—Moila: ¡A MI NO ME GRITAS! ¿¡me estas amenazando!?
—Reachel: ¡entonces no te metas donde no te importa!
—Moila: no me digas que te avergüenzas de la realidad de tus padres que tu mama es una puta y tu papa un estafador.
esa fue la gota que derramo el vaso, no me aguante mas y me tire sobre ella y le jale el cabello y ella también me jalaba a mi hasta que sentí que me quitaban de sobre de ella, la quiero matar.
—Reachel: ¡SUÉLTAME! ¡QUE ME SUELTES TE DIGO!
—Fernando: te suelto siempre y cuando te calmes porque si no te calmas no te suelto—seño regale me un permiso para bajar con ella mientras usted tranquiliza a la otra chica—asintió—y nosotras también queremos ir con ellos seño, somos sus amigas—esta bien vayan y no se demoren después que vengan yo hablo con ellas.
—Reachel: ya suéltame—me solté de Fernando y baje las escaleras y llorando les digo—me tiene cansada, pensé que podía soportarla pero no puedo yo no le he hecho nada a ella y mis padres tampoco que estoy pagando para merecer este trato de ellas dos, en ves de ayudarme me agreden ya no puedo mas—Fernando se acerca a mi y recuesta mi cabeza en su pecho y acaricio mi cabellos para que me tranquilice.
—Fernando: cálmate, si sabes que eso no es así, no te ponga mal ella solo están buscando verte así salida de ti no le des ese gusto por favor.
—Laura: el chico tiene razon Reachel, aun no conozco la historia de tus padres apenas estamos comenzando una amistad pero algo me dice que eso no es así, no te pongas con las idioteces de ella, porque evidentemente ella ganaría por experiencia, ignórala y déjala callada con buenos argumentos que la dejen mal a ella.
—Reachel: pero no me gusta que hable así de mis padres—me separo de Fernando—me enerva que hable así de mis padres, mis papa no eran así.
—Cristina: lo se amiga, no te dejes ganar por ella, llenate de serenidad aunque por dentro te estés muriendo se mas inteligente que ella. ella es un poco escasa de cerebro.
—¿estas bien?—me paralice al escuchar su voz, me quede muda y quien hablo fue Fernando.
—Fernando: ya esta un poco calmada.
—Sebastian: eso me alegra, yo quería que me respondieras tu Reachel.
—Reachel: te iba a decir lo mismo, no tienes porque preocuparte.
—Sebastian: podemos hablar los dos a sola Reachel.
—Reachel: para que lo que quieras decirme dilo aquí.
—Sebastian: por favor.
—Reachel: ok, solo te doy cinco minuto para decirme lo que me vas a decir.
Nos alejamos un poco de los chicos.
—Reachel: dime que quieres decirme.
Sebastian: te veías muy abrazada al chico nuevo.
—Reachel: solo me estaba apoyando y ademas no tengo porque darte explicaciones.
—Sebastian: no yo se que no debes darme explicaciones, pero como que el beso que nos dimos no significo nada para ti.
—Reachel: jajajaj por favor no me hagas reír—risa irónica—tu me estas diciendo eso a mi, la persona que le gusta besarse por lo pasillos, no seas ridículo Sebastian.
—Sebastian: dejame explicarte yo no quería, ella fue la que me beso.
—Reachel: todos son iguales, tiran la piedra y esconde la mano, aunque no querías se te notaba muy gustoso, pero eso no importa no me tienes que dar explicaciones y si no tienes mas nada que decir me voy.
MariaGu❤️