"Vaguemos por el nuevo mundo"
Al despertar repentinamente, respirando con dificultad y con mi corazón acelerado, como si se tratara de que me estuviese ahogando o quedando sin aire, me intente levantar pero me sentía muy débil como si apenas la mínima fuerza que hiciese me hiciera caer.
Mire ah mi alrededor no veía por ningún lado la ciudad solo veía enormes arboles por todos lados a los que parecía que no tenían fin, todo rodeado de musgo, lianas y césped tan fresco que con tocarlo se sentía húmedo, contra un árbol vi a Silas con los brazos negros, con sus dedos sangrando y aquellas marcas que tenía en la palma de su mano habían desaparecidos.
Me acerque a el y el solo parecía hipnotizado solo mirando el cielo y respirando muy lentamente, de inmediatamente intente aplicarle primeros auxilios, acostando su cuerpo en aquel húmedo césped, levantando sus pies y colocando su cabeza sobre mi gabardina enrollada como una almohada.
– ¿No es lindo? –Dijo con una voz diferente a la suya, como si fuese un poco mas agudo y lo hizo mirando el cielo– Recuerdo una vez antes de todo esto que fui a acampar con mi familia, nos sentamos alrededor de una fogata y cantamos canciones aquella noche y al amanecer, fui el primero en levantarme y ver como el bosque que nos rodeaba estaba completamente en silencio todo era paz y tranquilidad en ese lugar, Hasta que me ataco esa maldita serpiente al cuello.
Después de decir eso, sus ojos se veían llorosos y con aquella voz quebrada, apretaba sus manos a las que igual continuaban sangrando sobre aquel húmedo césped.
–Lo lamento… Lamento que todo lo que te haya pasado haya sido mi culpa –Dijo a punto de romper en llanto luego Se levanto con una sonrisa como si no hubiese pasado nada, como si su personalidad hubiese cambiado de un momento a otros– Te llevare a un lugar seguro.
Después de eso sus ojos se pusieron en blanco y callo al suelo, igual que un costal de papas.
– ¡Silas! –Dije asustada acercándome a el, levantándolo y revisando que aun respirara.
De pronto, se escuchaba a los lejos inquietantes, como si golpearan pierdas una contra otra, estaba muy asustada y arrastre a Silas buscando un lugar seguro, mirando a los lados viendo si acaso algo nos seguía o nos asechaba, luego sentí como una cuerda rodeaba mi cuello levantándome, luego sentí un enorme cuerpo contra mi espalda, no lograba ver su rostro pero era alguien muy fuerte y de repente de los arboles bajaban personas semidesnudas, con la piel morena y con una cabellera muy larga.
– ¡Suelta-me! –Gritaba pero la cuerda me ahogaba, luego recordé que tenia aun mi pluma en mi bolsillo la saque y apuñale su pierna con ella, pero no lograba poder hacerle nada, era como si un enorme oso me sujetara y me apretara.
Esas cosas arrastraban el cuerpo desmallado de Silas tocándolo con ramas y pateándolo, después aquella cosa me soltó y me tomo de una pierna dejándome de cabeza, y luego de ahí pude notar que esa cosa era una “ella”
Luego aquella chica me tapo la cara con una cubriendo no solo mis ojos si no también mi boca, y luego intento amarrarme, mientras yo solo intentaba liberarme mientras gritaba muy asustada, conseguí golpear lo que yo creo que era su cara con mi pie y salir corriendo, pero apenas quite aquella venda vi como varias de ellas me rodeaban con machetes, lanzas y cuchillos de piedra, lentamente se me acercaban haciéndome retroceder.
–De rodillas y pon las manos en la cabeza –Dijo una de ellas y obedecí a lo que una se me acerco y me ato de manos y piernas.
La mas grande de ellas me llevaba en su hombro y estaba en shock no sabia si gritar o intentar liberarme, luego vi que todas ellas eran un grupo de mujeres, todas me miraban como si fuese algo extraño, aunque admito que me veo diferente a todas ellas, mi piel es mucho mas clara mi cabello mas corto y soy de la altura de un sofá comparada a ellas que parecían de dos metros.
– ¿A dónde me llevan? –Dije firmemente sin déjame intimidar.
–Aldea... –Dijo aquella chica que me cargaba con una voz que parecía mas masculina que femenina– Matriarca decidirá que hacer contigo y con hombre.
– ¿Quién es “Matriarca”? –Pregunte.
–Ser la líder de nosotras, decidir si tu ser comida o hermana, aunque el destino de el hombre ya esta decidido –Dijo aquella enorme chica con un tono de voz serio.
– ¿Ah que te refieres con eso? –Pregunte.
–Chica bocona hacer muchas preguntas… ¡Silencio! –Me grito.
Luego del otro lado se oyeron ruidos como si se acercase algo y todas aquellas mujeres al recibir una señal con la mano de una chica que iba enfrente a la que no podía ver bien pero se veía mas bajita que las demás, luego de entre de los arbustos salieron otras chicas iguales a ella.
–No hacer nada, ser nosotras, grupo C –Unas del lado derecho salieron mas como ellas, algunas con rasgos asiáticos y tres de ella traían arrastrada a una jirafa sin piernas aun sangrando.
–Buenas caza, Matriarca estar contenta –Dijo aquella chica enfrente quien al acercarse a mi me vio directamente a los ojos y pude ver que en toda su cara habían cicatrices que su cabello tapaba.