The other Gilbert

Capítulo 28

No entendía nada. ¿Cómo era posible que yo estuviera en peligro? ¿Quién me estaba buscando? ¿Por qué yo? ¿Qué tenía de especial?

 

-Yo… Tengo tantas preguntas.- ella pareció cambiar el gesto de su cara por una más amable, al ver mi cara de preocupación y desconcierto.

 

-Puedes preguntar todas tus dudas. Intentaré responder a todas y cada una de ellas.

 

-¿Cómo es posible que yo esté en peligro? ¿Quién me está buscando? ¿Por qué yo? ¿Qué tengo de especial?

 

-Alguien muy poderoso os está buscando, bueno ahora a ti;  ya que el ya tiene a tu hermana. Se…- no la deje terminar ya que era imposible mi hermana estaba…. estaba muerta.

 

-Eso es imposible. Mi hermana murió hace unos meses.

 

-Déjame contestar las demás preguntas y luego hablaremos sobre aquella noche. - Yo asentí sin decir palabra, todo esto me estaba desconcertando.- Se hacen llamar los Mikelson. Son una familia de originales, es decir son los primeros vampiros que existieron en la faz de la tierra. 

 

-Oh genial.- dije mientras rodaba los ojos.- Los vampiros más poderosos del mundo están tras mio. Simplemente genial.

 

-Te lo has tomado mejor de lo que esperaba. Bueno como decía, eres especial; más que tu hermana. No eres humana, eres un ser sobrenatural. Eres una Doppelgänger. Los Doppelgängers, también conocidos como sombra-mía o dobles mortales, son un suceso sobrenatural creado por la Naturaleza como resultado de que Silas y Amara se conviertan en verdaderos inmortales después de consumir el elixir de la inmortalidad de Qetsiyah. El propósito de esta especie sobrenatural es mantener el equilibrio natural muriendo en lugar de sus progenitores inmortales. Por esta razón, los doppelgängers han existido durante al menos 1.000 años, durante los cuales han nacido y muerto en el lugar de Silas y Amara, quienes, como verdaderos inmortales, eran invulnerables a cualquier arma convencional. Primero fueron Tatia y Mary, luego las siguieron Katherine y Elizabeth y ahora Elena y tu. 

 

-Es mucho que digerir. dije como pude. De pronto todo mi mundo había cambiado. 

 

-Eso no es todo querida.-dijo ella con un tono de lástima.- Hay algo que te diferencia de tu hermana al igual que a Mary y a Elizabeth de las suyas. Sois Doppelgängers si, pero sois de un tipo especial, sois de keazen ien fan 'e eclipse.

 

-¿Qué?

 

-Es frisio, quiere decir la elegida del eclipse. Se lo que eres pero no se los poderes o cualidades que tiene tu raza. No hay mucha información al respecto. Lo que sí sé es que tu hermana está viva y cuando cualquier vampiro que quiera impresionar a los Mickelson, sepa que estás viva, irán a por ti. Tienes que prepararte. 

 

-¿Comó es posible que ella esté viva?- si cabía la posibilidad de que ella estuviera viva haría lo que fuera.

 

-Tengo un hechizo que puede enseñarte lo que pasó aquella noche; pero es arriesgado. Es tu elección.

 

-Quiero hacerlo.

 

-Esta bien.- Empezó a andar a una parte un poco oculta que había a en unos laterales de la barra; cruzó una cortina y decidí seguirla. Tenía un revoltijo de emociones en mi estómago: miedo, nervios, tristeza, ira y sorpresa. Deseaba con todas mis fuerzas que Lena estuviera viva, la necesitaba tanto. Cuando pase la cortina de un color verde botella me encontré con muchas velas encendidas y en medio una especie de camilla. Carla se dio la vuelta y me dijo:

 

-Túmbate en la camilla y quítate la chaqueta.- Yo aun sorprendida y un poco en shock decidí obedecer sin objetar nada. Una vez tumbada, la camilla no era tan blanda ni tan cómoda como me imaginé que iba a ser. Ella sin decir palabra empezó a buscar en diferentes libros y frascos; los cuales iba poniendo en una mesa auxiliar de metal que tenía junto a mi- Bien voy a proceder con el hechizo, necesito que sepas que es muy peligroso y que es muy probable que algo salga mal.

 

-Lo se, pero necesito saber que paso aquella noche. 

 

-Esta bien. Cuando haga el hechizo vas a notar que una fuerza quiere llevarte a la oscuridad, siguela. Te quedarás dormida y veras desde fuera lo que ocurrió y quienes estaban ahí.- Asentí- Hay una cosa que debes hacer tu sola, en la que yo no podré ayudarte. Una vez hayas visto lo que ocurrió la sombra intenta que te quedes pero tu tienes que despertar. Tienes que decir quien eres tres veces, para poder regresar.- Volví a asentir.- Bien.

 

Segun pronuncio esas palabras, empezó a decir unas palabras raras en un idioma totalmente extraño para mi, a la vez que esparcía a mi alrededor diferentes hierbas y flores secas junto con unos líquidos. Cuando parecia que habia terminado, las llamas de las velas se elevaron aún más; Carla cogió un cuchillo y se hizo un pequeño corte en el dedo. Con la sangre que emanaba de él me hizo una estrella de cinco puntas en la frente y poco después de eso sentí a la sombra llamándome; por lo que me deje llevar. 

 

Desperté en medio de la carretera, en aquella carretera que conocía tan bien y la misma que me quitó casi todo lo que tenía. A lo lejos podía oír el motor de un coche, éramos nosotros, no podía creer que iba a ver como mi familia moría delante de mis propios ojos otra vez. Sentí una extraña presión en mi hombro era la sombra, me indicaba con el dedo hacia un extremo del puente donde se veía una silueta. Era una mujer, no muy alta, vestía unos tacones bastante altos y por lo que mi vista alcanzaba a ver una chaqueta de cuero y unos pantalones bastante apretados. Cada vez el sonido del motor se hacía más notorio en la fría noche de aquel verano. Pocos segundo después vislumbre los focos del coche; tras eso todo pasó en cámara lenta para mi: la silueta de aquella mujer poniéndose frente al coche, mi padre dando un volantazo y nosotros cayendo al río. Todo era tal y como lo recordaba y no había ningún indicio de que mi hermana hubiera sobrevivido. La opresión creció, era la misma que tuve ese dia y el dia del funeral. Caí de rodillas. La poca esperanza que la bruja me había creado se había esfumado al igual que con Damon, por hoy ya había tenido suficientes decepciones. Me levante con todos mis pedazos rotos y me gire hacia la sombra con la intención de decirle lo que la bruja me había dicho pero ella se puso el dedo índice sobre los labios a modo de decirme que estuviera callada y volvió a señalar el lugar por el que nos habíamos precipitado al río. Esta vez había otra silueta que no dudo en lanzarse al río. No entendía nada. ¿Quién era esa persona? No tardó mucho en volver al lugar donde estaba antes de saltar; semejante salto solo podía ser obra de un vampiro. El vampiro misterioso tenía una persona en sus brazos, me acerque con intención de saber quienes eran aquellas personas.  ¿Éramos Stefan y yo? ¿Stefan me había salvado? Eso explicaba como yo apareci en el puente y no en el coche, muerta como el resto de mi familia. No daba crédito, Stefan fue mi salvador desde el principio. Volvi en mi al ver como él se alejaba de mi cuerpo desmayado e indefenso. Tras eso en un parpadeo él ya se había ido pero otra persona vino. Salto al río como lo había hecho Stefan y sacó a Lena de ahí. Antes de que se fuera solo pude ver unos ojos marrones; los mismo que había visto cuando tuve el accidente hace unas horas.  Elena estaba viva, mi hermana, mi mejor amiga, mi confidente estaba viva y tenía que buscarla. 




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