Simplemente hay personas que te hacen sentir lo mejor del universo. Benjamin y Sebastian era uno de ellos, me motivaban a seguir con mis sueños de actuar, aquel día que estuve en rosas la inspiración llego a mí y empecé a interpretar a Julieta de la obra de Shakespeare Mientras benjamín me hacía hurras detrás del escenario y todo iba genial, sabía que es lo que diría en la audición y no se sentía temor de estar en el escenario.
Pasaron dos semanas de preparación me desperté entusiasmada y confiada de mi misma pero a la vez sentía un poco de tensión, baje corriendo las escaleras con una sonrisa de oreja a oreja mis padres decían ¡calma suzy¡ te ira bien y yo los abrazaba emocionada, era una lluvia de emociones, mejor dicho era una tormenta de emociones, cuando estaba a punto de irme mi mamá me detuvo y me dio un hermoso vestido grite y grite de emoción de verlo sabía que me iría bien y obtendría el papel principal.
Llegue al colegio, Sol me esperaba en la entrada corrimos hacia los baños de chicas para alistarme, ahí estaba Gabi también alistándose para la audición. Me miro de pies a cabeza y yo hice lo mismo y sólo le dije suerte, al parecer se ofendió, aventó la puerta y se fue, me mire con sol y con una mirada cómplice empezamos a reírnos.
Corrimos hacia el teatro de la escuela, para mi suerte aún era temprano, la profesora se paró en medio del escenario y dijo
– sé que muchos se prepararon, que tiene memorizado cada cosa que dirán, pero, acá no necesito eso. Quiero que cada uno me suba al escenario y me interprete una canción, quiero que se apoderen del escenario. ¡Tú!– grito y me señaló – sube al escenario y deléitanos.
Yo simplemente estaba parada en medio de ese gran escenario, mis manos empezaron a sudar muchísimo, no había preparado, pero trataría de hacerlo bien, no sabía que cantar no se venía nada a la mente, las caras de todos me atemorizaban ya que reflejaban desconcierto al ver que no salía ni una sola palabra de mi boca, de pronto vi entrar a Sebastián y fue como si él fuera un remedio para calmar los nervios , me pare erguida en medio del escenario salude y cante, sonará gracioso pero la única canción que me vino a la mente fue de una de las películas de Barbie, ya que a mi vecina le gustaba tanto que lo escuchaba todos los días así que lo memorice y la cante.
“No tengo equilibrio
Creo que caeré
Quisiera el talento
No encajo aquí ya lo sé
La presión me ahoga
Todo sobre mi
Como creí que podría
Yo me debí marchar de aquí
Pero este es mi oportunidad
Y de mi depende triunfar
Y si sigo voy a lograr
(coro)
La cima alcanzar
Desde donde todo puede verse
Y el cielo ya tocar
La cima alcanzar
Todos mis sueños vienen hacia mi
Y me harán alfan volar
La cima alcanzar”
La cima alcanzar...
Todos se quedaron atentos y nadie dijo una sola palabra, la profesora se paró y dijo ¡siguiente!, realmente no podía entender sé que significaba ese silencio perpetuo tal vez lo había hecho tan mal o quizás los deje atónitos por lo bien que hice mi presentación. Termino la audición y salí con Sebastian a comer un helado, no tenía el valor se preguntarle qué tal estuve, me sentía tan triste ni el helado hermoso de payaso me contentaba y agachaba la mirada. Sebastian me miro y me agarro del mentón suavemente para levantar mi mirada y me dijo – no estés triste, lo hiciste bien– yo solo volví a agachar la cabeza y el me abrazo profundamente, no sé qué sentía pero sentía que estaba tan cómoda con él, terminamos con el abrazo y empecé a caminar, el solo se quedó parado y yo le extendí el brazo para que viniese conmigo el sujeto mi mano y me jaló hacia su pecho y nos quedamos mirándonos fijamente a los ojos hasta que me beso, ese era mi primer beso y me quede sin poder decirle nada, mientras el solo me miro, sonrió y acaricio mi cabello como su fuera un cachorrito, no sabíamos que decirnos estuvimos callados hasta que la cabeza de mi helado de payaso se cayó como si hubiese estado sorprendido de lo que había pasado, empezamos a reírnos tanto que me dijo – niña torpe , vamos te compro otro – mientras se reía sin parar yo solo lo mire y sentí como si algo hubiese cambiado en mí.
Llegamos y nos quedamos conversando por un largo tiempo hasta que tuve que entrar nos despedimos con un fuerte abrazo y entre casa. Mi madre me miro y me dijo – porque esa cara de emoción hija, será por la audición o por tu amigo– yo la mire y me hice como un tomate y solo le dije – ay mamá es por la audición – y mi mamá solo se río al ver lo roja que estaba, pero yo solo quería saber si había obtenido algún papel aunque no sea el protagónico quería participar, sentía un cosquilleo en el estómago no sabía si era por la audición o por el beso de Sebastian eso solo lo iba a saber mañana al averiguar aquellos resultados
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Editado: 14.02.2020