Capítulo 8

" NUEVA INFORMACIÓN "

< LEXA >>

—¡Soy un fiasco en esto! —se quejo Addison.

Empezamos desde temprano con los entrenamientos, todos los profesores estaban más exigentes que de costumbre, algunos más que otros.

— Tranquila ya vas a mejorar —le consuelo— Solo hay que practicar.

Estamos en la última clase de la mañana ya pasaban las doce del mediodía todos estábamos exhaustos y con los estómagos rugiendo por algo de comida.

Toda la mañana fue puro entrenamiento físico pelear cuerpo a cuerpo como lo hicimos el primer día pero este definitivamente no fue el día de nadie.

El timbre sonó en el momento justo dándonos alegría a todos quienes salimos corriendo o mejor dicho arrastrando nos por los pasillos hasta llegar al casino.

Allí en la fila me encontré con los demás exceptuando a Addison que seguía con la mala junta de Kala, a veces no entendía que hacía para que Addison volvería con ella, siempre la trataba mal la rebaja solo por manejar un solo elemento y ni siquiera trataba de ayudarla a mejorar y he vistos sus ojos rojos un par de veces, estaba segura que se fuma hierba o algo, temía por Addison.

—¿Donde esta la pequeña? —pregunto Myles al ver qué no estaba conmigo, mí expresión lo dijo todo y el solo se respondió— Ya veo Kala de nuevo.

Asentí antes de tomar una gaseosa para acompañar mis papas y al girarme vi la cara de disgusto del castaño, el rubio solo hizo una mueca antes de ir a sentarnos relativamente lejos de todos cosa que no conseguimos.

—¿Cómo les fue en las demás clases? —indaga Jeff rompiendo el silencio.

— Igual de pesadas que las demás —es todo lo que digo antes de comenta devorar mí almuerzo.

— Al menos compartes la mayoría de clases con alguno de nosotros —rechista Myles— Yo solo comparto una y es con Addison pero se pasa todo el tiempo con Kala.

El silencio vuelve a la mesa y un aire denso se crea mientras yo miro atentamente a Myles que permanece con el ceño fruncido, el único ruido en la mesa es el de mis papás rompiéndose en mí boca.
Comemos en silencio, cada uno en su mundo hasta que Addison llega con un terrible olor.

—No diré absolutamente nada porque respeto tus desiciones —es todo lo que dice Jeff una vez que la chica se sienta en la mesa.

Ella le regala una sonrisa y el solo asiente antes de volver a comer.

Yo tampoco digo nada, ya se lo repetí una y mil veces y siempre estoy cuando viene llorando por algo que le hizo o le dijo.
No me gusta como trata a Addison, no me gusta que ella no se defienda que solo se encoja en su lugar cuando la quieren rebajar, todos aquí somos igual de especiales pero algunos tienen el ego demasiado alto y denigran a los que ven débiles.

Kala entra en ese grupo al igual que los chicos de los que nos habló.

He visto estos días como tres de ellos con unos chicos que son gemelos o mellizos tal vez le hacen bromas a todo el que cruza por su camino, no me gusta para nada lo que hacen, no causa gracia sino da que pensar que sucede con ellos para que hagan esto, humillar y reírse de las desgracias de los demás no es algo normal.

Sacudo mí cabeza para sacar lo que los vi haciendo esta mañana no debo meterme con ellos si no quiero problemas, es lo único que le creí a Kala de todo lo que nos dijo.

—¿Iremos a practicar hoy Lex? —indaga Addison.

— Por supuesto —aseguro, ella me sonríe— No sé hasta qué hora tenemos clase pero seguro para las cuatro vamos.

— Hoy tenemos clases hasta las cinco —informa Myles— Así que tendrán que alargar su mini entrenamiento.

—Hasta donde sabía solo era hasta las cuatro ¿Qué se nos agrego ahora?

— No sabemos —Jeff se encoge de hombros— Solo eso dijo la última profesora con la que tuvimos clase.

— Bien ¿Nos veremos luego, verdad?

— Seguro chicas —dice Myles antes de colocarse su gorra y marcharse junto al rubio dejándonos solas en la mesa.

— Bueno a volver con el sufrimiento —se queja empezando a caminar.

— Ya mejoraremos solo sonríe como siempre lo haces.

Ella toma mí consejo y nos vamos riendo hasta entrar en la clase

...

— Todos se preguntarán porque solo ustedes están teniendo clase siendo que los demás estudiantes ya se fueron —empieza la profesora frente a nosotros— Bien ya les explicaremos por qué.

Hace una pausa y va hacia la puerta donde entra una pareja bastante elegante.

— Buenos tardes queridos alumnos —saluda la mujer con una sonrisa, de inmediato reconozco la voz— Al fin puedo conocerlos despiertos ya que los ví a todos cuando estuvieron en el hospital. Soy la directora del colegio, me llamo Amelia Sian y estoy feliz de poder estar aquí hoy con ustedes, siéntanse como en casa y si tienen alguna duda o incomodidad háganmelo saber —por un momento su mirada se detiene en mí y me sonríe antes de alejar y darle la voz a su esposo.

— Buenas tardes chicas y chicos, soy Pablo Webers su director y compañero de está belleza a mí lado que es su directora —dice pellizcando la mejilla de su esposa—Como dijo mí compañera sean más que bienvenidos, pueden sentirse en casa y en total seguridad, todo el edificio está bien protegido y resguardado de vistas curiosas. Esperamos que puedan estar cómodos en sus instalaciones y con cualquier inconveniente pueden acercarse con total confianza a nuestra oficina y también tienen al grupo guía que está en el primer piso —informa mientras nos va entregando unos papeles— Esto que acabo de darles deben rellenarlo con sus datos personales y todas sus habilidades ya saben si manejan los cuatro elementos o si tienen un poder extra como le decimos, cuando terminen deben entregarlo a alguno del grupo guía y es todo.

— Disculpe —dice levantando la mano una chica, el director le da la palabra—¿Para qué es esto? Ya mis padres cuando me mandaron aquí dieron todos mis datos.