Tres Dioses, un corazón

Prologo

Hace siglos atrás el Dios Apolo se enamoro de una mujer, ella era hermosa su belleza podía ser comparada con la misma afrodita, su piel era suave y blanca, su cabello era castaño como un chocolate claro y dulce, sus ojos eran como el cielo de un azul claro y delicado, sus labios como las fresas dulces, ella era perfecta, ella era lo que él estaba buscando hace siglos. Él querría que fuera suya, pero el no era el único que deseaba a esa belleza, también el dios Hermes se había fijado en ella por su belleza, al igual que el dios Ares, el sabio que en una guerra donde ella fuera la recompensa él participaría en ella.

Los dioses hicieron de todo para enamorarla, el dios Apolo le escribía poemas y canciones, el dios Hermes le enviaba todo tipo de regalos joyas, flores, el dios Ares le regalaba pinturas, joyas, vestidos todo lo que en la guerra se llevaban las soldadas. Ella no sabía que eran dioses, pensó que solo eran hombres enviados por su padre para que ella se casara con alguno de ellos, debido a que su familia nunca acepta que ella fuera soltera, bueno, aunque ella solo tenia.

Cuando ella averiguó la verdad y esa era que ellos eran Dioses se sintió algo alagada, pero a la vez sorprendida, porqué ella nunca tuvo el más mínimo interés en los hombres y ella se había enamorado de Asterio, que era en realidad el Dios Apolo ella no lo podía creer por fin había encontrado al hombre ideal para ella o mejor dicho Dios, aunque ella estaba feliz tenia miedo de lo que pasaría si estaban juntos, pasaron meses y la feliz pareja gozaba de alegría, aunque los dioses Ares y Hermes no se rendían y seguían enviándole regalos, lo que hacia que Apolo se enfureciera con ellos, pero no le importaba, solo le importaba que estaba junto a Anastasia y eso era todo, pero una hija de Afrodita y Hefesto temía por ella, debido a que ella era su amiga, decidió hablar con su madre y esta le recomendó que fuera con el Oráculo, ella siguió sus ordenes y fue con él y este le dijo.


 Una lucha llegará al olimpo, el olimpo podría ser destruido en su totalidad, pero podría ser detenido, solo cuando un hijo de Zeus y una hija de Deméter estén juntos y estos dos tengan un descendiente que será el favorito del olimpo y el obtendrá la labor de iniciar de nuevo el olimpo.


Ella al saber eso le tuvo que decir a su amiga lo que sucedía, antes de que le rompieran el corazón, cuando se entero su corazón se rompió, pero intento que no se diera cuenta y funciono, cuando se fue ella también salió hacía las montañas, cerca de ahí había un acantilado y un prado de flores.
Pero ella iba rumbo a el acantilado, Apolo estaba con el atardecer así el no se daría cuenta de lo que estaba por hacer y eso era suicidarse. Ella no tenia previsto que la Diosa Artemisa hermana de Apolo había salido a cazar, y como cosa del destino se la encontró. Al verla tan tarde le preguntó si sucedía algo, ya que a la Diosa siempre le ha importado la mujer de su hermano, ella la vio y le dijo

-El señor Apolo, me sito en el prado, dijo que era una sorpresa.


Dijo muy calmada y tranquila, por lo cual ella le creyó y se fue para que no sospechara, pero la verdad era que iba a hablar con su hermano porque no era prudente dejar a una persona como Anastasia sola en la noche.
Al llegar al Olimpo vio a su hermano y fue a hablar con el seriamente, lo que ella no sabia era que era muy tarde, debido a que Anastasia ya se había suicidado.
Apolo al enterarse de eso no saco el sol durante meses, su tristeza no tenia fin, al igual que Hermes que dejaba que los ladrones hicieran de todo, no le importaba, Ares no ayudaba en la guerra le daba igual, Zeus estaba enojado con ellos, pero los entendía su dolor.
No paso mucho para que Zeus convocara una junta y ahí llevó al oráculo, nadie comprendía el porque Zeus lo había situado, Zeus dijo que los sito a todos por el problema de Apolo, Hermes y Ares, y que el Oráculo contestaría la pregunta para tranquilizar a todos.


-Oráculo, dime si mis hijos volverán a la normalidad.


El oráculo empezó a emanar unas especies de fotos, de un hombre y una mujer, aunque el hombre no se veía de la cara y dijo.


Alterado fue el destino, un nuevo futuro depara al olimpo, todo sucederá cuando tres hermanos hijos de Zeus peleen por una mujer y después por una descendiente semidiosa de Deméter, pero para su nacimiento pasaran diez mil años, el olimpo puede perecer, pero se puede evitar, antes de su cumpleaños numero veintitrés deberá tener un descendiente, cuyo destino es ser el favorito del Olimpo.


Todos los dioses quedaron sin habla, unos veían a Deméter, otros a Apolo, Ares y Hermes, ya que era evidente que de ellos trataba la profecía, Zeus interrumpió a todos los Dioses


-Todos, seguiremos como hasta ahorra todos esperaremos hasta ese momento, Deméter buena suerte, Apolo, Ares, Hermes suerte en esta aventura, la necesitarán, todos ya se pueden ir.




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