El pasarme varios días pensando en aquel momento donde él me dice que me olvide y que me aleje, se me hace los días más pesados, pero como cada día siempre debe de tener algo bueno y en ese momento donde yo me encontraba depresiva y derrumba, aparece por la puerta de mi habitación, mi mejor amigo, Samuel Evans, es ese amigo con el que puedes confiar en todo lo que quieras, con el que puedes contarle como y cuando te ha venido la menstruación, las cosas más intimas que no se las contaríais a un chico, pues aunque parezca algo bastante raro, es algo impresionante, porque no sé el porqué todas las chicas de este universo, no le contáis las cosas a vuestro amigo, es una cosa más normal, yo a Samuel le cuento todo lo que me pasa en mi día a día, y obviamente él a mi también me cuenta sus cosas, y lo mejor de todo es que es el único que me saca una sonrisa cuando no estoy en mis mejores momentos, os voy a contar las historia de como empezó mi amistad con Samu:
Bueno, parecerá todo bastante ir realista, pero todo esto empezó en primaria, donde yo, Bia era una de las personas más tímidas que podía haber en esa clase, como en todas las clases siempre está el listo, el pardillo, el que se come los mocos, la típica chica que siempre va vestida de rosa, el superdotado y yo la tímidilla del aula. Aunque ya os podréis haciendo una idea de quien era el superdotado, pues como no Samuel, pues hubo un día donde haciendo tiempo libre a mí se me cayó un vaso de agua encima y no solo con agua, sino que era un vaso de agua y pintura, y pues el único que me dio la ayuda fue Samuel, él era una persona muy divertida y pase de llevar siempre en mis días la timidez a llevar cada vez más alegría en mi vida, él es el que me da esa parte de diversión y ganas de seguir adelante, él estuvo conmigo en los malos y buenos momentos, como cuando mi padre falleció en un accidente de tráfico, donde en ese tiempo yo no tuve la mejor etapa de mi vida y lo pase fatal, pero él llegaba y me animaba a seguir adelante, así que para mí ha sido adémas de ser mi mejor amigo, un compañero de vida.
Es por eso que a las únicas personas a las que yo le cuento mis cosas más intimas son Samuel, Mia y mi diario, para mi son con los que puedo compartir mis secretos, esta es la historia de como conocí a Samuel.
Cuando él entro en mi habitación, anuncio en alto que este fin de semana nos iríamos a un hotel y yo le respondí:
-Vale, pero cuando iremos?-le dije con muy poco entusiasmo
-Pues hoy mismo así que ya puedes ir preparando las maletas porque nos vamos ya, yo ya tengo mis cosas en el coche de tu madre, faltan las tuyas- cuando me dijo eso me quede con una cara muy flipante, era todo tan rápido que parecía ser alucinante que estuviera pasando algo tan emocionante
-Pues ya voy a preparar mis cosas, pero te propongo algo, estos días que vamos a estar de vacaciones en el hotel vamos a dejar la tecnología de lado, te gusta mi propuesta?- en este momento no tenía muy claro si sería la mejor idea, pero por poner un poco más de diversión, no va a pasar nada malo
-Vengaaa!! Pero no tardes tanto que lo veo venir, y me parece muy bien tu idea-me digo con unas ganas inmensas
Cuando estábamos en el coche me llego un mensaje en de Alec en el que decía:
._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._._.
Lo siento por haberte dicho eso ayer, pero q.....
Pero en ese momento, como siempre me quede sin batería en el mi teléfono, y ya no pude llegar a leer el mensaje que me escribió Alec en ese momento, pero como ya habíamos llegado al hotel en el que íbamos a pasar nuestro gran fin de semana de relax y diversión sin tecnología decidimos apagar nuestros teléfonos, aunque el mío ya estaba más que apagado fuera de cobertura.
Como llegamos casi a mediodía, pues fuimos al bufete a llenarnos de comida y después fuimos a ponernos los bañadores para meternos un gran baño en la piscina...
Mientras Samu se estaba bañando en la piscina, yo estaba tomando el sol en mi hamaca con mi cocktail de sandia y fresas, pues no os podéis imaginar lo que podía ocurrir en este mismo momento, con lo bien que iba todo, tuvo que aparecer el príncipe y persona más guapa que podía existir Alec Himston, es que no sé como lo hago que tiene que aparecer hasta en mis mejores sueños, pues no tuve yo otra idea de invitarle a que estuviera con nosotros y me respondió:
-Pues si no te parece mal, pues yo estaría encantado de pasar tiempo con vosotros, pero vengo acompañado de mi mejor amiga, Sofia, si no os importa podemos bañarnos juntos en la piscina y pasarla bien- me pareció muy buena opción el poder pasar más tiempo con l, y encima en un sitio donde no fuera ni el instituto, ni la carretera que separaba nuestras casas
-Vale, me gusta tu idea, así podemos jugar a unos cuantos juegos y pasarla superbién los cuatro- le dije con unas ganas de pasar tiempo con él, y poder hablar y conocerle más de lo que es él por fuera, conocerlo más profundo, porque yo de él me sé lo más básico, que deporte le gusta jugar, qué edad tiene, etc.
-Pues venga, vamos al agua y a disfrutar de este día más soleado!!- dijo Samu con tanta alegría y diversión que corría por su cuerpo
En ese momento yo me adentré en la piscina, donde se encontraban Sofia y Samuel, conociéndose más y Alec...
Alec no sé donde estaba.
Lo busqué por toda la piscina y todo el jardén del hotel, hasta que vi al sirviente de cocktails haciéndome un gesto de hacia donde me tenía que dirigir, y me estaba señalando un camino de piedrecitas que me dirigía hacia una piscina de aguas termales, donde se encontraba Alec disfrutando de esa piscina, cuando llegue le dije:
Alec nose donde estaba.
Lo busque por toda la piscina y todo el jardin del hotel , hasta que vi al sirviente de cocktails haciendome un gesto de hacia donde me tenia que dirigir, y me estaba aseñalando un camino de piedrecitas que me dirijia hacia una piscina de aguas termales, donde se encontra Alec disfrutando de esa piscina, cuando llegue le dije: