Tu Dueño
Capitulo.2
Nos dejan aquí en este cuarto, pero aun permanecemos atadas de las manos me levanto y me acerco a la ventana, logro darme cuenta que estamos en una especie de finca pues no veo ninguna casa cerca las ventanas están aseguradas con unos barrotes de hierro lo cual nos impediría salir por aquí. Aparte que estamos en un segundo piso. Se acerca Laura y Lorena ellas también quieren mirar en donde estamos lo que logramos ver es que hay varios hombres armados y parece ser una casa grande. ¿Será una casa de alguna mafia? Me pregunto
Lorena asustada pregunta ¿de quién será? ¿Por qué nos trajeron aquí?
¿Será que nos vendieron? ¿Qué vamos hacer? Comenta Laura mientras que todo su cuerpo no deja de temblar
La puerta se abre y nos apresuramos a sentarnos de nuevo
Entra un joven es alto piel morena ojos color café de cuerpo delgado cabello negó y corto su tono de voz es suave, ¿les traigo comida? No pregunta, se nos acerca con amabilidad nos suelta las manos y se marcha.
No sé por qué pero sentí en su forma de hablarnos que no es una mala persona como los otros, además es el más joven que he visto en esta casa.
El tiempo transcurre y de pronto llega otro carro no logro ver bien desde esta ventana por que unos albores nos tapa la vista. Laura está tranquila sentada en un rincón del cuarto no. Creó que no se siente bien. Mientras que Lorena está inquieta se mueve de lado a lado del cuarto.
Se escucha ruido afuera parece que se acerca alguien.
Se abre la puerta y entran varias chicas y se cierra de nuevo la puerta creo que son 5 chicas todas de diferente edad. Lorena y yo las ayudamos a soltar las ataduras de sus manos todas están asustadas al igual que nosotras comienzo hablar con ellas y a ellas le paso casi lo mismo que a nosotras las tuvieron encerradas y luego las trajeron aquí.
Se hace de noche y todas nos acomodamos como podemos para poder dormir un poco me acerco a Laura y me doy cuenta que no se encuentra bien creo que tiene un poco de fiebre
Lorena se hace al otro lado de Laura y las tres nos juntamos para poder cuidarnos.
Pasa la noche y a pesar de dormir poco Laura parece un poco mejor, me preocupa ella me dice que siente dolor en el estómago ¿qué puedo hacer? en la mañana cuando aquel joven entro para darnos comida yo me acerco a él y le pido que por favor me ayude, que mi amiga está enferma que tiene fiebre y le duele el estómago. El me responde que tratara de conseguir algún medicamento pero no me asegura nada.
Tal y como pensé el no parece ser tan malo como los demás, me pregunto por qué estará con ellos Lorena y yo tratamos de que Laura coma algo pero parece que no mejora ¡¡rallos!! ¿Qué puedo hacer como puedo ayudarla?
Yo le respondo que ya es casi de noche y Laura no parece que mejore se queja constantemente de dolor en el estómago.
Ya amaneció ya casi es la hora en que traen la comida la puerta se abre y si es el joven al cual yo le pedí el favor ayer.
Luego de dejar la comida con mucha discreción se acerca y me da un medicamento y en voz baja me dice espero le sirva fue lo que pude conseguir yo le agradezco él se marcha.
Le damos la medicina a Laura con esperanza que le ayude mientras que esperamos que mejore me pregunto cuál será el nombre de aquel joven.
Lorena se encuentra algo ansiosa entonces dice:
Tal como nos dijeron a nosotras, aparte que hay varios hombres armados por todo el lugar.
Y la verdad, en las condiciones que se encuentra Laura no me atrevo hacer nada pues ella no tendría fuerza para escapar.
Con gran frustración Lorena se sienta tratando de calmar su ira
De nuevo la puerta se abre pero esta vez entro un hombre no muy alto piel morena como de unos 30 años está muy bien vestido tiene una mirada amenazadora y perversa que da escalofríos su voz es gruesa tiene consigo muchas joyas cadenas, anillos, pulsera es muy llamativo lo acompañan varios hombres armados y nos dice:
- ¿cómo están mis mujeres?
< ¿Sus mujeres? ¿A qué se refiere con sus mujeres? >
Continua diciendo me presento de ahora en adelante yo seré su dueño el que decidirá que pasara con cada una de ustedes. Buen vamos a ver que me trajeron esta vez.
Y se acerca para observarnos a todas su cara parece alegre como cuando le dan un juguete nuevo a un niño. << Parece que esta vez trajeron mercancía de buena calidad>> dicen aquel hombre ha por cierto me pueden llamar señor juan o don juan porque lo de señor me hacer viejo Jajaja y se dirige hacia sus hombres y les dice