31 de diciembre de 2006
Holi soy Estrellita y hoy les voy a contar una pequeña historia, muy hermosa y fastidiosa a mi parecer.
Bueno, era año nuevo y como era de esperarse mi familia hizo una hermosísima fiesta, en la cual acudieron muchos amigos de mi padre, Pero mi padre había salido desde temprano, con la excusa de que tenia una sorpresa para mí, a lo cual yo me sentía demasiado feliz, me fui con mi nana a prepararme y ponerme muy hermosa para mi padre.
Estoy abajo en la fiesta con los hijos de los socios de papi, cuando de repente llego el, era demasiado grande, fornido y aterrador para una niña de 11 años como yo, pero algo de él me volvía loca.
Después de un gran rato llego mi padre, y del brazo se le coló una pelinegra de ojos color café hermosos, aparecí en su campo de visión y entonces se acercaron a mí.
- Hija, te presento a Yarisa, Yarisa te presento a mi hija Estrella- la mujer me miro y sonrió con falsedad
- Hola Estrellita, eres muy hermosa- dijo tocando mi nariz, ya verás cuando soy hermosa
- ¿Y ella quién es? - le pregunto a mi padre con una sonrisa inocente
- Es una amiga, cielo- dice mi padre a lo que la mujer lo mira mal y con superioridad- hija ¿por qué no vas a jugar con tus amigos?, tengo que hablar con la señorita Yarisa- dice y yo acepto
Me acerco al grupo de niños y cuando veo que mi padre ya no me esta viendo me voy a mi habitación para luego salir con un regalo para Yarisa. Me quedo en la sombra cuando de repente vuelve aparecer aquel hombre grande y fornido, también noto que Yarisa lo observa con coquetería. Ambos se acercan a la oscuridad discretamente, pero no notan que estoy ahí
- Eres tan hermoso- dice la amiguita de mi padre con una voz baja y sensual.
- Ya cállate- dice el hombre y la agarra del cuello, para besarla con ferocidad
El la entra mas para la oscuridad y la sigue besando, luego de un pequeño rato el hombre se la lleva hacia el jardín donde no hay nadie y está un poco más claro, pero están concentrados y no se percatan de que estoy ahí. Miro mi reloj, genial justo a tiempo, son las 11:59
Me acerco a ellos y un gemido muy fuerte de Yarisa resuena, pero es imperceptible con el sonido de los fuegos artificiales, aprovecho para clavar el regalo en su espalda, Pero me quedo quieta cuando veo que su cuerpo cae al piso sin vida, a lo que lo miro con horror, cuando me fije en algo, ella tenia un cuchillo en el estómago, ósea que él...
- ¿Por qué hiciste eso?, ¡la quería matar yo! - dije muy enojada con el jefe de mi padre.
- Pues llegaste tarde, ya la he matado yo-
- ¡Eres un idiota!, ¡era mi regalo de año nuevo! - digo con fastidio
- Cuidadito con tu vocabulario niña, no me hagas...- lo interrumpo
- ¿Hacer qué? ¿Qué gima como lo hacia ella?, aujajajj no harías nada, solo soy una niña de 11 añitos- digo y pongo mi cara inocente.
- Eso quisieras querida- dice y retira el cuchillo del estómago de Yarisa
- Bueno, de que lo quiero pos no, que lo anhele pos si- digo y pongo una sonrisa santurrona
- Estas muy pequeña aun, pero te prometo una cosa, cuando cumplas 18 te lo meteré y te hare gemir tanto que rogaras que lo haga toda tu asquerosa vida- dijo para luego salir de ahí.
- ¿Quién lo diría?, un asesino en serie respeta la edad de una mujer para hacerle algo tan placentero como es el sexo- digo para mi misma y llamo a los de limpieza para que retiren el cuerpo y limpien la escena del crimen, como siempre dijo mi papi, limpia los residuos y que nunca te atrapen.
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Editado: 23.03.2022