié mi labio.
Isa- Claro que no. – Respiré profundo, empecé golpear a Cleo en su abdomen, luego sujeté su cabello para empujarla directo al bar. Al acercarnos al bar, usé toda mi fuerza para lanzarla hacía al bar. Lancé a Cleo hacía al bar, las botellas empezaron a caerse encima de ella y el estante tambaleaba. Zehra y Luce seguía disparando, me acerqué hacía a Cleo. Está vez no tenía fuerzas, tenía pedazos de vidrios encajados en un brazo. – Esto se terminó Cleo… dinos quién es el traidor? ¿Quién es el jefe de los Dioses de la Muerte? – Pregunté.
Cleo- Jódete… - Escupió sangre, en este momento no tenía control en mi misma, sentía una gran ira dentro de mí. Le di un puñetazo a Cleo. – No les diré… - Le di otro puñetazo en su rostro. Escuché un disparó cercas de mí, era un tipo que disparó hacía mi dirección. Retrocedí un poco, Cleo empezó a reírse. Miré que tenía un arma en su mano derecha apuntando hacía mi dirección. – Te lo diré y siempre se te quedará grabado. – Dijo. – Davis, jefe de los Dioses de la Muerte y organizador de crimen. Serás la única que sabe quién es.