CONVIVENCIA

Los chicos por temor a interrumpir lo que sea que estaba sucediendo en ese momento entre Angelina y Melvin, salieron de la casa de manera silencios ay subieron a sus autos para regresar a casa… el trayecto fue en completo silencio ya que cada uno estaba asimilando a su manera todo lo que acaban de escuchar.

Allegar las chicas fueron a su dormitorio y se ducharon por turnos en cuanto ya estaban cómodas con sus pijamas algo reveladoras por lo diminutas (sin llegar a ser vulgar)

-. Emma – Yuli llamó su atención – crees que hoy queda dormir Alonso contigo – Emma tragó saliva sin saber que decir

-. ¿Por qué? – dijo en un hilo de voz

-. Es que deseo convivir con mi pareja – Yuli se sonrojo y Emma no sabía que hacer o decir

- Yo… - Emma caminaba de un lado a otro

-. Eres un sol – Yuli la abrazo y beso su mejilla saliendo rauda de la habitación

“Una noche a solas”

Por favor no es momento

“Te mueres por probar de nuevo esos labios tan suaves, carnosos, deliciosos y dulces”

No es correcto, no estoy lista

“Él es tu destino, no te hará daño”

Después de lo de Sergio, tengo miedo

Emma no estaba segura de salir de su habitación, que haría si se cruzaba con Alonso y él le decía que iba a dormir junto a ella. Sería solo dormir debería tranquilizarse se estaba comportando demasiado miedosa para su gusto… ella misma se recriminaba.

Yuli ya estaba junto a Diego y Alonso no estaba seguro de lo que debía hacer prácticamente lo echaron de la habitación.

Fue a la cocina por un vaso de leche, se sentía ansioso; ella era una mujer bella y el estar solos era una gran oportunidad…

“Soy un maldito vejestorio a su lado”

La experiencia será de ayuda para ambos

“Ella es muy inocente y estoy seguro que es virgen, no creo ser capaz de contenerme si estoy junto a ella”

No creo que nos rechace

-. Tampoco puedes dormir – Emma estaba a su costado ocasionando la aceleración de su corazón

-. Diría más bien que me botaron – recalca

Emma estaba detallándolo ya que tan solo tenía pesto un pantalón demasiado fino, su torso desnudo le permitía observar cada centímetro de su piel… era un maldito adonis, una tentación andante y …

-. Recuerdas que por algún motivo puedo escuchar lo que piensas – Emma se sonrojo y se tapó el rostro con ambas manos

-. Debe haber un modo de evitarlo – trataba de mantener su mete en blanco

-. He escuchado que los licántropos tienen algo parecido podría averiguarlo – ella asintió – permíteme un momento – saco su celular y volvió a ella – me permitirás dormir contigo o si prefieres lo puedo hacer en el sofá

-. Yo… - eso desilusiono a Alonso – te espero arriba – y salió corriendo

Alonso se sintió emocionado, ella no lo rechazaba y él solo quería amarla y protegerla porque estaba completamente seguro que ella era su destino, aunque la luna no la hubiese elegido algo dentro de él le decía que ella era suya y no la perdería por nada del mundo.

Llamó a su padre para que lo guiara porque ahora sabía que en su sangre también corría sangre de lobo. Una vez informado fue a la habitación y tocó la puerta.

-. Pasa – Emma estaba en la cama con las sabanas hasta el cuello

-. Tengo algo de información se sentó en el lado contrario

-. Te escuchó - ella no se movía

-. Al ser un híbrido tengo las habilidades de un lobo – resumió – aunque no sé muy bien si son más profundas que uno normal

-. Vaya y cómo podemos evitarlo – Emma no se sentía cómoda con que él pueda leer su mente a su antojo

-. Es una habilidad antigua y depende de mí – Alonso no quería dejar de escucharla porque así él podía sentirse seguro

-. Hazlo – Emma fue directa – no me parece justo que tú puedas hacerlo y yo no- hizo un puchero

-. Lo intentaré – le sonrió –no prometo nada – una almohada aterrizó en su torso

-. Eres un malvado – él miraba sus ojos y sus labios su entrepierna palpitaba y quería al menos poder volver a probar sus labios

-. Los malvados fueron Yuli y Diego – repuso haciéndose el ofendido – me botaron sin previo aviso

-. Supongo que necesitan estar juntos – Emma sabía que su amiga moría por intimar con Diego era simple al notar la mirada pervertida que dirigía justo debajo de su cintura

-. No quiero que te sientas incomoda – Alonso se acercó un poco y pudo notar que ella temblaba – me tienes miedo – susurraba porque esto no tenía sentido

-. Es simplemente que … - suspiro – nunca he estado a solas con ningún hombre desde que tengo uso de razón – empezó a jugar con sus manos – y tengo un mal concepto de todo ustedes o bueno algo por el estilo

-. Pero sabes que no te haré daño – Alonso llevo su mano a su mejilla – quiero conocerte un poco más

-. ¿Qué deseas saber? – ella aún seguía a la defensiva

-. ¿Por qué te gusta la medicina? – él sabía por su amiga que eso estaba estudiando

-. Siempre me ha encantado ayudar a los demás – una sonrisa sincera llegó hasta sus ojos y él sabía que esto la hacía feliz en realidad

-. ¿Qué edad tienes? – Alonso trago grueso

-. Digamos que tengo algo más de un siglo – respondió mirando a la nada

-. No lo aparentas – le respondió con simpleza

-. Gracias, supongo – ella no reaccionó mal

-. Bien es tu turno – él entendió como es que Ema deseaba llevar esta conversación

-. ¿Terminando tu carrera que planeas hacer? – no sabía si era adecuado preguntar por su origen ya que ella lo ignoraba

-. Quiero viajar y especializarme en pediatría porque adoro a los niños – él podía notar como brillaban sus ojos

-. Es una gran idea – le sonrió él

-. ¿Bebes sangre? – Emma tenía miedo

-. Digamos que desde hace años una bruja descendiente de la luna nos dio unas pastillas que nos hacen capaces de comer la comida y mantiene a raya nuestra sed de sangre – Emma estaba atenta a cada palabra