Tienes que recordar
Blake
Los guardaespaldas de Feddei me tomaron por lo hombros desarmándome y inmovilizándome, dos me sujetaban ejerciendo presión en mis hombros para que mis rodillas tocaran el piso, lo cual me negaba a hacer, luchaba forcejeando ya no dejaría que me sobajaran y sometieran como a ellos se les antojara, tenia que formar un nuevo carácter.
— Suéltenme. — hable entre dientes, algunos de los golpes de la pelea me habían echo efecto por la mañana, no quería demostrarles ningún punto de debilidad. — ¿A caso están sordos o que les pasa? — la fuerza de ambos comenzaba a hacerme daño, había peleado con ellos y les había ganado, pero a decir verdad mi fuerza no se comparaba en dada a la de ellos, tendría que pasar años para tener la mitad de fuerza como la que ellos tiene ahora. — Я сказал тебе отпустить меня, подчиняться своему боссу. — recordé lo que Feddei me decía, ellos no me iban a obedecer a menos que les hablara en mi idioma natal.
< Les dije que me soltaran, obedezcan a su jefe. >
En el momento que escucharon esa orden dudaron por un momento en soltarme, sabían a la perfección que no hablaba solo por hablar, vine aquí por algo y no me voy a ir sin eso, les conviene obedecerme.
— ¡Te dije que tu no eres jefe de nadie! — Feddei se vino contra mi estampándome en la pared. — ¡Me tienes harto niño! te crees lo que no eres, aquí no eres nadie yo soy el que manda, yo soy quien da las ordenes, soy yo el jefe de esta organización, la mafia es mía, hasta que yo no lo diga tu no eres nada ni nadie aquí. — me tomo por el cuello y estampo mi espalda dos veces mientras soltaba su discurso.
— ¡Y una mierda! soy el heredero por sangre y por apellido, este es mi legado, vine aquí para salvar a mi familia ya que tu no pudiste hacerlo con mis padres bilógicos, lo que yo digo se obedece y respeta, ¿me quieres preparar para ser el jefe? adelante prepárame pero prepárame bien, estoy harto de tus idioteces, y si tu no me das mi puesto lo tomare por las malas. — me solté de su agarre y salí de su despacho echo una furia, basta de dejar que me arrebaten todo, me quitaron mis sueños y a mi familia dos veces, me estaban rompiendo, me estaban destruyendo desde dentro, me convirtieron en un asesino, estaba muy frustrado de que todos pasaran por encima de mi, decidiendo por mi, necesitaba comenzar a tomar las riendas de mi vida.
Camine hasta el área de entrenamiento para ver a mis amigos, no se merecían el trato que les estaban dando, aunque una cosa si era clara, si nos quedaríamos aquí, también tenemos que saber como defendernos, sea combate cuerpo a cuerpo o con armas, me había quedado claro en la pelea de ayer, necesitaba prepararme bien, y también necesitaba que ellos se preparan.
— ¡Blake! — Karina corrió feliz hasta mi lugar y me tomo en un abrazo, correspondí a su abrazo besándole la frente, la veía como otra hermana, la aleje un poco examinándole todo el rostro asegurándome de los golpes que le habían provocado estuvieran siendo tratados y que no tuviera ninguno nuevo.
— Hola peque. — ella sonrió ante su apodo, no tenia mucha ciencia su apodo, le decía así por su baja estatura, y nunca pareció molestarle.
— ¿Estas bien?, Colton nos dijo que te fuiste echo una furia con Feddei. — Prien y Colton llegaron hasta el lugar donde Karina y yo estábamos.
— Estoy bien. — no quería preocuparlos y mucho menos quería que se sintieran culpables de mi pelea con Feddei. — tengo ganas de hacer algo con ustedes, es como si no pasara tiempo con ustedes desde hace un año.
Karina rio ante mi comentario, y ambos chicos me vieron con confusión frunciendo su ceño.
— ¿Qué pasa no quieren? — indague al no ver ninguna respuesta.
— ¿Podemos salir? — Prien fue el único que hablo, enarque una ceja confundido a su pregunta.
— ¿Cómo que si podemos salir?
— Blake tranquilo no te enojes. — Karina recostó su cabeza sobre mi pecho. — recuerda que no tenemos los mismos privilegios que tu, estamos en Rusia somo como los esclavos, mientras tu eres el Rey.
Me hacia hervir la sangre el que se sobajaran a tanto, no era su obligación estar aquí, y aún así estaban aquí apoyándome, lo mínimo que se merecen es una salida después de las semanas de mierda que llevamos, lo traje a que expusieran su vida, solo teniendo 17 y 16 años.
— Las cosas van a cambiar. — escuche los pasos de los escoltas de Feddei, sabia que me escuchaba. — el día de hoy los cuatro tenemos el día libre recorreremos la bella ciudad de San Petersburgo. — tome la mano de Karina dándome la vuelta pasando entre los hombres de Feddei y el, confiaba en que mis otros dos amigos me siguieran y no se quedaran parados sin saber que hacer.
— No di ninguna orden Blake. — escuche como Feddei quito el seguro de su arma, ya se había tardado en amenazarme con ella, no le hice caso, seguí caminando por el área de entrenamiento. — ¡Tienes cinco segundos para estar aquí niño! — Karina jalaba de mi brazo para que nos detuviéramos, pero eso no estaba en mis planes.
— Blake por favor. — Karina susurro deteniendo sus pasos.
— He sobrevivido hasta ahora, no quiero una bala Blake. — escuche el miedo en la voz de Colton.
— Blake detente no vinimos aquí para esto. — Prien intento detenerme pero lo esquive.
Escuche los pasos apresurados de al menos unos tres hombres, me detuve y le entregue la mano de Karina a Prien, saque mi arma de mi espalda quitándole el seguro en el camino y deteniéndola apuntándole en el centro de la frente a Feddei.
— Deje algo claro en tu despacho Feddei, sobre la vida de mis amigos, familia y mía decido yo y solo yo. — tenía el arma de los dos hombres apuntándome directo al cráneo, no dude, no baje el arma seguí apuntándole a Feddei. — Я новый босс, вы не собираетесь отдавать мне приказы и не собираетесь меня останавливать.