Capítulo 15

Capítulo XV

Sus ojos estaban del rojo más puro que habia visto. Miro con rabia todo lo que sucedía, hasta que se fijó en mi y por un microsegundo sus ojos volvieron a su color natural pero no duro mucho. Entonces miro al lobo, el se tensó y se arrodilló torpemente. Era una imagen de grandeza y fuerza.

- Sal - escuche que le dijo a Naver.

- Ahhh - me quejé, ella me miro y se acercó a mi.

Me miro y sus ojos volvieron a su color normal y tomo mi cara en sus manos.

- Voy a llevarte arriba, aguanta un poco por favor, no vas...no vas - respiraba muy rápido, estaba nerviosa, sentía su preocupación, su miedo. No me quería perder al igual que perdió a su madre. Acaricie su mejilla con la poca fuerza que me quedaba.

Me desperte exaltado, desorientado estaba en una cama vendado.

- Mira beta de mierda, tu no vas a decir lo que debo hacer o no con mi Alpha, te recuerda que estas bajo mis órdenes y por lo tanto haces lo que yo te ordene - era la voz de Jinna - soy yo tu Alpha.

- Jinna no sabemos donde esta tú padre, escapo apenas sintió tu presencia y se largo, sabía que no venías hablar, conocía que por el estado de Nam lo matarías - ese olor, esa voz eran de Lara.

- Ya lo encontré - hablo Jinna - lo hare pagar. Haré que pague todo el maldito daño causado.

Noto su tacto en mi rostro, me estaba tocando con sumo cuidado, tenía miedo de lastimarme luego acarició mi pelo con su otra mano.

Por Jinna
 

Paso una semana exacta del ataqué a la manada.

Nam ya estaba completamente curado y la manada gracias a todo su esfuerzo ya estaba restablecida y como nueva incluso se le hicieron algunas mejoras.

Mi padre lo encontraron muerto. Se había suicidado a la orilla del lugar donde enterraron a mi madre. No lo llore no se lo merecía, él fue un monstruo, fue el causante de la muerte de mi madre, aunque no recuerdo exactamente como fue que sucedió, lo odiaba tanto por eso.

Ahora me encontraba en la habitación lista para dormir y Nam en el baño.

Faltaba poco para mi otro celo, lo presentía porque apenas vi salir a Nam del baño tenía la necesidad de tirarmele encima.

- ¿Me deseas? - pregunto Nam de pronto.

Sin darme cuenta ya estaba excitada y claro el lo tuvo que darse cuenta al oler el aire, para volverlo un tin más loco empecé a soltar feromonas.

- Si, te deseo como no tienes una idea - susurre seductora.

Se acercó a mi, con su mano derecha toco mi rostro, alzandolo por el mentón hasta que nuestros ojos se encontraron y sus labios capturaron los míos en un beso.

El beso fue tan lento como sensual, Nam se tomo un tiempo saboreando mi boca. Sus manos de mi cintura bajaron a mi trasero apretandolo. Jadee al sentir sus dedos aferrándose a mi piel.

Sentí como mordió suavemente mi labio inferior, antes de empezar a dejar besos en mi cuello, que instintivamente me hizo gemir.

Sus manos bajaron para subir mi vestido y esta vez cuando toco de nuevo mi trasero pude sentir sus manos y sus dedos en mi carne.

- Nam - dije con voz entrecortada y sin aliento.