Seguro habían secuestrado a mamá. Ya había una banda por ahí que no tenía muy buena fama.
Pero ellos se dedicaban a robar y no a secuestrar, eran 4 integrantes en aquel grupo por lo que pudieron haber secuestrado a mamá muy fácil.
En ese momento recordé que mama tenía cámaras de seguridad pero no sabía si aún funcionaban. Las había puesto cuándo yo era muy pequeño porque ella siempre iba a trabajar todas las tardes.
Pensé en no ir a la universidad, mejor iría a la compañía de donde eran las cámaras.
Tomé un taxi.
-Lleveme a la Avenida Michigan.
En el transcurso del camino estaba tratando de buscar algo, alguna pista que me dijera donde estaba mamá pero no encontré nada.
-Hemos llegado. Son $54 con ¢20
—dijo el conductor.—
Pagué y fui rápido a la compañía o más bien al lugar donde estaba, porque ahí ya no había nada.
Pasó un señor, supuse que vivía por ahí.
-Disculpe señor, por casualidad no sabrá a donde se fue la compañía que estaba aquí.
-La verdad no se, hace años que demolieron este edificio y no se si se fueron a otro lugar o si ya no existe.
-Bueno, muchas gracias de todos modos.
Y ahora que iba a hacer, como iba a reportar a mamá como secuestrada si ni siquiera sabía si la habían secuestrado.
-Ya sé —dije en voz alta.—
Podría reportarla como desaparecida. Y eso iba a hacer.
La comisaría quedaba a unas cuadras. Caminé hasta llegar:
COMISARÍA:
-Buenas tardes ¿en que podemos servirle?
-Mi mamá... mi mamá esta desaparecida.
Me comenzó a hacer muchas preguntas.
-Muy bien, con esto podremos iniciar la investigación.
-Muchas gracias.
Fui a casa. En el bus me encontré a Parker que regresaba de la universidad.
-Hola.
-Hola.
Me empezó a hablar de la universidad y cosas sobre Max pero yo no le prestaba mucha atención.
-Oye, que te pasa te noto algo raro.
-Mi mamá esta desaparecida, desde ayer no llega a la casa y ya estoy muy preocupado.
-Pero cómo, no puede ser.
-Si, solo dejó una nota donde decía algo bastante ridículo y misterioso.
-Le llamaré a mi mamá para decirle que voy a estar contigo toda la tarde.
-Bien.
Llegamos a casa, iba a tocar a la puerta justo cuándo recordé que no había nadie.
Abrí con mis llaves.
-Haber, en donde está esa carta.
-Aquí.
La leyó mientras yo pensaba en bastantes cosas.
-Pues parece que es real.
-¿Pero si ella no la escribió, entonces quien?
-Buena pregunta.
Tocaron la puerta.
-Venimos a investigar la casa.
Abrí la puerta.
Sin decir nada empezaron a buscar por toda la casa.
-Esta carta les servirá.
La tomaron y la guardaron en una bolsa.
-Muy bien, nos llevaremos esto y cualquier cosa le avisaremos.
-Ok.
Cerraron la puerta y nos dejaron solos.
Platicamos y nos reímos mucho, lo cual hizo olvidarme del tema de mi mamá.
Sonó el celular de Parker.
Era su madre. Empeze a escuchar una pequeña discusión.
-Me tengo que ir —Dijo Parker al colgar la llamada—
-Bueno, gracias por estar acá.
Cerré la puerta. Miré al reloj, eran las 9:30 p.m.
Me serví un plato de cereal.
Me estaba quedando dormido.
Subí a mi recamara.
A LA MAÑANA SIGUIENTE:
Desperté, era temprano para ir a la universidad. No tuve que vestirme, había dormido con la misma ropa.
Bajé a la cocina, tome un vaso de leche y abrí la puerta. Corría el aire, estaba haciendo mucho frío.
Subí el cierre de mi chamarra.
En la parada me encontré con la chica que me había visto por la ventana.
Estábamos solos esperando el bus, había un silencio muy incómodo hasta que ella lo rompió.
-Hola.
-Hola —Dije algo nervioso.—
-Soy Ximena.
-Soy Alex.
-Se que no estas pasando por un buen momento.
-¿Como sabes? —dije como si ya la conociera de hace años.—
-Los rumores corren muy rápido en la colonia.
-Ah... claro.
Paso el autobús. Me senté a su lado.
-Y tú a dónde vas?
-A la universidad.
-Yo trabajo.
-Ah y en dónde.
-En una compañía de cámaras de seguridad.
En cuanto dijo eso se me vinieron muchas preguntas a la cabeza. Trate de tranquilizarme.
-Y en dónde es eso?
-A unas cuadras de la universidad.
-Perfecto entonces tu puedes ayudarme.
Puso una cara de que no entendía nada.
-Mi mamá esta desaparecida,¿ ya sabías no?
-Si
-Mi mamá puso cámaras cuando yo estaba pequeño porque iba a trabajar en las tardes.
-Ok
-Supongo que en esas cámaras se ve algo de lo que le paso a mi mamá. Pero no puedo ver los vídeos porque no encontré la compañía a la que pertenecían.
-Y tu crees que en donde yo trabajo podrían pertenecer las cámaras, ¿no?
-Exacto.
-Muy bien, entonces ¿a que hora vas?
-Por la tarde, como a las 5:00 p.m.
-Ok, ahí te espero.
Me despedí de Ximena y me bajé del bus.
Al entrar a la universidad me encontré con Parker.
-Hola, ¿algo nuevo sobre tu madre?
-No y si. Recuerdas de la chica que te había hablado.
-Nunca me hablaste de alguna chica.
-Cierto, pero ya no hay tiempo para explicarte.
Resulta que la chica, que se llama Ximena por cierto, trabaja en una compañía de cámaras de seguridad.
-Haber bájale un poquito porque no te estoy entendiendo nada.
-Si!... ella trabaja en una compañía de cámaras de seguridad. Ella va poder ayudarme con los vídeos.
-Entonces así podrás ver los vídeos? —preguntó nervioso—
-Es lo que acabo de decir.
Llegamos a la clase de mate.
-Muy bien, siéntense todos. —Dijo la srta. Eleanor—
Me senté a un lado de Parker.
-Hoy iré a la compañía por la tarde.
-Que bien, así tendrás noticias sobre tu madre.
Hicimos un prototipo de examen.
Conteste todo, bueno casi todo...