El hospital.

Nambsheim, Francia.

25 de Julio, 2017.

Hora: 08:00 pm

Si ya de por sí cuando te imaginas perder a una persona especial es doloroso, que tu hermana esté al borde de la muerte lo es aún más, no puedo imaginarme perdiendo a la persona que más quiero en el mundo, mi gemela. El dolor y la desesperación que siento al ver que los doctores entran y salen de aquella habitación donde se encuentra mi otra mitad, sin que te den una noticia, y ver a tus padres llorando desesperadamente, es algo que no le deseas a nadie.

Mientras veo como los doctores se mueven de aquí para allá sin decirnos nada sobre cómo se encuentra mi hermana decido levantarme he ir a la cafetería, no soporto ver a mamá llorar, he tratado de ser fuerte y de no derrumbarme a su lado, pero ¡diablos!, es jodidamente difícil cuando la vida de tu hermana está en riesgo. No puedo dejar de sentirme culpable de aquel accidente que dejó la vida de mi hermana en peligro, si ella no hubiera llegado a casa alterada, si ella hubiera estado más calmada... Si yo hubiera sabido que era lo que le pasaba, que la tenía tan alterada no estuviera yaciente en aquella cama debatiendo entre la vida y la muerte.

"No te importan los demás", "solo te importa tu felicidad", "ser perfecta".

Esas fueron las palabras de Hannah, sin duda me dolieron, jamás hubiera pensado que mi hermana pensara esas cosas sobre mi.

"Todo es tu culpa, Allison"

Pero esas palabras, sus últimas palabras antes del accidente, fueron arrancadas con tanto odio, no entendía el trato de Hannah ese día, y hasta ahora no lo entiendo, solo espero que pueda superar este obstáculo, necesito a mi hermana, necesito a mi cómplice, no me puedo imaginar el otro lado del mundo sin ella.

Sentí unos brazos a mi alrededor y me derrumbé en ellos, Liam se encontraba aquí a mi lado dándome ánimos en aquel momento tan difícil, pero no estaba bien. Él no debía estar aquí, me aleje un poco y miré sus ojos tan oscuros como la noche que hacen contraste con su pálida piel.

- Tu no debes estar aquí - dije al separarme.

- Escuchame, sé lo que pudo haberle pasado a Hannah.

- Fue un accidente, yo presencié lo sucedido, Liam.

- Nada es lo que crees, Allison. Alguien intentó asesinar a Hannah y hará lo mismo contigo.

- ¿De qué estás hablando?

- Te lo explicaré todo con el tiempo, Allison. Pero no debes confiar ni en tu padre.

- ¿Qué tiene que ver mi papá en esto?

- Ya te dije que te lo explicaré todo, solo prometeme que mantendrás el secreto.

- Liam, yo…

- No salgas sola en ningún momento - me interrumpió - Prometelo.

- Lo prometo.

- Ahora, sube y actúa con normalidad - me ordenó - mañana pasaré por tí y hablaremos de todo lo que quieras saber - dijo y se alejó a paso decidido.

Como me ordenó subí a encontrarme con mis padres, pero ellos ya no se encontraban en la sala de espera.

- ¿tú eres Allison? - preguntó una enfermera, yo asentí - Siento mucho lo de tu hermana, tus padres se están despidiendo de ella.

En ese momento sentí como mi vida se derrumbaba en cuestión de segundos, en la habitación mi mamá se encontraba desesperada aferrada al cadáver sin vida de Hannah, mi hermana, mi otra mitad. Las lágrimas comenzaron a salir desesperadamente de mis ojos y mis piernas flaquearon haciéndome caer de rodillas frente a aquella cama de hospital, mi vista se volvió borrosa y solo escuchaba los lamentos de mis padres, hasta que todo se torno oscuro.

Mis párpados pesaban, la habitación me daba vueltas y el irritante sonido de mi celular no paraba. Como pude lo tomé y observé las 15 llamadas perdidas de un número desconocido con 2 mensajes del mismo número.

Desconocido: Lamentamos lo de tu hermana.

Desconocido: Pero tu eres la siguiente.

Las palabras de Liam llegaron a mi mente, “Alguien intentó asesinar a Hannah” “hará lo mismo contigo”.

Pero Liam se equivocó, no habían intentado asesinar a Hannah, la habían asesinado y con eso se habían llevado parte de mí también.