“Una carta de desamor y un dibujo con amor”
Vacaciones de invierno, después de que tanto alumnos como profesores las ansiaban con tantas ganas por fin llegaron. Tanto era el desinterés de los maestros que incluso las clases en la última semana se volvieron vagas y sin chiste alguno, eran más bien solo para cubrir el tiempo y para que los jefes no descontaran su sueldo.
Durante el tiempo que había pasado me había vuelto a hablar con Ben, no recuerdo el momento preciso en que ocurrió, pero en el año anterior habían aumentado su popularidad saliendo con una chica de último año y este año empezó a salir con una chica de un grado inferior, aunque por razones que desconozco y que claramente no me incumben ellos terminaron hacía un poco más de tres meses. Nosotros llevábamos dos meses volviendo a hablar sin que hubiera un nombre preciso para lo que teníamos, de alguna forma sabíamos nosotros que había algo y el resto a nuestro alrededor también sabía, pero yo aún no me sentía del todo segura de mis sentimientos ya que creía que aún sentía cosas por Caleb a pesar de su evidente falta interés hacia mí y también tenía este asunto con Annie, por quien no sabía lo que estaba sintiendo por ella si es que sentía algo de ese tipo.
—Todavía no entiendo por qué haces eso —comentó Hanna despectiva—, te esfuerzas mucho.
—Es para Ben —respondí sin quitar la mirada del papel—. Él me ha hecho varios dibujos desde que nos conocimos y quiero hacer algo lindo por él.
—Que tontería.
Ignoré el comentario y seguí haciendo trazos con el lápiz.
—Déjala si quiere hacerle un dibujo a Ben —me apoyó Emily.
—Tú no puedes opinar si tu relación es peor —levantó la voz—, tu novio se graduó y aun así sigues con él, ¿y si te engaña?
— ¡Hanna! —Regañé viéndola seria.
—Bien, al menos Emily tiene una relación oficial, pésima, pero oficial a diferencia de ti que es muy…extraña.
Respiré fuerte y detuve mi dibujo para encararla.
—Hanna, basta —espeté agrandando mis ojos—. Si tú no tienes a “alguien” especial, lo siento por ti, pero hay otros que sí y no está bien que digas cosas como esas así que cuando tengas una relación “oficial” como llamas puedes comentar mientras no.
Vi la mandíbula de Hanna endurecerse así que seguro apretó sus dientes molesta por lo que dije, ella no respondió nada y solo se fue allí.
—No creí que dirías todo eso —comentó sorprendida—, lo hiciste bien porque yo en tu lugar ya le hubiera dado un golpe.
Nos reímos al respecto y luego continuamos con lo nuestro, ella leyendo su libro “Hermosa catástrofe” y yo dibujando. Un poco después llegaron Aria y Spencer para acompañarnos.
— ¿Aún no terminas ese dibujo? —Me miró Aria casi irritada.
Aria tenía una opinión similar a la Hanna respecto a esto y como ya no quería discutir de nuevo por lo mismo me limité a negar con la cabeza.
—Pero yo veo que está casi listo —agregó Spencer desconcertada—, ¿por qué dices que no?
—Quiero que quede perfecto, es lo mínimo que puedo hacer por él después de todos los que me ha hecho y…ya sabes, después de ese asunto con Barry.
Recordar el asunto con Barry me hacía sentir mucha vergüenza por algún motivo, pero luego me sentí aún más avergonzada cuando Spencer me vio con ternura como si fuera alguna especie de pequeñita haciendo alguna tontería adorable.
—No, no hagas eso.
—Es que es tierno que quieras hacer esto.
—Entonces, ¿esto quiere decir que en verdad te gusta Ben? —Intervino Emily de pronto— ¿Caleb se fue?
—Ah… —vacilé arrugando mi frente—. No lo sé sinceramente, es que es difícil poder explicarlo.
—Pues intenta, yo quiero saber.
Aria era mucho más impaciente que Emily y Spencer sobre todo cuando se trataba de mi asunto romántico en donde ella y en compañía de Hanna me presionaban para decidir de una vez o me daban su opiniones sobre quien debía gustarme; Spencer era más de oír lo que yo opinaba y de vez en cuando me hacía preguntas para cuando yo necesitaba aclarar mejor todo y cuando me abrumaba ella me daba un abrazo; Emily casi no se metía a menos que yo estuviera a punto de un colapso emocional por no prestar atención a las señales que el destino me daba en la cara, era entonces cuando ella me daba palabras de ánimo junto con regaños y un cálido abrazo seguido de más regaños.
—Bueno… —Me quedé pensando viendo el dibujo—. Ben es un chico tierno, dulce e increíble, podría decir que quizá sea mi alma gemela —mencioné con gracia—, todo marcha bien cuando estoy con él, pero…si aparece Caleb mi mente ya no está con Ben.
“Y que, aunque no esté cerca de Annie no puedo dejar de tener estas ideas raras en mi cabeza a pesar de mis intentos por sacarlas.”
Ojalá hubiera podido decir eso, pero no me atrevía a decir algo de eso en voz alta ni, aunque estuviera yo sola.
Por si al universo no le pareciera suficiente mi tormento mental tuvo que volverlo físico, Annie y Halsey pasaron por nuestros asientos y vieron lo que hacía.
—Hola, princesa —me saludó Annie inclinándose para besar mi mejilla.
—Hola, bonita —contesté en bajo casi como un murmuro.
—Se ve lindo, ¿lo hiciste tú?
Halsey tomó la hoja del dibujo para verlo mejor igual que Annie, yo asentí y repetí lo que había dicho antes sobre no estar listo.
—Pero lo has hecho muy bien, me gusta —elogió Annie sonriéndome.
—Estoy de acuerdo con Annie.
—Si una experta en el dibujo cree eso entonces debe ser un sueño —bromeé viendo a Annie.
Más tarde me encontraba haciendo una carta en la última hora de clase que como todo este tiempo que ha pasado la teníamos libre los viernes.
— ¿Qué haces ahora, Aly? Creí que acabaste el dibujo.
—Ah…una carta.
Spencer entrecerró sus ojos y volteó un poco su cabeza viéndome.
— ¿Para Ben?
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Editado: 17.01.2023