Capitulo 65

El líquido sanguinolento y pegajoso llenó sus encías, haciendo que Bai Qingqing sintiera náuseas. Quería vomitar, pero su boca estaba bloqueada por la de Cortis, lo que le impedía hacerlo. Lo único que podía hacer era luchar y balancear sus piernas salvajemente contra su cuerpo de serpiente.

Cortis redujo la velocidad a la que transfirió sangre de su boca a la de ella, mordiendo sus labios y presionando sus labios aún más cerca de los de ella.

Después de que finalmente terminó de alimentarla, Cortis soltó a Bai Qingqing. Antes de irse, convenientemente lamió las manchas de sangre de sus labios.

Bai Qingqing levantó la mano y lo abofeteó con fuerza. La sensación de agitación en su estómago hizo que sus ojos se llenaran de lágrimas. Claramente, ella era la que abofeteaba a alguien, pero se parecía a la que estaba siendo abofeteada.

Cortis agarró la mano suave y pequeña de Bai Qingqing y le preguntó con ternura: "¿Te duele?"

Bai Qingqing retiró con fuerza la mano, sintiendo como si hubiera golpeado el algodón con el puño. Su ira no fue apaciguada y, en cambio, se sintió aún más molesta ahora. El sabor oxidado de la sangre aún permanecía en su boca, pegajoso y repugnante.

"Chillido-"

El chillido de un águila se escuchó desde los cielos. Un águila gigante negra estaba de pie en la rama de un árbol por encima de ellos, mirándolos con sus redondos ojos de águila.

No es que la velocidad de Moore fuera más rápida que la de Cortis. Aunque, cuando miras una montaña, puede parecer cerca, en realidad fue una distancia bastante larga a pie.

No importa lo rápido que fuera Cortis, tenía que subir las colinas que se curvaban y giraban. Por otro lado, Moore estaba en los cielos, por lo que pudo tomar la ruta más rápida entre dos puntos. De hecho, incluso tuvo tiempo suficiente para descansar.

Cortis levantó la cabeza y miró hacia arriba, moviendo la cola y continuando su viaje.

"¡Quiero enjuagarme la boca!" Bai Qingqing dijo con firmeza.

Cortis sintió que Bai Qingqing acababa de beber agua y no necesitaba beber más, por lo que no le respondió.

Bai Qingqing siguió moviéndose inquieto en los brazos de Cortis y despotricando sin descanso. “Quiero enjuagarme la boca y lavarme la cara. ¡Mi cuerpo está cubierto de sangre, no puedo soportarlo más! "

Cortis finalmente cedió. Aunque todavía no respondió, en medio de los gritos de la hembra, se arrastró hasta un río.

Fue solo entonces que Bai Qingqing se calmó. Corrió hacia el río, se ahuecó las manos con agua y se enjuagó la boca varias veces, luego bebió mucha agua. Ahora se sentía más cómoda.

También limpió la parte superior de su tubo, que estaba cubierta de manchas de sangre. Ahora que el olor a sangre había desaparecido, el hedor a huevos atacó sus sentidos una vez más.

Golpeada por una idea, Bai Qingqing de repente detuvo sus acciones. El olor de los huevos de la bestia gigante no se puede eliminar, ¡pero puede cubrirse con otras cosas!

Su mirada recorrió la orilla del río. El barro haría el truco.

"Muy bien, continuemos nuestro camino". Cortis agarró la muñeca de Bai Qingqing y la levantó.

Bai Qingqing se mordió los labios. ¿Debería decírselo a Cortis?

Realmente no podía soportar ver a Cortis tan agotado. Sin embargo, esta era su mejor oportunidad para dejarlo. Quizás después de perder esta oportunidad, nunca podría volver a una vida normal.

Cortis no le dio mucho tiempo para dudar. Simplemente la levantó y comenzó a nadar.

Al ver cómo el río se alejaba cada vez más, la culpa abrumaba su furia hacia Cortis.

"Cortis", dijo Bai Qingqing suavemente, "pásame al hombre bestia águila".

El aura de Cortis de repente se volvió fría. Era como si su mirada hacia Bai Qingqing estuviera ahora cubierta de hielo. "¡En tus sueños!"

Con el corazón temblando, Bai Qingqing apretó los puños para envalentonarse y analizó con calma. “No llegaremos a la playa en uno o dos días. No puedes seguir adelante sin un descanso así. Vas a colapsar de agotamiento. Incluso si ignoras tu propio cuerpo, no podré tomarlo. Asuntos como ... hacer mis necesidades ".

Cortis dijo: “La marea de las bestias también tendrá que descansar. Descansaremos cuando se detengan. Vas a beber sangre de animal estos pocos días, por lo que tendrás poco para hacer caca ".

La muda Bai Qingqing sintió que Cortis la mataría algún día.