(Ángela, Keira y Charlie fueron arrastradas por un portal violeta y negro que las condujo a la misma sala de antes, solo que habían dos puertas, la Roja y la Naranja)
-Charlie: ¿Eh? ¿Dónde estamos?
-Ángela: Este sitio me suena muy familiar, ya habíamos estado aquí antes
-Keira: Si, pero yo recuerdo tres puertas, aquí solo hay dos
-Charlie: Escogimos la Azul, y ahora ya no está. Pues escogemos otra
-Ángela: Eeee un momento, ¿para el carro bonita, no eras tú la que quería salir de aquí?
-Charlie: ¿Ves alguna otra salida por aquí? Porque yo no la veo, solo estas dos
-Keira: Y si no escogemos rápido como antes, nos aplastara
-Ángela: ¿En serio? Otra vez
-Charlie: Léelo tu misma
-Keira: ¡Vamonoooos de aquiiiiii! (Grito cogiendo a sus amigas, cuando el techo empezó a moverse, fue tan rápido que entro en la puerta Naranja, sin que se dieron cuenta)
-Ángela: ¿En qué puerta hemos entrado?
-Charlie: ¿Dónde estamos?
-Keira: Muchas preguntas veo aquí, no soy el "preguntados"
-Charlie: No me extraña que hayan preguntas, mira donde estamos.
(Las chicas alucinaron al llegar a ese sitio, estaban encima de un trozo de tierra volando, habían muchas más tierras y rocas volando, no entendían nada. Ángela al darse media vuelta, vio un trozo de tierra grande que encima llevaba un enorme palacio blanco y dorado)
-Ángela: ¡Mirad chicas! Es un palacio
-Keira: ¿Como sabes la diferencia entre palacio y castillo?
-Ángela: Pues veras, El castillo es una fortaleza militar, un cuartel para alojar tropas y el mando de un ejército de un señor feudal, un rey, un sacro emperador romano o el papa. No fue construido para ser de lujo sino para las tropas en guerras de asedio y controlar una determinada región. Y el Palacio no es una posición fortificada sino la cede de gobierno, se construyen para alojar a la burocracia, a la corte real, a la familia real, imperial o al papa. El palacio está diseñado para ser de lujo y espectacular para una vida cortesana decadente. En un castillo no necesariamente vivía un rey, también Vivian nobles (época feudal), aparte un castillo no en todos los casos, llegaba a ser tan lujoso como un palacio.
-Keira: ¡Aaaah! ¿Y cómo sabes tú, todo eso?
-Ángela: Mi prima, la más mayor, trabaja de profesora de historia, y se lo sabe todo de memoria
-Keira: ¡Aaaah!
-Charlie: ¡Chicas! ¡Mirad ahí!
(Charlie señalo un barco pequeño de plata y oro que volaba y se dirigía hacia ellas, velas blancas y el timón de oro) (Al llegar a la tierra pequeña que estaban ellas, el barco se paro y de él salió un hombre con barba azul noche, y con un agradable gesto comenzó a hablarles)
-Capitán: Buenos días jovencitas, ¿qué os trae por aquí?
-Ángela: Nada en especial la verdad...
-Charlie: Acabamos de llegar, y no sabemos dónde estamos, ¿nos podría ayudar?
-Capitán: Por supuesto, ¡subid a bordo!
(Dijo mientras ponía unas escaleras para que pudieran subir, una vez ahí, partieron rumo hacia la plataforma principal, el palacio dorado)
-Capitán: Bueno me presentare, me llamo Santi, pero todos me llaman Capitán
-Ángela: Porque será...
-Capitán: ¿Como dices?
-Ángela: No nada jejeje
-Capitán: ¿Bueno, y vosotras como os llamáis jovencitas?
-Charlie: Señor Capitán, yo me llamo Charlie, y ellas son mis amigas Keira y Ángela
-Capitán: Bien, bien, encantado de conoceros
-Álvaro: ¡Abuelo! ¿Donde estas? ¡Ya es la hora!
-Capitán: Vaya, mi nieto ya viene con eso
-Charlie: ¿Qué es eso capitán?
-Capitán: Una arma muy peligrosa
-Keira: ¿Un arma peligrosa?
-Capitán: Es muy chunga, tanto que puedes hasta atragantarte
-Keira: ¿Hasta atragantarte?
(El capitán asintió con la cabeza, y Keira se asusto tanto que se escondió detrás de él sin dudarlo, al cabo de unos segundos, vino un chico de pelo rubio, ojos azules brillantes, con la mano derecha en su bolsillo derecho)
-Álvaro: Ah, aquí estas (se acerco a ellos)
-Ángela: Quieto ahí, ¿qué traes en tu bolsillo derecho?
-Álvaro: ¿El qué? ¿Esto? (dijo sacándolo de su bolsillo) solo son pastillas
-Charlie y Ángela: ¡¡¿Pastillas?!!
-Capitán: ¡¡Esa cosa del demonio!! ¡Aléjate de mí!
-Álvaro: Abuelo...
-Charlie: Entonces lo que dijo de las armas...
-Ángela: En realidad eran...
-Charlie y Ángela: ¿¡¡Unas Pastillas!!?
-Capitán: No os dejéis engañar por su aspecto, ¡son venenosas!
-Álvaro: Son las que te tomas siempre cada mañana ¡Cómo van a ser venenosas!
-Charlie: Keira, ya puedes levantarte, no hay peligro, se ve que al capitán le asustan unas pastillas.
-Capitán: No son pastillas normales