★(Sasha)★
Al principio todo estaba tranquilo, llegamos y no me dirigí directo a mi casa, antes quería llegar y hablar con Tom. Luego de tanta charla y risas con mi mejor amigo y Sarah una vieja amiga que se vino a pasarse unas largas vacaciones junto a su familia. Adam se ofreció en llevarme a mi casa y acepté a puros coños.
Todo porque no me quería encontrar con Asdrick, pero al salir del edificio, resulta que el maldito estaba ahí y llamó a Adam.
Les juro que mi cuerpo completito tiembla en este momento. No sé qué rayos es Adam, pero si no es un jodido militar o algo por el estilo me lleva porque tiene a demasiada gente tras de él y ni siquiera se dejan ver.
—¿Tú eres el que anda con mis pertenencias? —Asdrick está sentado en la parte delantera de su auto y su gente a su alrededor.
Esto no da buena espina.
—Asdrick, por favor vete, te dije que ya terminó, no somos nada y no te pertenezco ¿entiendes?
—¿Es él? —vuelve a preguntar ignorando todo lo que dije.
Adam da un paso a delante y se sienta en su moto prestando atención a lo que dice Asdrick.
—Si, soy yo, ¿qué es lo que te pertenece? —le responde Adam bastante relajado y calculador.
¡Le respondió!
—Sarah, es mejor que te vayas, te veo luego ¿vale?
—Está bien, ten cuidado y llámame para lo que sea— dice y cruza la calle.
Aquí pasará algo y no muy bueno.
—Sabes muy bien lo que me pertenece. Tequila...— le habla Asdrick y Adam ríe.
—No le respondas— le digo a Adam pero ya lo provocaron.
—Así que me conoces— dice Adam.
Se miran con pura rivalidad haciéndome invisible pero el centro del jodido tema.
—He investigado— habla Asdrick.
—¿Qué tanto sabes de mí? —Adam le pregunta y es que se le ve que le divierte el puto asunto.
—Lo suficiente— maldito seas Asdrick.
—¿Me pueden escuchar los dos? Esto no es un juego, tú Asdrick tienes problemas mentales, tienes que entender que lo nuestro terminó. Te estás convirtiendo en lo peor de mi vida.
—Mientras esté vivo nada ha terminado— me contesta.
—¡Ahhg, pero me lleva! ¡Déjame vivir por Dios!
—Si, debieras dejar de molestarla.
—¡Que te calles Adam!
—Bueno, entonces vámonos que esto es una mierda— dice Adam montándose en la moto.
Pero al ver que Adam intenta irse, Asdrck saca su pistola y le apunta. Adam suspira y susurra 'Maldita sea' con una enorme intensidad dirigiendo su mano a su pistola.
Me va a dar un yeyo.
—No he terminado contigo— dice Asdrick creyéndose el líder de todo esto.
—No me importa, Sasha, sube— me pide Adam alejando su mano del arma.
—Ella no irá contigo, tienes prohibido acercarte a ella— Asdrick, cierra la boca.
—¿Tú quién eres para prohibirme las cosas? —le pregunta Adam. Pareciera que nada le está molestando.
—No me conoces, no sabes de lo que soy capaz— contesta Asdrick.
—Tú tampoco gilipollas. Venga Sasha que no quiero seguir hablando con éste.
No muy segura camino hasta Adam no contando con que Asdrick le está apuntando, de un momento a otro un disparo me hace saltar en mi propio eje y puedo escuchar como otro mismo disparo resuena en el lugar quedando en eco y al mirar hacia mi lado derecho, puedo ver como Asdrick yace en el suelo.
—Asdrick.
Mi voz sale seca y mi corazón se acelera, Miro a Adam el cual se encuentra serio, con cara de alguien al que le vale una mierda todo y que solo le importa él. Así como cae Asdrick, caen los demás que lo acompañan ya que iban a levantar sus armas.
Joder...
¿Qué se supone que haga?
—Sube Sasha.
No es cierto.
—¡No es cierto! ¡Esto no es cierto!
—Sasha.
—¡¿Qué hiciste?! Está muerto. No pedí que lo hicieras— ni siquiera me quiero acercar a él, tengo miedo de... no.
—¡Sasha que no está muerto!
¿Qué?
—Pero no se mueve, ¡además está sangrando!
Mi respiración.
—¿Sashá? ¿Estás bien? —no puedo respirar, él está sangrando, está muerto.
—Se me corta la respiración, no puedo respirar.
Las lágrimas me nublan la vista y mi pecho me impide la respiración. ¿Qué rayos me pasa? Siento como Adam toma de mí y cae al suelo junto a mí hasta que no puedo seguir escuchando y tampoco ver, solo pensar.
¿Quiénes son estás personas? ¿Y qué hacen en mi vida?
Me siento extraña, yo no soy así aunque sí, soy muy manipuladora, pero ¿dedil? Eso tal vez lo estoy sacando de mi padre. Es fácil de manipular y más por mi madre.
—Hola— es una voz hermosa se escucha lejos, pero clara.
—¿Hola?
¿Estaré soñando?
—Eres hermosa, ¿cómo te llamas? —me pregunta.
—Soy Sasha, ¿y tú?
—No lo sé, aun no me nombran, pero espero que elijan un bonito nombre para mí.
—¿A quién no le nombrarían al nacer?
—Aún no he nacido.
¿Qué?
—Sasha, Sasha ¿puedes oírme?
—¿Tom?
—Si, soy yo, abre los ojos, tus padres están aquí.
¿Mis padres?
Ahora sí, mis ojos se abren y visualizan a Tom quien me mira y me dedica una sonrisa preocupante.
—Sasha— es mi madre.
Me va a matar.
—¿Por qué la llamaste? —le susurro a Tom tratando de disimular, pero es inevitable.
—Aun eres una jovencita, apenas tienes 18 años y vives bajo mi techo.
—Madre, deje de ser tan sangrona.
—¿Soy sangrona? Solo te di unos días aquí y ya tienes casi un mes. También resulta que te fuiste de viaje con un desconocido y recién llegas.
Ahh mierda, ¿quién fue el bocón?
Miro a Tom y él niega al igual que Mack y Luis.
—No fueron ellos, me lo contó una amiga que conozco desde hace tiempo, me dijo que te vio en Bristol con un hombre que sabrá Dios quien es— a ella siempre le cuentan.