Despues de una temporada de arduo trabajo torturando a la UAC, decidí tomarme unas vacaciones y dejarlos descansar de mi. Ya suficiente les quemé la cabeza.
No estan ni cerca de atraparme y eso me decepciona un poco, pero esto de jugar al gato y al raton ya me aburrió.
Planeo dedicarme a cuidar el jardin, 46 rosedales no se cuidan solos. Ademas, me enteré que Sammy se tomó una licencia forzada, lo cual supongo fue idea de Butler porque ella jamás dejaria el trabajo.
Escucho un ruido en la entrada y automaticamente agarro mi 9mm. Lentamente me acerco a la puerta y la abro de golpe para sorprender a quien se encuentre fuera. Un mapache. Me río mientras guardo el arma y cuando iba a girar para agarrar un pedazo de pan, todo se volvio negro.
Al despertar, está ahí mirandome.
―Que bueno que sos vos ― intento moverme pero las cuerdas en mis muñecas me lo impiden. ―¿Que haces? ― digo mientras se acerca a una caja.
―Resulta que cuando tu complice toma decisiones sin consultarte, afecta tu vida en general. Estan sospechando, no puedo arriesgarme a que te atrapen y les contes todo ― abre la caja y veo como saca sus tijeras de podar y una rasuradora nueva. Mierda.
―Por favor, podemos resolverlo. Jamás te delataría y lo sabes ― digo suplicando.
―Si, si. Lo sé. Pero tambien sé que si te dejo vivir, en algun punto van a atar cabos y nos van a encontrar ― se coloca los guantes. ―No lo tomes personal, mi ultimo aprendiz tuvo el mismo destino que vos. Simplemente son herramientas para ayudarme un tiempo y despues las cambio ― saca el plastico y lo coloca a mi alrededor.
Dentro de mi, siempre supe que este momento iba a llegar, pero no imagine que iba a ser tan pronto. Me entrenó durante meses y ahora me desecha como basura.
Mientras arranca mis uñas, pienso en todo lo que pasamos juntos. Desde ese primer mensaje en la sala de chat del foro de asesinos, hasta el encuentro en la cafeteria cuando me mostro quien era realmente. Me enamoró desde el primer momento, y yo caí en la trampa como estaba predestinado.
―Por favor,― ahogo un grito ― te juro que nunca te voy a delatar. Sabes que sos lo mejor que tengo.
―Obvio soy lo mejor que tenes, porque soy lo unico que tenes ― dice con una risita dulce, como si no estuviese torturandome. ―Justamente por ese motivo estas aquí. Necesitabas alguien que te enseñe como matar, y yo estaba ahi para aprovechar la oportunidad de manipularte.
―Te amo ― un grito se escapa mientras arranca el primer diente. Mi destino esta sellado. ― Por favor, no hagas esto. Te amo.
―Ya pasará ― sigue con su trabajo y al terminar agarra el pelapapas. Su marca especial para huellas dactilares.
Entre momentos de lucidez en los que suplico, escucho su telefono sonando. Tapa mi boca con cinta, lo cual no es necesario porque jamás la delataria, pero es una garantia para ella. Responde y entiendo porque está haciendo todo esto.
―Hola Joshi ― responde alegre con una sonrisa mientras comienza a cortar todo mi pelo. ―Si, pasta me parece una buena opcion. ¿Me esperas en casa y vamos juntos? Yo ya estoy por salir del cementerio ― sigue rasurandome. ―Yo tambien te quiero. Nos vemos en un rato.
Llorando, mientras ella me mira como si no fuese nada, cierro los ojos para siempre.