Todo por el maldito contrato (ae #1)

23

 

23: Plan infalible.

 

Narrador omnisciente:


- ¿Que acabas de decir? —. Preguntó Adam mientras se limpiaba los restos de agua.

Joshua lo miró sin entender: - Quiero tener una cita con Marianne.

- ¿Por que Marianne? —. Preguntó el castaño aún más confuso.

- Por que quiero.

- ¿Estamos hablando de la misma Marianne? ¿Marianne Brown? ¿Tu futura esposa? ¿Tu secretaria? ¿La chica que ha visto desfilar mujeres por tu oficina? ¿Esa misma Marianne?

Joshua se empezó a enfurecer: - ¡Que si, joder! ¿Por que no podría hacerlo?

- Solo se me hace extraño, bueno no tanto por que hace tiempo tenías una afición a tu secretaría —. Argumentó Adam .— Pero pensé que solo era eso, ya que poco tiempo después me dijiste que solo la veías como una amiga que te gustaba fastidiar.

Joshua la miró sorprendido: - ¿Yo te dije todo eso?.

Adam levanto la mirada y le lanzó una sonrisa sarcástica: - Claro, pero después de unos tragos de más.

- Eres un maldito Smith.

- ¿Por algo soy tu mejor amigo no? —. Se burló Adam.

Joshua seguía refunfuñando.

- ¿Y a donde piensas llevarla? Claro, si es que acepta —. Preguntó Adam mientras volvía a tomar un trago de su botella de agua.

Claro que iba a aceptar, Joshua tenía un plan infalible.

Joshua decidió cambiar el rumbo de la conversación preguntándole a su amigo lo que tanto lo había estado fastidiando desde la llegada de Amber:

- ¿Que hay entre tú y Amber? —. Pregunta directa a la yugular de Adam.

Adam volvió a escupir toda el agua que se encontraba en su boca en la cara de su amigo.

- ¡No jodas Adam! ¡Eso es asqueroso! ¡La primera la deje pasar! ¡Pero esta ya no! ¡Me debes un favor!

***

Al día siguiente:

8:00 AM

- Y pues eso es lo que vamos a hacer —. Sentenció Joshua.

Marianne lo miró confundida.

- Dejame ver si te entendí, quieres decir que después de mucho tiempo ¿A ti recién se te ha ocurrido la idea de formalizar nuestro compromiso ante la prensa?

Joshua asintió.

- ¿Por que recién ahora? ¿Que motivo tienes? Si no lo hiciste cuando sucedió lo de Connor ¿Por que ahora? —. Preguntó Marianne inquisitiva.

Joshua apretó los puños al recordar la escena con el amigo de la rubia, pero ella tenía razón... Él no había pensado que ella preguntaría tantas cosas.

Pero seamos sinceros ¿Cuando Marianne no da problemas?

- Por que... La boda se acerca y no hemos confirmado nada, aunque mi madre ya le halla dicho a todo el mundo, nosotros no hemos afirmado nada —. Joshua se sorprendió de que su capacidad de mentir fuera tan superior.

- ¿Estas seguro? —. Marianne no le creía ninguna palabra que había dicho su futuro esposo.

Joshua asintió.

- ¿Segurisimo?

Joshua volvió a asentir.

- ¿Muy seguro?¿No hay otro motivo?

- Completamente. Y estaba pensando que... Después de eso... Podríamos, no se, ir a comer algo o salir por ahí...

¡Eureka! ¡He ahí la razón de todo este teatro! —. Pensó Marianne.

Justo cuando Marianne lo iba a acusar, un castaño muy despistado mirando su celular entró en la oficina sin llamar.

- Joshua, ya conseguí la entrevista que me pediste, no fue nada fácil hablar con esa mujer, pero después de que le dijera tu nombre y lo que vas ha decir, aceptó—. Sentenció Adam aún con la mirada fija en el celular.

- ¿Entrevista? ¿Cuál entrevista, Joshua?  —. Pregunto la rubia mirando amenazadora a su prometido.

Adam alzó la cabeza rápidamente al escuchar la voz de la rubia, volteó a ver a su amigo y este lo miraba como diciendo "Estas muerto".

- ¿Ups? —. Añadió Adam rascándose la nuca cómicamente.

- ¿De que entrevista hablan? —. Volvió a preguntar la sofocada Marianne.

Adam miró a la rubia y con toda la "inocencia" del mundo dijo: - Yo te explicó hermosa, verás Joshua quería que tú ten...

- Adam Taylor Smith ¿Puede hacernos el honor de largarse de mi oficina? —. Joshua interrumpió a su amigo antes que dijera otra de sus barrabasadas.

Adam refunfuñando porque lo había llamado por su segundo nombre, se retiró de la oficina sin despedirse.

Joshua dirigió su mirada a su prometida que se encontraba con los brazos cruzados y tamborileando su pie en el suelo.

Maldito Smith —. Pensó Joshua.

- ¿De que entrevista hablan, Joshua Ismael O'Donell Clark? —. Preguntó Marianne recordando la vez en la que escucho a la señora Margareth, su madre, llamarlo así.

Joshua maldijo en silencio al escuchar su segundo nombre.




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