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Cartas, para un velorio
 

Todos estaban con el encantamento sombrilla. Lucius miró con horror la futura lapida de un día fue su esposa. Narcissa odiaba los entierros y le rogó que no la enterrara, otro método sería mejor, pero la magia no era un juego así que no se podía. Y por ello estaban allí.

»Estamos aquí para decir adiós a una mujer amable y bondadosa con su familia y amigos, estamos aquí para darle un último adiós con sus seres queridos. Narcissa Malfoy hoy deja una familia, un esposo, y dos hijos. Deja un hogar que con tanto amor creo, hoy Narcissa Malfoy hoy nos da la oportunidad de recordad el valor de la...«

La arenga siguió... sin embargo Lucius solo sentía soledad en su corazón y los jalones que su hijo mayor daba a su pantalón.

—¿Papá, por qué están hablando de mamá de esa forma? ¿Por qué no esta aquí?—Lucius miró a su hijo. ¿Cómo contestarle que su madre los dejo? ¿Qué su madre no estaría más con ellos? ¿Cómo decirle a un niño de cinco años que su madre estaba muerta y no podía hacer nada?

—Mamá esta durmiendo, Brax.—susurró Lucius.

Abraxas miró a los hombres que llenaban el hueco que el sabía no estaba ahí ayer, miró como metían una caja grande de color plata y con detalles en bronce que él sabía ahí dormía su madre.

Él sabía que su mamá se despertaría y no le gustaría verse ahí dentro.
Nada.

—¿Pero mamá dormía en esa caja ayer, por qué la están enterrando?

—Mamá ya no va a despertar. Nunca más, Abraxas.

Silencio.

Abraxas miró como era enterrada su madre en total silencio y Lucius creyó que nunca más volvería a ver a su revoltoso hijo. Hasta que el llanto de Draconis llenó el pequeño cementerio familiar atrás de la casa. El niño de casi dos años se despertó y Andromeda ya no podía con él. Lucius lo tomó y se acerco a Brax los tres juntos miraron por ultima vez a la única mujer que ellos le dieron su corazón y amistad.

oOo

Remus miró la lluvia caer, nunca pensó que el fin de una vieja compañera de colegio le dolería tanto, pero es que la noticia de la partida de Lady Malfoy no era algo de esperar, Narcissa Malfoy siempre fuerte, refinada, elegante, hermosa y sobre todo amable, era una Black sinigual , tan parecida a Sirius con sus bromas y peor que el mismo Lucius en venganzas. Narcissa Black fue una mujer que mientras la trato fue justa y compresiva.

—¿No iras?—Remus escuchó la nota acusatoria en la voz de su amigo, pero no era prudente que él, siendo el 'amante' del viudo fuera, no se sentía correcto. Esperaría, ya lo hecho por todos esos años, que son algunos meses .

—No.

—Regulus y Severus ya están listo. Amelia nos espera abajo.—Remus sonrió, Amelia Bones la única que pudo con el conquistador Black, resoplo un poco y le dijo:
— Ve, te esperan—. Vio alejarse a su amigo, por la ventana los vio salir y caminar hasta la entrada de la mansión Black; Severus tomo un traslador y ellos desaparecieron—. Adiós, querida Narcissa.
Remus Lupin miró el cielo, todavía tormentoso y sonrió. Lady Malfoy estaba en un lugar mejor.