CAPÍTULO 23- Un... ¿examen especial? Parte 3.
Tengo un punto de protección y, según la información que conseguí, el punto de protección es de las cosas más difíciles de conseguir. Se pueden comprar por 25,000 puntos, también es posible conseguirlos en algunas pruebas especiales y, por supuesto, logrando expulsar a alguien. Es difícil conseguirlo, pero no mucho, al menos no para personas como yo, sin miedo a las apuestas. Conseguir puntos positivos con tareas y los exámenes no sería suficiente. Tomé la decisión correcta.
Y lo mejor, puedo usarlo en otros. Si Sylphie está en riesgo de expulsión, se lo daré.
Sinceramente, dudo que me expulsen. No soy tan idiota como para apostar todos mis puntos sin estar seguro de mi victoria, y haré trampa en los exámenes, así que tampoco me preocupo por eso.
Pero más vale prevenir que lamentar. Me aseguraré de que Sylphie no sea expulsada, manteniendo el punto de protección. Eso sería lo mejor, así estaré seguro de que estaré a salvo y ella también. Una escuela tan rara como esta es impredecible.
Mmm... Ah, también podría venderlo por 20,000 puntos positivos y usar los puntos positivos que tengo para subir a la clase A... No, mejor no. Eso no sería tan divertido.
Quiero una vida escolar normal, y la disfrutaré sin atajos.
... Espera... Es cierto... Normal... Los chicos de mi edad se supone que están interesados en tener novia. ¿Debería conseguir una?
Tengo oportunidad con Sylphie, pero... Sinceramente, no me interesa tener una relación con ella. Si conseguiré novia, al menos quiero que tenga una personalidad fuerte y que no me traicione. Alguien que no dude en hacer algo para ganar y seguir adelante.
Sylphie es tímida y cobarde. No creo que me interese en alguien como ella.
Ah... Apenas es mi segunda semana de clases, después pensaré cómo conseguir una novia.
No es importante eso, así que puedo ignorarlo por ahora.
—Saik, ¿iremos a casa o te quedarás más tiempo?- Dijo Yuki, parada sobre mi cabeza.
¿Qué está mirando? Usa sus manos como si fueran unos binoculares. No veo nada. Supongo que solo está aburrida y busca algo interesante.
—Mmm... Creo que me iré. Pensaba ver el equipo de fútbol y baloncesto, pero mejor lo hago mañana. Tengo hambre, no he comido.
—¡Vamos a comer pastel!
Entonces comeremos pastel.
Mi segunda semana de clases está yendo bastante bien. Fui el primer estudiante de primer año que expulsó a otro, y fue uno de tercer año. Ser el mejor estudiante de primer año y el primero en conseguir miles de puntos positivos. Sí, lo estoy haciendo muy bien.
No me siento orgulloso de mí, porque lo logré haciendo trampas, pero eso no significa que no me sienta bien. El apellido de mi familia poco a poco está recuperando el prestigio que les hice perder.
—Saik, Saik, mira.
¿A quién le apuntas?
Ah, ya lo veo. Un chico subido de peso, llorando... ¿Y? El bullying existe en todas partes. Si no se defiende, es su culpa que siga sufriendo. No es complicado levantar los puños y defenderse.
—¡Seguramente él también fue víctima de ese tal Kirimo!
¿Quién...? Vaya, vaya.
—¿Q-qué?- Dijo Yuki, en shock.
Admito que es algo lindo. Una chica lo alcanzó y está besando a ese chico, mientras se toman de las manos.
—V-vaya, tiene novia. ¡Mira, Saik, hasta ese chico feo tiene novia y tú no! ¡¿No te da vergüenza?!
Seguí mi camino. La apariencia no tiene nada que ver con el amor. Enamorarse de la belleza no sería amor, sería lujuria.
—¿Quién es Kirimo?- Susurré.
—Es el bully de la escuela. ¡Golpea a cualquiera por simple diversión! ¡Uwaaaah! ¡Ahí, ahí está!- Dijo, apuntando a un chico enorme, que está abrazando del cuello a otros dos chicos.
Caminan como si fueran muy amigos, pero claramente ellos están asustados.
—¡Los va a llevar lejos para golpearlos! ¡Ayúdalos, Saik!
No me involucra ni me afecta, así que no, no haré nada. Lo siento, Yuki, pero me voy a casa. No quiero meterme en problemas innecesarios, peleando batallas de otros.
—Ya no soy adinerado, si me involucro y lo hago enojar, podría terminar en una bolsa de basura.- Dije, para que no siga insistiendo.
—¡Ay, e-es cierto! ¡Me dan miedo los millonarios...! Pero lo investigaré, tal vez tenga algo que podríamos usar en su contra.
Haz lo que quieras. Pero sí, tienes razón, investigarlo podría ser una buena idea. Lo mantendré vigilado, tal vez consiga algo bueno. Necesito más puntos positivos.
... Ah, que flojera.
Al salir de la escuela, pude sentir varias miradas sobre mí, y siento que serán molestas.
—Oye, tú. Queremos hablar contigo.
Ignoré las miradas y seguí mi camino.
¿Comer pastel otra vez? Es un poco repetitivo... Mmm... Creo que haré pasta. Una pasta roja, con queso rayado arriba y carne molida. Estoy salivando.
—Fufu. Parece que tienes agallas, chico.
Pero tardaré una hora o más en hacerla. ¿Qué podríamos comer por mientras? ¿Solo pastel...? ¿Qué? Ah, que flojera.
Una chica y un chico me tomaron de los brazos.
—¡¿Bullying?!- Dijo Yuki, preocupada.
No lo creo, estamos frente a la escuela, que es privada. Nadie es tan idiota como para intentar acosar a alguien frente a la escuela. En las escuelas públicas sí pasa, pero aquí, en un lugar donde la reputación lo es todo, dudo que hagan algo tan estúpido como el acoso escolar. Hasta el chico de antes lo sabe, se llevó a sus víctimas lejos de aquí.
—Ah... ¿Me hablaban a mí?
Una chica se paró frente a mí, la que, supongo, es la líder.
Tiene esa aura de líder autoritaria, rayando a dictador. Conocí a alguien como ella en el pasado. Las personas así son peligrosas, pero nada que no pueda controlar.
Wow. Y tiene fuertes brazos. Tiene una figura de una hermosa chica, pero sus brazos son fuertes y marcados. Delgados, pero fuertes. Su abdomen debe estar marcado... Wow. Interesante.