Llevándole unas empanadas de carne a mi abuela, me choco con el presentador del lugar. Me pregunta si alfinal participaba con Marcus ya que no me veía practicando con él. Solo me precipité asentir con mi cabeza.
No me agrada mucho ese hombre, a su perro lo maltrata para que se aprenda un solo truco, se me hace innecesario. Yo a Marcus lo saco a correr por la plaza Ríos, algunas veces lo llevo en mi bicicleta y él aprende jugando, no siendo maltratado como la mascota de este hombre.
-"Estás bien? Te veo pálido"- me pregunta mi abuela un poco preocupada. -"No quiero que pierdas, yo confío en ti".
-"Estoy bien abuela, solo me quedé pensando."- Me siento al lado de ella y acaricio a Marcus. Él se subió arriba mío y me lamió la cara.
"La competencia canina va a comenzar en menos de 5 minutos, preparen a sus animales y les deseo mucha suerte" - dice una de las presentadoras del lugar.
-"Llegó la hora campeón"- le digo a Marcus. Ladra moviendo su cola. Nos dirijimos al lugar y comenzamos a exponer sus trucos. Estaba muy feliz de que salieran todos sin ninguna dificultad.
Quedamos en segundo lugar con la excusa que Marcus es un perro policía y el primero es de raza Caniche. En cambio los trucos de mi perro son más difíciles que los del primer ganador. "Bueno, al menos quedamos segundos."- le sonrío a Marcus.
Yendo a dónde se encontraba mi abuela veo a dos hombres altos hablando con ella. Apuro el ritmo para ver quiénes son esos.
-"...debes darnos ese dinero Carmen, sino el chico muere..."- le amenaza el morocho.
-"¿Quién va a morir?"- pregunto acercándome a ellos.
Los dos hombre se limitan a mirarme y se van. Me acerco a mi abuela y le pregunto cómo estaba y quiénes eran esos hombres. Ella con lágrimas en los ojos me responde que son hombres con los que había trabajado mi abuelo y les debía dinero.
Miro a Marcus y luego a mi abuela. Suspiro y rasco mi cabeza con los dedos. Estaba molesto, mi abuelo era una muy mala persona, aún muerto nos viene con problemas.
Al mirar a Marcus, veo que está tirado en el piso, rápidamente me acerqué a él y me fijé si respiraba, y sí lo hacía. En un momento empiezo a ver todo oscuro y noto como alguien me pega en la nuca con un posible bate...
*Bip- Bip- Bip- Bip-*
"Me pone histérico ese ruido, no lo soporto"- pienso. Sigo viendo todo oscuro.
"Al parecer un virus muy potente está acabando con el razonamiento de las personas, ¡se vuelven totalmente locas!, ¡atacan a cualquiera que esté cerca de ellos mordiéndoles o sacándoles carne de su cuerpo, podríamos decir que se convirtieron en caníbales! No tenemos más información al respecto, esperemos que esto no vaya a más lugares, sino, esto se convertirá en un apocalipsis. Recemos y oremos por las personas que están pasando por esto,¡juntos podemos!", dice un periodista del noticiero que se escucha de fondo...
"¡NO, NO, NO, NO...!"