IV
¨Las mentiras salen a la luz¨
ADVERTENCIA
Este capítulo contiene escenas explicitas, autolesiones y problemas mentales.
Sam
--¡No!—La escuche gritar--¡Definitivamente ese libro no queda bien ahí!
Me asome desde la puerta del baño viéndola luchar con sus libros.
--Princesa..—Dije un poco asustado ante su reacción.
--¡¿Qué quieres?!—Me sobresalte ante su tono desesperado.
--Te iba a preguntar si quieres ayuda..—hable en un susurro.
Se dio vuelta mirándome un poco arrepentida.
--Lo siento, no quería hablarte así—Dice cerrando sus ojos—Todo esto me tiene un poco estresada.
Me acerqué hacia ella y tomé sus mejillas.
--No tienes que disculparte princesa—Empecé—sé que todo esto es nuevo para ti y sé que también tienes miedo, pero yo voy a estar para ti sin importar que pase, te lo prometo—Termino de hablar para seguido darle un pequeño beso en sus labios.
No dura más que unos segundos, pero eso es suficiente para ese pequeño gesto la haga sentirse en casa, al igual que a mí.
*
Luego de ese momento la obligué a recostarse un momento para que después siguiera ordenando. A veces se exige mucho sin darse cuenta, pero yo estoy aquí para ella.
--¿Quieres ver una película?—Sonreí al escucharla hablar.
--Obviamente señorita Evelyn, como cree que no voy a ver una película con usted—Digo con un tanto de indignación.
--¡Okeyy señor exagerado!—Dice entremedio de risas.
--Bien, vamos a buscar que película vemos.
Tomé mi computadora y comencé a buscar en google algo que me llamé la atención.
--Uuu esa se ve buena—Dice Evelyn apuntando a la pantalla.
--"Believe me"—Digo en un susurro mientras leo la descripción.
--Okey, me gusta.
Me acomodo junto a Evelyn y nos arropamos en una manta dando por iniciada la película.
Luego de estar 1 hora y media viendo la pantalla de mi computador le pongo pausa un poco sobresaltado.
Giro en dirección a Evelyn quien está todavía pegada a la pantalla. No pensé que iba a ser tan fuerte.
--Voy al baño..—Dice un tanto nerviosa.
--Evelyn..--Digo su nombre con la esperanza de que salga de su mente un momento.
--No pasa nada Sammy, solo voy a ir al baño--Habla para luego irse casi corriendo al baño.
Evelyn
Dios santo, creo que voy a explotar.
Los recuerdos de aquella noche no quieren dejar de aparecer.
"Eres sucia y te mereces esto"
"No le cuentes a nadie, okey?"
"Esto queda entre nosotros"
"Cállate y se una buena niña"
Trato de callar mis sollozos y pensamientos. Mi ansiedad crece cuando empiezo a abrir los cajones buscando lo que tanto quiero.
Revuelvo todo lo que había ordenado y..
Bingo
Lo tengo.
Miro unos segundos el objeto pensando si en verdad me lo merezco.
Es obvio que te lo mereces.
Si no lo haces, el va a ganar.
Vamos hazlo.
Escucho a la voz de mi cabeza y paso la cuchilla por la piel de mi brazo, el dolor ya no es tanto. Estoy acostumbrada, pero me alivia sentir esa sensación de castigo cuando lo merezco.
Cuando ya hice mi trabajo, limpio todo tratando de no dejar huellas y me pongo unas curitas tratando de que los cortes no se vean.
Me lavo de nuevo la cara para ocultar mis ojos rojos y salgo del baño.
Camino hacia la sala y lo veo.. tranquilo cocinando algo, por el olor a tomate puedo pensar que es pasta.
--Huele delicioso..—Hablo después de un rato sin que el me haya visto.
Me mira con un brillo en sus ojos preguntándome indirectamente si estoy bien, como respuesta le doy una ligera sonrisa nerviosa tratando de que no se dé cuenta de que algo ha pasado.
Deja lo que estaba haciendo, ahora un tanto más serio. Baja la mirada a mis brazos donde no pude resistirme a bajar las mangas de mi sudadera, él ya lo sabía.
Empiezo a sentir una presión en mi pecho cuando camina hacia donde estoy y sube la mirada a mis ojos examinándome.
Mierda, sé que lo sabe.
--Evelyn..—Empieza a hablar, no puedo hacer nada más que un pequeño asentimiento para que sepa que lo escucho.
--¿Lo volviste a hacer?—Y ahí está, la pregunta a la que tanto temía.
Bajo la mirada para dar un leve asentimiento sintiendo ese característico dolor en el pecho.
--Joder..—Lo escucho sintiendo su preocupación.
Se que está mal, pero no puedo evitarlo.
--Lo siento..—Hablo con la vos cortada por el miedo.
--No te disculpes cariño. Por más que lo ocultes se que has hecho esta y mil cosas más, como por ejemplo dejar de tomar tus pastillas—Mierda—Evelyn, te conozco y se que hace meses no te has tomado ninguna pastilla que te haya recetado tu psiquíatra, que por lo que veo ni siquiera has asistido a tus sesiones.
Siento como mis ojos se empañan, sin poder aguantar más dejo que las lágrimas salgan.
--¡Lo siento, en verdad traté de seguir todo como me lo habían dicho!—Subí mi mirada a sus ojos viendo como tenían un brillo de decepción y preocupación.
--¡En verdad lo siento! no pude más y yo..—Trato de decir algo más, pero sus brazos me lo impiden.
Empiezo a sollozar sin ningún pudor, este tipo de cosas me afectan mucho y Sammy es el único con el que no puedo ocultarlo y puedo expresarme como soy.