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MARATON 2/3

MIN HO

Cuando termino de contarle a Young sobre Katherine puedo mirar que sus ojos están cristalizados y me preocupo.

Una sonrisa aparece en su rostro– Hermanito es la primera vez que te sucede esto no?– pregunta con una sonrisa en el rostro.

Solo asiento, ahora siento que está loca.

–Okay MinMin te ayudaré a conseguir ese vestido, tu no te preocupes que haré que esa linda pelirroja se vea más hermosa que nunca!– exclama levantándose de la Mesa y poniendo con fuerza sus manos sobre la mesa. 

Miro a los lados y todos nos miran, así son las cosas cuando salgo con mi hermana.

Cuando salimos del restaurante acompaño a mi hermana a si coche mientras solo escucho como parlotea sin parar sobre el vestido y como se verá de deslumbrante mi secretaria. Cuando llegamos a su coche se detiene y me mira aún con la misma sonrisa que tenía en el restaurante.

–Usaras moño cierto?– pregunta

–Si– menciono mirándola raro aún.

–De acuerdo–menciona suspirando con una sonrisa– mañana mismo le daré las cosas al señor Lee para que se las entregué a tu secretaria.

Sin más sube al auto, y su chófer se despide para subir e irse.

Después de perder de vista el auto negro, procedo a hacer lo mismo, irme a casa.

Cuando llegó a casa espero a que el portón se abra para poder entrar con el coche, pero un golpe en mi ventana me hace voltear y mirar a mi vecino.

Mark Andrews 

Bajo el vidrio del auto para saber que es lo que quiere.

–Mark

–Que tal Min?– dice sonriendo

–Normal llegó de la editorial, tu?

Cuando pregunto se forma una sonrisa en su rostro y sus ojos brillan– acaso hay una linterna apuntando a sus ojos– miro a ambos lados para ver y nada.

–Voy a casa, vengo del super market y también de toparme con una chica- ladea una sonrisa tímida

–Ya veo... Te veré mañana en la cena Mark?

–Efectivamente Min, bueno nos vemos– dice despidiéndose con la mano y caminando hacia su hogar 

Después de esa extraña charla entro y cierro el portón con el control remoto. Camino hacia casa y al llegar una pequeña bola de pelos se me acerca corriendo.

 Haneul es una perrita pomeriana mini blanca que adopte por una enfermedad cardíaca, el lugar donde la adopte ya no podía hacerse cargo de los gastos y decidí adoptarla.

La tomo en mis brazos mientras acaricio su pequeña cabecita y me siento en el largo sofá que adorna la gran sala. A los minutos aparece Graciela la ama de llaves.

–MinMin buenas noches– sonríe– estaba buscando a la pequeña para darle el medicamento– dice despreocupada al ver qué está conmigo.

–No se preocupe que ya lo hago yo– le devuelvo la sonrisa– Vamos que puede ir a descansar ya.

–Esta bien, la cena está caliente en la cocina–dice– si tienes hambre puedes cenar– camina hacia mi y me da un abrazo antes de irse con una sonrisa a su habitación.

Graciela tiene ya un tiempo trabajando de ama de llaves en mi casa, cuando suelo irme de país por trabajo y tengo que pasar bastante tiempo suelo llevarla conmigo. Es una anciana bastante amable, nunca tuvo hijos y es por eso que me trata como si fuera uno para ella.

Sigo acariciando a la pequeña bola de pelos cuando suena mi celular y es un mensaje de mi hermana.

Young:

Oye mocoso, pude encontrar el vestido perfecto ya.

11:30 pm.

Yo:

Tan rápido?

11:31 PM.

Young:

Estoy 100% segura que tu secretaria se mira bien en todo.

11:31 PM.

O me equivocó?

11:32 PM.

Inevitablemente pienso en ella, y está en lo correcto, en los meses que tengo aquí, la eh observado y cada atuendo que eh visto en ella le queda perfectamente bien.

Yo:

Querida hermana, estás en lo correcto.

11:33 PM.

Espero que hayas hecho una buena elección por qué quiero que ella se mire Impecable.

11:33 PM.

Young:

Claroooo, Impecable lol, no querrás decir hermosa? Preciosa? 

11:34 PM.

Descansa hermanito que mañana quedarás muuuy impresionado.

11:35 PM.

Apagó la pantalla de mi celular para mirar a la pequeña Haneul mirándome con la cabeza de lado, preguntándose el por qué de mi sonrisa tonta.

–Pequeña Haneul, creo que me gusta alguien– le digo sonriendo a la bola de pelos que comienza mover la cola.

La tomo en brazos para llevarla a la habitación para darle su medicamento y poder descansar, mañana será un largo día.