Pov Elizabeth Gray.
Estábamos en la hora del almuerzo, cuando Ambar lanza sus libros en la mesa.
- Que te pasa? No ves que estábamos comiendo - dice Kiara frunciendo el ceño.
- Perdoname cariño, pero tengo algo que contarles - dice con una expresión de entusiasmo en el rostro - vieron ya al chico nuevo?.
- Hay un chico nuevo? - dice Milagros.
- Así es, dicen que viene de intercambio y esta condenadamente bueno.
- La pregunta, es como lo sabes?- dice Kiara.
- Pues, tengo mis contactos cariño - responde Ambar con un guiño.
- Quieres decir el oír conversaciones ajenas Hamilton - digo de manera burlesca.
- Que calumnia Elizabeth - dice esta - bueno, tal vez pase por la secretaria y escuche algo de un alumno de intercambio - dice, soltando una risita
- Vaya y yo pensando que ya no íbamos a tener gente nueva por aquí - dice Kiara.
- Es raro, pero bueno, si me disculpan iré a buscar a Cristhian - digo levantandome
- Ve a buscar a tu Romeo, Julieta - oigo decir a Ambar, echo una risita por las cosas que se le ocurre a esta mujer.
Voy enfrascada en mis pensamientos que no me doy cuenta de que choque con alguien, solo hasta que siento una mano en mi cintura, alzo la mirada y me paralizó.
-Te encuentras bien? - dice el, esa voz, esa maldita voz, siento que ya lo he oído antes.
- Yo-yo lo-si-siento no te vi - digo intentando controlar mi respiración que no se en que momento se acelero tanto.
- No te preocupes, ha sido mi culpa, ver a una chica tan bonita como tú me dejó embobado - dice con una sonrisa y un guiño final.
- Oye tu, saca tus desagradables manos de MI novia - oigo una voz detrás de mi, y se que es Cristhian siendo posesivo, como siempre.
- Esta bien, cálmate amigo, solo la intenté sujetar para que no caiga - dice el chico desconocido levantando las manos de manera inocente.
- Sujetarla mis bolas, yo vi, estabas tratando de ligar con ella imbecil, no te quiero ver cerca de ella nunca, no me interesa si eres nuevo y te llevas una mala impresión de mi, solo no te metas con lo que me pertenece - dice Cristhian luciendo más alterado de lo normal.
- Mira amigo, ella no es de tu propiedad, se pertenece ella sola, y cálmate quieres, falta que la orines nada más - dice este con una sonrisa que hace que me recorra un escalofrío desde la cabeza a los pies - hasta luego tu chico loco, y hasta luego preciosa - dice despidiéndose, esto último me lo dice en el oído para que mi novio no lo escuche.
- Cielo, discúlpame por tarda, estas bien? No te hizo nada? - dice Cristhian inspeccionando mi rostro.
- Estoy bien, si? Cálmate, que te sucede? Porque te alteraste de esa manera? - digo
- No es nada, no te preocupes cielo, vamos - dice el.
Lo sigo sin contradecir nada de lo que me ha dicho, pero lo conozco se que algo oculta.
Editado: 23.01.2021