Son
Último campamento
Miro al techo, no puedo dormir. Tan solo me queda una semana para terminar el campamento. Todos están durmiendo, voy a salir a tomar el aire y a ver si me entra el sueño.
Salgo para fuera, está Sophia sentada en una de las hamacas mirando al techo.
—¿Cuántas estrellas crees que hay en el cielo? —le pregunto para romper el hielo. Llevo bastante tiempo queriendo tener un momento a solas con Sophia y hasta ahora no había encontrado el momento.
Me tiemblan las manos, estoy apunto de que me de un infarto, toda mi vida he sido incapaz de tener una relación normal con nadie y no llego a entender cómo he sido capaz de dirigirle la palabra. Seguro que despues cuando lo piense friamente me dara la verguenza o pensare en lo tonto que he sido en hacer esto.
—¿Cuántas crees? —no me esperaba que me respondiese o al menos no así.
—Exactamente no lo sé, pero falta una —llevo bastantes años enamorado de Sophia y en mis noches de soledad me he imaginado mil y un momentos con distintas conversaciones y ahora soy capaz de dar respuesta a prácticamente cualquier pregunta.
—¿Cual?¿algún familiar? —creo que no lo ha llegado a pillar.
—No, tu eres la estrella que más brilla en la constelación, te imagino todas las noches en el cielo, al menos en mi cabeza existes así.
—¿Pero que dices Son? —se ha quedado en shock, me lo imaginaba. En todas las realidades paralelas seguro que haría lo mismo. Una chica tan guapa no se fijaría nunca en un friki como yo.
—Nada, es una tontería. Buenas noches…
¿Pero que estoy haciendo? ¿enserio me voy a ir y la voy a dejar con la duda? ¿y si es el error de mi vida? eso nunca lo sabré porque mientras lo pienso inconscientemente voy andando a mi habitación.
No he tenido el valor de mirar para detrás, y dudo que lo haga en los próximos segundos.
Me quedaré siempre con la duda de ello…