—Sebastian: quee!— vocifero— porque... ? dímelo a mi a parte.
—Reachel: no lo siento tiene que ser todo o si no, no te enteras de nada no voy a repetir lo mismo dos veces, así que por favor di que si— le hice unos pucheros.
—Sebastian: ¡ahh!— volteo los ojos— como decirte que no con esa carita— acaricio mi mentón con su manos suavemente— pero que tu amigo no se meta conmigo.
—Reachel: tu tampoco te vayas a meter con él por favor, procuren de que no haya más discusiones.
—Sebastian: bueno yo no prometo nada, mientras él no se meta conmigo todo perfecto.
—Reachel: si ves...!! que tu tampoco colaboras.
Nos dirijimos donde se encuentran los chicos con Sofia.
—Reachel: llegamos chicos— todos tenía cara de pocos amigos— ¿que les pasa?
—Cristina: Sofia se rehúsa en hablarnos, nosotras no le hemos hecho nada— mientras Sebastian y Fernando se miraban por encima del hombro.
—Reachel: chicos puedo hablar con ustedes— Sebastian—. lo llamo y el me mira— esperas cinco minuticos mientras hablo con ellos— asintió.
No fuimos para una esquina del salón y los reprendo.
—Recahel: chicas miren primero que todo Laura tienes que ser prudente y si tienes ganas de decir algo a una persona se busca el momento y el lugar adecuado para hablar porque no se sabe como esta la otra persona y vaya a reaccionar mal, porque no en todo los momentos y en todo los lugares puedes decir lo que piensas tenemos que notar como esta la otra persona como esta de animo y si se ve bien pues se habla pero no si no es mejor callárselo y Sofia cuando sientas que no estas de animo y puedes hacerle daño a las personas que están a tu alrededor con lo que puedas expresar es mejor alejarse y calmarse y dejar que todos esos sentimientos de rabia, de confusión sea cual sea el sentimiento lo más recomendable es alejarse y regresar cuando ya todo ese mal genio o mal rato haya pasado y el tema sobre Fernando y Sofia lo dejamos donde esta ese tema no se toca más ya que ellos quieran mientra hasta aquí, si ello siente algo por ambos que sea ellos mismo quien los descifre y si ellos tienen que hablar algo relacionado con eso que lo hagan a solas porque eso no es problema nuestro que si ellos nos quieren compartir algo que sea decisión de ellos no de nosotros sea para un consejo o lo ayudemos hallar una salida mientras quedamos todos callados, escucharon— asintieron— bueno perfecto vamos que puede venir cualquier profesor y no voy a poder terminar de echarle mi suceso.
Nos acercamos donde esta Sebastian y cada uno toma asiento alrededor mío, entre Sebastian y Fernando se siente una pequeña tensión pero nada que no se pueda manejar y comienzo a relatar.
—Reachel: voy hablar y no quiero que nadie me interrumpa cuando yo termine de hablar se hacen las preguntas— todos me mira expectantes diciéndome continua con la mirada— como les venía diciendo siento cansada y esta vez voy hablar de manera clara y sin que la voz se me quiebre porque es tanto mi cansancio que ya se me secaron los ojos ya ni una lagrima me brota y si hay no permitiré que caigan, no tengo fuerza para llevar acabo esta guerra solo quiero desaparecer y descansar de un todo de esta complicada vida, pensé que podría aguantar un poco más esta situación pero hoy me veo obligada a decir que no puedo esta batalla que Dios me puso a mi me esta quedando muy grande, mis fuerzas están tan desgastadas que la única fuerza que me queda es para poder respirar, porque para luchar no tengo, se preguntaran porque estoy diciendo esto si yo no tenía esa opinión pues lo que pasa que ayer salí a caminar con Sebastian— las chicas me miraron sorprendidas— cuando regresé a casa no contaba de que mi abuela estuviera allí, ella me pregunto de que quien era Sebastian y no respetaba la casa por estar besándome— a la chicas y a Fernando se le abrieron los ojos y Sebastian solo sonreía en la calle— que, que irán a pensar los vecinos yo le conteste que a mi no me importaba lo que los vecinos pensaran de mi que me daba igual y que yo no estaba haciendo nada malo, nada que ella no hizo cuando era joven y me alzo la voz diciendo que la respetara que si me quería convertir en una cualquiera fue algo que me dolió pero no le di mucha importancia y Moila como nunca la llaman pero igual ella se mete sola donde no la han llamado y le siguió la corriente a mi abuela , yo le conteste a ella que no me hiciera reír que por lo menos yo mantengo mi orgullo y dignidad que no necesitaba ser una cualquiera como ella y miles de cosas más ofensivas que se me pasarón por la mente y que si estaban buscando hacerme sentir mal pues que no lo lograron y era la verdad pero que si hice sentir mal fue a otra, pero tampoco me sentía feliz por lo que le había dicho yo no soy así pero tocaba darle un poquito de su propia medicina— hacía una reverencia con las puntas de mis dedos— quizás ella no consiguieron hacerme sentir mal con lo anterior pero con lo que mi abuela me dijo, fue la última estocada para que mi corazón se hiciera añicos que me odiaba y que soy lo peor que ha podido existir que hubiese sido mejor que nunca hubiera aparecido en la vida de su hija, eso último mató las poquitas ganas que tenía para seguir luchando y querer salir de este hueco que cada día más me consume y poco a poco se cierra, no crean aveces me pregunto que fue lo que yo hice malo para ganarme el odio de mi abuela y con ella el de Moila; no se si es que la vida esta tratando de darme una lección y si me pongo a retroceder toda mi vida no pienso haber hecho una falta tan grande para que me este estropeando de esta manera, me siento así como cuando se siembra una semilla para que nazca ahí una planta en una tierra fértil, nunca va poder salir y ver la luz siempre se va hallar ahí metida en ese hueco sin poder apreciar lo lindo que tiene el mundo, se siente inútil antes las demás, que solo ocupa espacio y que su lugar podría estar otra y no ella pero hay momento que le hecha la culpa a la vida por no haberla ubicado en otro lugar donde ella si pudiera salir y mostrar todo lo bonito de su ser y así me siento yo y no vale la pena llorar por lo mismo de siempre ya no más con llorar no voy a solucionar nada y solo me queda decirle eso me cansé y no quiero agobiarlos más con mis problemas.