Capítulo 5: La sorpresa

Han pasado varios días desde que salí con Dante a conocer la ciudad y desde entonces no sé nada de él, bueno casi nada, lo he visto un par de veces en la secundaria pero siempre me evita, ya me cansé de buscarlo así que hoy no estoy interesada en llamar su atención, así que solo iré por mi almuerzo a la cafetería y después iré a sentarme bajo el arbol que me ha gustado tanto desde que llegué.

-Vaya Vaya, miren a quién tenemos aquí, a la niñita tonta y rídicula ¿Creíste que él te querría?

-Elsa, vete, no estoy de humor para pelear contigo

-¿En serio lo creíste?- escuchaba como ella se reía mientras por dentro yo me moría de rabia- ¿Porqué se enamoraría de alguien como tú?

-Por que yo si tengo cerebro- dije mientras tomaba mis cosas y me dirijia al salón de clases

-A mí no me hablas así estúpida, quién...- no dejé que terminara de hablar

-Y tú a mi no vienes a tratar de pisotearme y hacerme sentir mal- caminé lo más rápido que pude, aunque sentía unas ganas inmensas de llorar de rabia

El día pasó muy rápido en la escuela y era hora de ir a casa

-Ey chica- escuché a Anne hablar y tomarme del brazo- ¿Todo bien?

-Elsa de nuevo

-Tranquila pequeña, no dejes que esa bruja te haga sentir mal- decía Elian mientras me quitaba la mochila para cargarla él

-¿Porqué no cargas mi mochila tambien?- replicó Anne

-Porque tu no lo necesitas, ella sí, recuerda que cada que tú te sentías mal Dante y yo cargabamos tus cosas, ahora le toca a ella

-Gracias, pero no lo necesito, ¿Puedes devolverme mi mochila?- él hizo una mueca de disgusto pero me la entregó- bueno chicos hasta mañana

-Te acompañamos a casa, no te vamos a dejar ir así 

-Gracias- los tres fuimos hasta mi casa, durante el camino estuvimos riendonos de cualquier cosa- de nuevo gracias chicos, ¿Quieren pasar?

-No, muchas gracias- dijeron ambos

-Bueno, nos vemos después- entré a casa después de que los chicos salieron del jardín- ¿Nana? 

Todo estaba muy extraño aquí, mi nana no estaba por ningún lado hasta que ví en mi habitación a alguien acostado en mi cama

-¿Quién eres y qué quieres?- dije con la voz un tanto temerosa

-Quiero descansar un poco ¿Te molesta?

-Claro que sí, es mi cama, vayase ahora o llamaré a la policía- el hombre que se encontraba ahí se sentó al borde de la cama mirando hacía la ventana

-Linda forma de correrme hermanita- se giró un poco hasta poder verme y me regaló una de esas sonrisas burlonas

-Alejandro- estaba bastante sorprendida de verlo aquí, hace 4 años que no lo veía, me quedé estática hasta que reaccione y corrí a abrazarlo- te extrañé- dije entre lágrimas

-Y yo a tí mounstra- me abrazó y besó mi cabeza, estuvimos en mi cuarto hablando de las tantas aventuras que  tuvo en Colombia

-Mis niños bajen a comer- escuchamos a nana gritar desde la cocina y ambos fuímos ahí, terminamos de comer y Alex me ayudó con mis tareas

-Nana, voy a llevar a Triana a dónde te dije, no tardamos

-Claro, vayan con cuidado

-¿A dónde vamos Alex?

-Ya verás Triana

Tomé un sueter y mi hermano las llaves de su auto el cuál no había visto, lo sacó del garage

-Anda ven- me tomó de la mano, me abrió la puerta del copilóto y nos fuimos- necesito vendarte los ojos y ponerte ésto- eran unos audifonos antiruido, me los colocó y siguió con el auto en marcha después de varios minutos, sentí que alguien tomó mi mano y me guiaba por lo que parecía ser rampas, nos detuvimo un momento y quitó los audifonos y la venda- elige uno

Estabamos en un lugar dónde había muchos perros en adopción, me encataría llevarlos todos pero uno en especial llamó mi atención un golden retriver

-Ese, ¿Puedo tener ese cachorro?

-Claro que si, hermanita

Una chica lo sacó del corral dónde estaba 

-Vuelvo en un momento, pueden esperar afuera si lo desean

-Espere, llevaré otro cachorro- mi hermano empezó a dar vueltas por todo el lugar hasta que encontró un rottweiler- ese- la chica asintió y se llevó a los cachorros y nosotros fuimos a esperar a los perritos fuera de ahí

-Ambos fueron rescatados de condiciones muy lamentables, así sucede con la mayoría de los animalitos que tenemos aquí

-Lo lamento- dijo mi hermano

-Firme aquí y podrá llevarse a los cachorros en un momento- mi hermano terminó los tramites necesarios 

-Aquí tienen a estas preciosuras- dijo una chica entregandonos a los cachorros, bien aseados y con un moñito y un collar- ¿Quieren que grabemos el nombre de los cachorros?

-Sí por favor, el rottweiler se llamará Titán y el golden...

-Adam

Después del día tan emocionante que tuve llegamos a casa con todo lo necesario para los cachorros: comida, correas, tazones, camitas, juguetes,  mi día había mejorado por mucho hasta que Adam empezó a lloriquear y decidí llevarlo a dormír conmigo. Fue un día estupendo