NOTA: la canción es muy importante en este
capitulo. THE REASON - Hoobastank.
Estoy recortando la sabana, para poder ver a través de ella, Verónica, me dijo que llegaba más tarde, igualmente la fiesta no empezaba hasta las 8:30 PM y son las 6:00PM, así que aún tenemos tiempo para arreglarlos.
Lo que me tiene desconcertada es haber visto a Daniel en el instituto, pero aún no sé si era él o alguien que se parecía mucho.
Termino de recortar los agujeros, hoy estoy vestida muy casualmente, por si me llego a quitar la sabana en la noche.
― ¿ya estás lista? ― pregunta mi madre entrando en la habitación.
― si ma, solo estoy esperando a Vero para irnos― respondo con una sonrisa falsa, pero bastante creíble.
―me gusta ver que has mejorado― ay, madre... si supieras que aun sigo muerta por dentro.
Solo asiento, guardo mi disfraz junto a unas gafas, como voy a manejar, aun no me lo puedo poner, me gusta ver como las personas se me quedan mirando cuando la manejo, como soy un poco bajita y la moto es un poco, demasiado grande, todos se quedan impactados.
Pero aún no se me quita la idea de haber podido pasar este día con él, no se verlo llegar y me digiera algo así como "mi lunita, ¿quieres ir al baile conmigo?", pero no, tenía que alejarlo, ¿Por qué soy tan idiota?, necesito su calor.
Una lagrima empieza recorrer mi rostro ― ¡TE NESECITOOOO! ― grite con toda mi fuerza, para luego caer de rodillas en el suelo.
―Mer ¿estás bien? ― me pregunta Vero, en su cara se ve la preocupación.
―lo necesito, no puedo seguir sin el― ella me abraza, en mi interior siento la misma paz que me traía el, ella se ha vuelto alguien muy especial para mí.
― ¿y a mí no me necesitas? ― me pregunta burlona para sacarme una sonrisa.
―claro que te necesito, sin ti yo no hubiera sobrevivido en ese lugar― le recalco.
―Mer sé que ahorita te duele mucho, pero te prometo que te ayudare a superarlo― me abraza más fuerte.
―gracias por aparecer en mi vida― ella me sonríe, a pesar de todo nosotras tenemos una química increíble, es algo raro de explicar, pero lo único que puedo decir es que se siente muy bien estar con ella.
―vamos― me ayuda a levantar y salimos de mi cuarto, como siempre los fines de semana mis padres salieron de la ciudad, así que podía llegar a la hora que yo quisiera.
Salimos de la casa, ella se coloca su casco, y yo me coloco el mío, nos subimos a la moto, nos vamos camino al instituto, ella me abraza de la cintura, no puedo decir que me siento incomoda, porque no es así, me siento protegida.
Llegamos al instituto, nos bajamos, corremos hacia los casilleros para guardar las maletas y los cascos, nos llevamos los disfraces al baño, nos empezamos a cambiar, en verdad es un buen disfraz, nos vemos simplemente fabulosas...
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Nos dirigimos hacia el lugar en donde está ubicado el baile, los pasillos del instituto están decorados, con fantasmas, calaveras, telarañas, arañas, zombis, calabazas, sombreros de brujas, hay un poco de humo, y las luces son azules con morado.
Al entrar al salón de baile, está decorado de la misma manera que los pasillos, el lugar aun no está lleno, pero no tardaran en aparecer los demás, nos acercamos a la barra de postres y bebidas, tienen un aspecto asqueroso, pero su sabor es delicioso, las bebidas parecen sangre, pero es como de sabor a cereza.
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Poco a poco la gente empezó a entrar y el lugar se está empezando a llenar, todos traen disfraces espeluznantes, también varias personas vinieron disfrazadas como nosotras, pero solo pasaban chocando los 5, como por aprobación o por el hecho de que nos vemos fabulosos disfrazados así.
El director empieza a hablar, dándole iniciación al baile y al show de canto. Empezó a llamar a los participantes a cantar, una chica se sube y empieza, tiene una bonita voz, mientras la miro en el escenario, puedo notar que un chico se está acercando a mí, pero... no sé ¿Quién es?, tiene una máscara, su cuerpo se me hace conocido, pero no sé.
Cuando está cerca de mí, me dice en oído si podemos hablar, al escuchar su voz ya se de quien se trata, eso confirma que la persona que vi la vez pasada si era Daniel.
Salimos del lugar para poder hablar bien, él se quita la máscara, efectivamente era Daniel, me emocione un poco al verlo, así que lo abrace y el correspondió a mi abrazo.
― ¿Dónde habías estado? ― pregunto un poco conmocionada.
―lejos, junto a él, no podía dejarlo solo― se a quien se refiere, en mi cara se nota la profunda tristeza.
― ¿Qué me querías decir? ― necesitaba saber que quería, para saber si Dimitri había venido con él.
―te voy a contar una historia, después de que lo haga la decisión es tuya― me dice en un tono serio.
Empieza a contar su historia, bueno no es suya, es de Dimitri, me conto todo lo que paso con él durante los 7 meses en los que me desaparecí, me conto sus citas en el psicólogo, como se volvió loco buscándome por toda la ciudad, las veces que fue a mi casa a buscarme, las veces que mis padres lo trataron mal por lo que me hizo, me conto desde su perspectiva el cambio físico y mental que tubo Dimitri. mientras me contaba todo lo que mi niño sufrió, no puede evitar que las lágrimas salieran de mi rostro, me estaba bombardeando, con datos que en verdad me dolían, me dolía la menara en que los expresaba, al igual que yo él estaba llorando, a él también le dolió ver a su mejor amigo así, me conto también lo de sus madres, lo unidas que eran, esa era la razón más fuerte por lo cual Daniel nunca lo abandono y dejo solo. Ya ha pasado como una hora y el finaliza su historia con un...
―él está pensando irse de la ciudad permanentemente, pero esta vez yo no podre acompañarlo en esta locura, el estará solo y eso me preocupa, no sé de que sea capaz de hacer― me mira a los ojos poniendo una de sus manos en mi hombro.