Parte 1

Erika

Mi vida cambio de un momento a otro, el mismo día que cumplí los 18 años. Yo era una muchacha común y corriente, con una vida tranquila y monótona que solo vivía con su madre y su hermana. Pero de pronto ellos cambiaron mi vida sin darme opción alguna de negarme o huir. Ellos son los culpables de mostrarme el infierno sin piedad, la crueldad y enseñarme que la traición viene de las personas que menos esperas, pero sobretodo la desconfianza con todo aquel se me acerque. Mataron mi inocencia, desgarrón mi alma y mi corazón en mil pedazos lo destrozaron. Hoy soy totalmente diferente, no hay ni una pisca de aquella que solía ser. Pero comencemos por el principio….

Hace un año atrás el día de mi cumpleaños N° 18

Erika

Me encontraba en mi plácido sueño, cuando de pronto sentí algo enorme encima mío, Cuando abrí los ojos sobresaltada, tratando de enfocar pude visualizar a mi hermana sobre mi riéndose. La empujó a mi lado despacito le saco el dedo del medio.

Erika: - Alejandra, creo que me has fracturado medio cuerpo !auch¡- (me hago la dramática y bromeó) -

Alejandra: que dramática que eres, no peso tanto para fracturarte los huesos - (se hace la ofendida)

Erika: -¿Qué hora es?)-

Alejandra: -pues mi querida bella durmiente son exactamente las 11:00 de la mañana, mamá te ha estado llamando hace un buen rato pero tú no despertabas, por lo que tuve que recurrir a lanzarme encima tuyo-

Mi hermana lo dice como si tuviera 5 años y que ha hecho una pequeña travesura, sabiendo que lo ha hecho a propósito.

Erika: -¿Alejandra, acaso crees que tienes 5 años para levantarme de esa manera?- (pregunta en forma de regañó)

Alejandra :(se encoge de hombros)

Suspiro por un momento, hasta que de forma rápida agarro mi almohada y le comienzo a dar golpes suaves por todo su cuerpo, ella no se queda atrás y también hace lo mismo, soltamos las almohadas y comenzamos a jugar de manos tratando de hacer una llave o inmovilizar a la otra, pero yo soy más rápida y con mis piernas en su cintura la tengo encima mío, lucha por qué no le inmovilice sus brazos. Hasta aquí la puerta es abierta por mamá.

Mamá: -niñas ¿Que les he dicho de no jugar de manos?, después se quejan que les duele el brazo, la pierna o algo-  ( dice con suavidad)

Erika: -ma, Alejandra me ha despertado tumbando sobre mí, yo solo me he defendido -

Alejandra: - mamá, solo la quise despertar de una manera inusual, solo eso- (se victimisa)

Mamá:  (niega con la cabeza y se acerca a la cama) -traviesas,  ya pueden soltarse que a alguna le va dar un calambre -

Alejandra y yo nos soltamos de nuestra exorcista posición, y nos sentamos más cerca de mamá, la abrazamos las dos con todo lo que podemos. Y ella nos corresponde el abrazo con mucho amor y cariño.

Mamá: - alístense y bajen a desayunar, tienen 20 minutos - (demanda) -no me hagan subir para bajarlas, ¿Entendido? -

Alejandra y Erika: (responden al mismo tiempo) -Si mamá -

Alejandra y yo nos levantamos, ella sale de mi cuarto y se dirige al suyo, mientras que yo me dirijo hacia mi baño, allí hago mis necesidades y me aseo aproximadamente unos 10 minutos. Mi pijama la he colocado en el tacho de ropa sucia que quizás más tarde lo lave, salgo del baño y me encuentro a mi hermana ya lista con un pantalón militar y un top negro, su cabello negro y largo en una coleta alta y levemente maquillada. Mi hermana es preciosa tiene un buen cuerpo porque se ejercita, su piel es de color canela, unos ojos bellísimos  de color verde, unos labios finos y sus expresiones son suaves. Me encamino hacia mi cómoda mostrándole una sonrisa y pensando <<  ¿cómo diablos siempre se alista de manera rápida y para colmo luciendo perfecta?>> Ella me muestra una sonrisa por el espejo a cual ya sé por dónde va.

Erika: -ni pienses que dejaré que me vistas, no, no no...-(me niego completamente)

Alejandra: - vamos hermana, te pondré preciosa, ¿Siiii?-

Erika: -no,no,no tu siempre elijes ropa demasiado pegada y sabes que no me gusta-

Alejandra: ya sabía que me ibas a decir eso, por lo que voy a traerte una ropa que  no es ajustada y de antemano es de tu estilo- (aplaude como niña pequeña)

Erika: - mmm...¿en dónde esta?-

Alejandra: - en mi cuarto, ahorita te lo traigo -( lo dice con una sonrisa)

Alejandra ha salido de mi habitación, a traer la supuesta ropa; observo mi reflejo en el espejo, soy un completo desastre, tengo ojeras por la mala noche que he pasado, no es nada nuevo desde que soy pequeña he tenido problemas para dormir por lo cual los médicos decían que tenía insomnio y que debía tomar medicamentos para poder descansar, sin embargo esos medicamentos con el tiempo dejaron de ser tan efectivos en mí, he probado medicamentosas fuertes y hasta algunos caseros pero ninguno funcionó, por lo que en las noches suelo permanecer despierta hasta que de una u otra manera duermo, en algunas ocasiones me acompaña mamá o Alejandra hasta dormirme. El color de mi piel es igual que Alejandra, mis ojos a cambio son de color negro como la noche, mi cabello es castaño como el de mi madre, apresar de no hacer ejercicio mi cuerpo es delgado, aunque si sigo comiendo tanto chocolate alguno que otro rollito comenzara a aparecer, por lo cual a veces salgo a caminar. Mis expresiones faciales son suaves y mis labios son un poco más gruesos que Alejandra.

Escucho la puerta se abierta y veo a Alejandra ingresando con una caja, la observo con curiosidad. Ella lleva una sonrisa de ¿orgullo?, Coloca la caja en mi cama y veo que saca ¡Oh dios mío!  El pantalón que me encantó hace unos meses es un jogger blanco con un estampado de fuego en la parte de abajo que es hasta casi las rodillas, lo coloca en la cama y de la misma caja saca un polo ancho de color negro el cual me encanta y un estampado de mis artistas (Canserbero, Eminem, Snoop, Tupac y entre otros, con una frase “Viva El Rap Real”) me dirijo hacia ella y aprecio las prendas más de cerca…