~Tres días mas tarde... Sábado~
- Kookie, hoy te quedas a dormir conmigo,¡¡¡Yupiiiiii!!!!- celebro el rubio saltando de un lado al otro en la oficina del pelinegro.
Jungkook, por otro lado, tenia una sonrisa gigante en el rostro, observando a su lindo novio feliz, vestido con un ancho overol vaquero encima de un suéter blanco y una gorra color crema que acompañaba perfectamente al conjunto. Se veía adorable en pocas palabras.
Estos días, después de haber estado en la casa de Jimin, y haber hablado con Taehyung y Hoseok, había logrado comprender todo, y a pesar de lo sucedido con su amado, estaba feliz de que hubiera logrado superar esa terrible enfermedad y estar con vida y feliz. Porque aunque haya había secuelas, su Jimin seguía siendo el mismo, el ser mas bueno y bello del mundo.
- Sí, mi amor. Hoy me quedo a dormir contigo- le confirmo.
-Podemos hacer pijamada con Tae y Hobi- propuso, acercándose para sentarse encima del regazo del pelinegro, después de haber terminado con su celebración.
- Todo lo que quiera, pequeño- le beso la frente con amor.
-Uyyy, pero si no van a estar, Kookie- recordó haciendo un puchero- Hoy, van a ir a Daegun a ver a la abu de Tae.
-Pues pijamada entre Mochi, tu y yo- le prepuso, a pesar de los nervios que tenia al escuchar que sus amigos no iban a estar.
-Sí, con Mochi y contigo, va a ser genial también- confirmo abrazándose fuerte al pecho del pelinegro.
***
Eran ya las ocho de la tarde y la pareja se estaba dirigiendo hacia la casa del bajito, entre risa y alguno que otro inocente beso en los labios.
Al llegar, cenaron y se pusieron cómodos con sus pijamas de pareja que compraron juntos el día de ayer.
Una vez ya listos se tumbaron encima de la cama de Jimin, ellos solos ya que Mochi estaba dormido en su jaula. Se pusieron a ver un a maratón de Avengers.
De un momento a otro, apareció un escena un tanto sensual, por lo que Jimin no dudo en preguntar al pelinegro, sus curiosidades.
-Kookie- le llamo suavemente, consiguiendo su atención, ya que se encontraba con la cabeza en su pecho- ¿Tu has echo eso que sale en la peli?- pregunto curioso, dejando al pelinegro sin palabras.
-¿C..como?
-¿Que si tu has echo lo que están haciendo en la película, la chica y el chico?- volvió a preguntar, pensando que tal vez el pelinegro no lo había escuchado.
-S..si- susurro con las mejillas sonrojadas.
-¡Sí! ¿Con quien?- pregunto un poco molesto por pensar que el pelinegro haya echo lo que salía en la película con alguien.
- Contigo- dijo esta vez coqueto, sin la intención de contarle que había estado con alguien más.
-¿Conmigo? Pero si yo no me acuerdo- dijo con duda, mirándole fijo a la cara.
-Pues si quieres te hago recordar, pequeño-pregunto con gracia. La cual se fue al escuchar la respuesta.
-Sí, por favor, Kookie. Haz me recordar- dijo con ingenuidad.
-Ya no puedo más Minnie, tu te lo has buscado- dijo con frustración, para luego empujar al rubio encima de la cama y subirse arriba de él.
-¿Que haces, Kookie?- pregunto, llevando sus manos hacia el pecho del pelinegro.
-Te hare recordar, ¿Si tu quieres, claro?- dijo con duda, ya que no pensaba sobrepasarse con el rubio.
-Sí quiero, Kookie- afirmo seguro el rubio.
Al escuchar la afirmación, Jungkook no dudo ni un momento para atacar los pomposos labios de su novio, hasta quedar sin respiración.
-Wow, Kookie, eso..se ha sentido muy bien- jadeo Jimin, intentando recuperar la respiración.
-Pues se va a sentir mejor, mi amor- le dijo para luego seguir besando sus labios.
Después, de haberlos dejado hinchados y húmedos los carnosos labios, bajo su lengua por todo su cuello, lamiendo y chupando cada esquina, quedándose un rato de más, en su pequeña nuez, la cual se encargo de morder y chupar con devoción, mientras lo desnudaba y acariciaba con sus manos. Sacándole fuertes gemidos, capaces de despertar a todo el vecindario.
-Kookieeee, me derritooo- gimió con fuerza el rubio, incapaz de controlar las sensaciones que estaba sintiendo en su cuerpo.
-Aww nene, aun no te derritas porque no hago más que comenzar- dijo para alejarse un poco y desnudarse al igual que el bajito. El cual al ver la enorme cosa que le colgaba entre las piernas al pelinegro, se tapo los ojos por la vergüenza.
-Kookie, veo tu cosita- dijo tímidamente a un tapando sus ojos.
-¿Mi cosita? Amor, no queras decir mi cosota - dijo riendo-Además, bebe. Yo sí que veo tu linda cosita,y tu enorme y precioso culote- dijo para luego seguir besando todo su cuerpo, dedicando especial tiempo a sus carnosos muslos.
Jimin, se encontraba rojo de la vergüenza, pero eso no quitaba las placenteras sensaciones que sentía.
Después, de que Jungkook besara, acariciara y preparara cada esquina del cuerpo de Jimin, se hundió en el interior del pequeño, que gemía sin control, calentando aun más al pelinegro.
Unos minutos más tarde el rubio se corrió, con un gemido afónico, debido a todos los gritos que soltaba por las fuertes embestidas del alto. Unos golpes más y Jungkook acabo en el interior de Jimin, cayendo a su lado, para atraerlo, hacia su pegajoso cuerpo, quedando los dos abrazados y dándose suaves caricias y besos, que demostraban su gran amor.
- Te amo, mi vida- susurro Jungkook en la oreja del rubio, causándole un escalofrió por todo el cuerpo.
- Yo también te amor, Kookie- contesto el rubio, dándole un beso encima del pecho.