La apologetica de la miseria.
Nietzsche en Ecce Homo dice que él dejo de leer para poder encontrar su yo interno y sobre todo para dejarlo hablar, pero me atrevo a decir que él fundó una doctrina basada en los actos sin interes por lo tanto yo no traigo flores y rosas, en su lugar les traigo cardos. Muchos se preguntaran, ¿y esté charlatan quién se creé, como va a contribuir con lo ya expresado por el filósofo por excelencia?, pues símplemente no he necesitado de dejar de leer para poder hablar tal cual siempre he sido, he ahí mi legado, un legado que viene no como martillo a destruir la roca que él destruyó en una sociedad atea, si no como una máquina que taladra el muro que nació tiempo despues en la mente de los hombres. Ese soy yo, el taladro que abre los caminos de la verdad, y la fuerza que me impulsa a decir la verdad no es otra mas la que por naturaleza nace en los hombres sin sentimientos y sin motivos de existencia, de igual modo me impulsa a hablar la gracia de Dios de los cielos, si al llegar a esto creen que diré como muchos cosas que llenen de alegría, están muy equivocados y mas les valdría dejar de leer si es que aún no estan preparados para dichas verdades.
La verdad como principio fundamental de la vida es ese cardo que les regalaré, aún cuando falte lo necesario para entender mas, lo hasta ahora entendido basta para comprender cada cosa que les diga y dejaran de verse como a un dios, ahora no habrá tal aberración conocida como libres pensadores, ahora solo serán los humanos, verdaderos humanos definidos por lo que la naturaleza les brinda como características primarias para el desarrollo de la vida.
Partirá mi discurso con lo conocido como sensualidad, pues en ella recae la naturaleza del hombre, he escuchado a muchos decir que la sensualidad solo proviene de lo erótico y es aquí donde se equivoca la gran mayoría, puesto que lo sensual nace de todo aquello que produce en el humano un deleite, cuando esto se ve alterado por factores ambiguos y recae en el daño a terceros, deja de ser sensual y pasa a ser un trastorno. Lo anterior mencionado se puede entender de la siguiente manera; puede un hombre o mujer, encontrar sensual en una dama o un caballero la manera en que dicha persona use el cabello, muchas veces esos detalles estéticos dan que desear, por otra parte, hay personas que les parece sensual la manera de pensar de una persona y esto es lo que los mueve para estar con ese tipo de personas (esto mejor conocido como atracción platónica), deja de ser sensual todo aquello que apunte de diferente manera a lo natural que viene grabado en cada parte de nuestro ser. Quiero hablar ahora de la mera sensualidad natural y sublime del humano, partiendo de que no solo es todo aquello que es erótico, se puede afirmar que en muchas circunstancias la sensualidad erótica es la mas natural y sublime, pero cuando esta nace sin ser forzada, es menester explicar esto mas a detalle.
Esta sensualidad erótica natural es creada a partir del cuerpo, cuando existe una por así llamarla "Química" el ser como tal pretende atraer al sujeto en cuestión y actúa junto con el cuerpo creando una atmósfera que sea calida al individuo, pues si dicha atmosfera resulta agradable hay la posibilidad de llegar a mejor término, esto lo podemos explicar con la analogía del cazador.
El cazador prepara las trampas y cebos para atraer a la presa, así mismo la presa no sabé a que ha quedado expuesta pues se ve encantada con las trampas del cazador, que le mueven a él y que son su perdición. No olvidemos que esto se dará también en sentido contrario y ambos serán cazador-presa y así como atrape a su presa, será atrapado.
Como punto extra puedo añadir que en grandes ocasiones la sensualidad nace a partir de gestos que sin darnos cuenta hacemos de manera inconsiente, así nace tal sensualidad y queda así una pequeña conclusión, es natural en el ser y cuando se es forzada esta se vuelve contra el propio ser y le perjudica.